DESTERRADOS

parte 30

Se deja caer sobre la cama y suelta un quejido molesto de ira y bronca.

Era tanta la impotencia que tenía que no sabia de que manera canalizar su ira para poder dejar de sentirse tan abrumado y por sobre todas las cosas menos histérico de lo que se encontraba.

—¡¡No puede estar pasándome esto!!— Aprieta sus labios y se queda mirando la nada...

Thomas de una manera sorprendente y gracias a que nadie lo esta viendo acaricia al gato mientras se viste, su cuerpo lo siente totalmente fuerte, pero tiene su mente completamente perturbada, sus respuestas, su mirada lo dejan aturdido de tal manera al punto de sentirse débil emocionalmente.

—Deberías de estar con ella bola de pelos, ¡Ella es quien importa!— Frunce sus labios molesto.

Si embargo, el gato no hace más que cambiar sus ojos a otra tonalidad y ronronearle, dejandole en claro que se quedaría en aquella habitación le gustara o no al diablo.

Despeja su cabeza y va por algo de tomar a la cocina.

La noche cae y junto con ella el viento frío característico de la zona.

Deja su vaso de sangre ya vacío sobre la bacha de la cocina y toma otro limpió para servir Bourbon, la mezcla de la sangre de Sophia y el Bourbon lo hace volverse loco, pero ya le estaba quedando poco de la primera y se estaba poniendo molesto, es por eso que el enfrentamiento en el baño lo puso de peor humor.

Ya perdió la cuenta de hace cuantos minutos lleva en la misma posición, perdido en sus pensamientos, intentando localizar a Aron para corroborar cuántos demonios de los 666 faltan matar, cierra sus ojos y acaricia su barbilla, cualquiera que lo conoce de sorprendería de verlo perdido en la soledad de su casa, sin estar perturbando a almas perdidas.

—"¡En cuanto te decidas aparecer y ayudarme con este maldito asunto te lo voy a agradecer!"— Se queja mediante el link que tiene hacia Aron.

Vuelve a bufar pasando una mano por su cabello al saber que no hay respuesta alguna.

Un ruido extraño lo hace arquear sus cejas y ponerse atento al exterior, pero no es mas que sophia bajando las escaleras, y lo descubre cuando siente su fragancia mucho mas intensa.

—Thomas... Lo.. Siento... No pude evitarlo...— Su voz tiembla, sus lágrimas caen por sus mejillas, parece que no hay descanso para la desgracia...

—Sophia... ¿Que estas diciendo?— Se da vuelta encontrándose con la rubia llena de cortes por todos sus brazos.

Él no los sintió por el efecto de la sangre fresca corriendo por sus venas a medida que estos se generaban, pero al mirar su buzo logra ver las manchas en él.

—Lo lamento...— Balbucea algo perdida por el shock y el dolor que recorre su cuerpo.

Thomas traga saliva en seco acercándose a ella de inmediato.

—¡¡Estaba aturdido con mis cosas!! ¡yo te tengo que pedir perdón!, ¡¡No lo vi venir!!— Se explica siendo totalmente honesto con ella.

Lo mira con sus labios temblando... —volvió...— Susurra bajito.

Sus parpados caen y los vuelve a levantar para chocar sus ojos azules con los de él.

—¡¡¡¿Qué carajos?!!— La analiza rápidamente preocupado.

Aprieta sus puños y se acerca finalmente del todo hacía ella a velocidad paranormal,

Sophia lo mira con sus ojos entrecerrados y tiembla estando frente a él. —¡¡Hace que pare por favor!!... No quiero sentir mas esto, Thomas...— Se arrodilla en el suelo y lleva una mano a su pecho.