Tira su cabeza hacía atrás chocando con el cómodo asiento de su auto suspirando mientras espera a Sophia.
En la radio suena muse de fondo, su celular iba y venia entre sus dedos, se había acostumbrado tanto a ese artefacto cuándo algún humano lo creó que logró la forma de que en el infierno funcionarán.
Ladea la cabeza a un lado cuando la siente cerca.
Sonríe por dentro.
Ella esta con sus jeans negros chupines, una remera blanca y una chaqueta de cuero, unas zapatillas blancas como las de él y el pelo formaba una simpática cola de caballo.
Traga saliva al verla vestida con lo que él había mandado a comprar especialmente para ella, mueve su cabeza a ambos lados descontracturandose, y contiene el aire cuando toma asiento con delicadeza en el asiento del conductor.
—No esperaba menos categoría viniendo de vos.— Se burla cerrando la puerta del porsche.
—Gracias, suelo tener muy buen gusto.— La mira de arriba a abajo sin descaro guiñándole un ojo.
—Espero no sea robado.— Amenaza.
Thomas rueda los ojos ante su divertido humor.
—Yo consigo todo lo que quiero.— Le guiña un ojo de nuevo y ella niega con la cabeza.
—Lo dudo...— Murmura divertida, sabiendo que él quería su sangre y no la conseguía siempre.
—Tardaste.— Gruñe poniendo en marcha el auto.
Ella sonríe asintiendo mientras se colocaba el cinturón de seguridad, si tenía que pasar tiempo con él lo haría como corresponde: fastidiándolo.
—Sin embargo me esperaste, muy apurado no estabas.— Responde con seguridad.
—Porque no tenía nada mejor que hacer.— le retruca.
—Asi que mucho no te costo y si te molestaba esperarme, podía ir sola.— Suelta relajada.
Thomas aprieta su mandíbula ante su respuesta. —No necesitas ponértelo.— Asegura saliendo a la carretera.
—Sí, seguro.— Rueda los ojos acomodando mejor el cinturón de seguridad
Thomás cierra los ojos unos minutos mientras que relame sus labios...
—Estas segura conmigo.— Insiste.
Sophia hace caso omiso a su comentario y se deja el cinturón puesto.
—¿Por qué no me lleva Aron?— cuestiona mirando el camino.
—Te estoy llevando yo.— Responde de mal modo.
—Realmente si no el no podía al menos podría haberme dejado una explicación, o responderme los mensajes, no es que me desesperaba por ir hoy.— Bufa.
El solo aprieta las manos al volante, ¿cual era el problema que el la llevara? su ser interior comenzaba a tensarse.
—Por si te olvidaste es un demonio y necesita alimentarse... Además de que tiene trabajo para hacer, no estamos de vacaciones en el mundito de los humanos.— Sonríe con falsedad mirando a la rubia.
—No me dijo nada.— Sé queja más para ella misma que para el.
—Lamento si te molesta ir conmigo, pero es lo que te toca hoy, así que espero, princesa, que hagas las cosas fáciles para ambos, porque no estoy de humor y menos con paciencia.— Sonríe mirandola.
—¡¡No saques la vista de la calle!!— Exclama asustada.
Eso solo genera que él suelte una carcajada que la deja con escalofríos.
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DESTERRADOS
FantasyDos almas gemelas que no quieren estar juntas, compartiendo un destierro desde hace más de cincuenta años. Un amor inevitable que se hace cada vez más imposible con el correr de los años. El diablo enamorado de su ángel. Y su ángel asustada por su a...