Piero
Me encuentro mirando a la nada por la ventanilla de mi auto y vagamente mis pensamientos se dirigen a ese incidente de hace dias que me tiene tan marcado...
*Flashback*
Tengo una reunión de negocios y voy bastante retrasado, a pesar de que soy el accionista mayoritario no me gusta llegar tarde, joder lo odio. Ahora ando conduciendo como loco por las calles de Nueva York .
Tomo un atajo para asi llegar unos minutos antes. Sonrío para mis adentros al ver la calle un poco despejada y me dispongo a acelerar un poco más, peroooo... en ese mismo instante como por arte de magia se atraviesa una chica y mi coche la lanza por los aires. - la mate- pensé.
Rápidamente me bajo del coche para brindarle mi ayuda, me alivió ver que no estaba muerta. Una pequeña multitud se agrupo alrededor mientras yo llamaba a emergencias. Me agaché para saber como se sentía y pedirle perdón -(aunque realmente ella también tenia culpa al no fijarse antes de... pero este no es momento de reclamos)- sin embargo al verla mas de cerca me quedé gratamente sorprendido.
Tenía la piel tan impecable y perfecta,unos labios carnosos, ojos verdes que enamoran y un pelo castaño bastante brillante, en pocas palabras... la mujer mas bella y sexy que he conocido.- y créanme cuando les digo que he conocido muchas-.
Traté de calmarla asegurándole que todo estará bien, pero a pesar de mis esfuerzos para mantenerla consciente (y de paso saber un poco más de ella) se desmayó. Gracias a Dios que en ese preciso instante llegó la ambulancia y pudieron darle los primeros auxilios. Pedí que la lleven al mejor hospital de la ciudad.
*****
Me encuentro en la pequeña sala esperando resultados y no sé por qué me siento tan nervioso. Ha pasado media hora desque que llegamos y aun no me informan sobre su estado. En ese instante entra un señor de unos 50 y tantos años, supongo que es el doctor.-Es usted familiar de la señorita Marjorie Ferrara?- pregunta leyendo algo en su carpeta.
Me le quedo mirando como si estuviera hablando otro idioma. De repente reacciono - se refiere usted a la chica atropellada que fue traida hace media hora?
-Exactamente, tiene algún parentesco?- pregunta espectante.
-Fui yo quien la atropelló- respondí un poco avergonzado.
-Entiendo- asintió- La señorita Ferrara tiene dos costillas fracturadas y leves golpes en sus extremidades, pero independientemente de ello, esta fuera de cualquier peligro. En estos momentos la están preparando para llevarla a una habitación. Sólo que se quedará en observación unos dias.
A pesar de saber que no corría ningún peligro, no pude evitar sentirme culpable por lo sucedido. -Por favor que la trasladen a la mejor habitación privada- es lo menos que podia hacer.
*****
Estoy esperando saber el número de habitación de Marjorie - por cierto, me encanta su nombre- cuando de repente mi móvil suena... Es Gianluca uno de mis socios principales.-Ginoble- saludé lo mas educado posible.
- Barone tenemos que salir a Italia lo antes posible, hay un problema grave en la principal y requiere nuestra presencia.- tan directo como siempre.
- Me preocupas, tan grave es?- pregunto levantandome de mi asiento.
-Nada que no tenga solución, pero debemos estar allá yá. Te esperaré en el hotel.
- Perfecto, estaré contigo en 30 minutos- colgué.
Cuando creo que mi dia no puede ser peor, siempre le añaden algo mas. Me dirijo a recepción a compensar un poco mas el "daño" que habia causado...
-Soy Piero Barone, responsable de la señorita Marjorie Ferrara, he tenido una emergencia y debo marcharme pero necesito a alguien a su cuidado 24/7, todo corre por mi cuenta.
- Sí señor, pero debe firmar antes estos documentos. - respondió cortesmente la recepcionista tendiendome unos papeles.
-Una cosa más- le pedí al terminar- Tiene usted una tarjeta que me regale?
-Por supuesto.
-Podria enviarle un ramos de rosas blancas grande a su habitación, y de paso ponerle esta nota- le entregué la pequeña tarjeta que ya había escrito.
- Vaya tranquilo- me sonríe.
- Gracias- respondi, dandole mi sonrisa roba corazones... y se que funcionó porque la bonita rubia se sonrojó visiblemente. - que tenga buen dia- media vuelta y me fui.
*Fin del flashback*
No sé por que tengo tantas ganas de verla... quizás me sienta culpable por haberme ido sin disculparme personalmente - no será que te gusta la chica?, se burla mi conciencia- Eso no es posible- niego dentro de mi- yo no me enamoro, ya eso en mi vida no tiene prioridad... solo diversión y nada más.
Lo que más lamento es que aun no se cuando volveré a EEUU, las cosas aun no se resuelven del todo y por más que me guste la chica, no puedo tirar mi empresa. Para compensar mi falta me he dado la tarea de enviarle rosas blancas todos los días, con un msj deseando su pronta recuperación.
Marjorie
Han pasado cinco días desde mi accidente y aun no conozco a ese "Sr. Barone", me envía flores todos los días y msjs deseando que mejore, pero nada de su presencia.
En ese instante entra Ale a habitación con cara de felicidad, seguida del doctor Smith.- interrumpiendo mis pensamientos.
-Srta. Ferrara, vengo a informarle que ya esta dada de alta y puede irse a casa.
El alivio innunda mi ser, a pesar de que esta habitación no tiene nada que envidiarle a un hotel cinco estrellas, no hay lugar como el hogar.
-Solo le hare un chequeo de rutina y unas indicaciones por si siente alguna molestia- continuó diciendo el doctor.
*****
Me siento tan bien al estar de vuelta. Mi departamento no era muy grande que digamos, pero me hacia sentir acogida y en casa. Desde que me instalé supe que seria como un segundo hogar para mi, y bueno tampoco me sentía sola pues Katherine era una gran compañ... Ahora recuerdo con exactitud por que tal descuido al cruzar la calle. A mi mente vuelve la escena que me rompió en mil pedazos, el beso. Involuntariamente mis ojos se llenan de lágrimas y no puedo evitar estarllar en llanto.

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Sr. Barone
FanfictionDespues de haber sido atropellada por Piero Barone, Marjorie Ferrara se ve envuelta en una serie de situaciones que pondrán su vida en Jaque. "Resulta una gran verdad que el destino es una ley cuyo significado se nos escapa, porque nos faltan una in...