33- ¿Tú?

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Diciembre

Recuerdo como hace unos meses estabamos cenando todos juntos y hablando de la fista de navidad y ahora estoy aquí en el centro comercial buscando el atuendo adecuado. Sí, estamos en la recta final, dentro de poco será la fiesta en casa de los padres de Piero. Estoy super emocionada. Amo estas cosas!

Eleonora nos ha pedido ayuda y hemos pasado las últimas semanas organizando todo, es una mujer encantadora. Siento que en esta ocasión esta celebración será mucho mejor que las anteriores, algo me dice que marcará un antes y un despúes.

Cuando Piero me contó lo que paso hace unos años me propuse hacer que esta sea especial, para que la disfrute y tenga un hermoso recuerdo. Quiero borrar el sabor amargo que le dejó y enseñarle lo maravillosa que es la navidad al lado de nuestros seres queridos.

He visto tantos vestidos que no sé por cual decidirme, aunque todos me encantaron siento que ninguno se acerca a lo que quiero. Hemos visitado varias tiendas de marcas reconocidas, sin embargo,  soy feliz con cualquier vestido sin importar si es caro o barato. Francamente... me dá igual.

-No seas aburrida Marie, debemos impresionar. Recuerda que habrá mucha gente sofisticada y aparte tu eres la novia de Piero Barone, Dios!- Ale resopla molesta tras decirme por enésima vez el mismo discurso sobre vestir de diseñador y bla... bla... bla... pongo los ojos en blanco mientras me dejo arrastrar a una boutique Versace, seguidas de Isabella que solo niega sonriente.

(...)

-Por fin!- exclamo al verme en el gigantesco espejo que tengo en frente. Ya tengo el vestido perfecto. Sorío y salgo a mostrarle a las chicas. Gritan de enocion y asienten dandome el visto bueno.

-Es ideal para ti y tambien resalta tu tono de piel. Definitivamente es el indicado- me dice Sara, la chica encargada de antendernos. Es una rubia delgada y lleva un discreto vestido negro hasta las rodillas, parece sacada de una revista.

-Esta precioso Marjo- dice Bella mirandome de pies a cabeza.

-Totalmente de acuerdo!- exclama Ale dando una palmada en el aire.

Tras mirar varios vestidos Alejandra encuentra el suyo y casi nos deja sordas a todas. Yo sonrío y levanto mis pulgares, es precioso. Isabella solo se ha limitado a dar su opinión y ver algunos vestidos pero sin probárselos. Observo como se deleita tocando un precioso vestido azul royal.

-Te gusta?- da un respingo y sonrie.

-Me fascina, es hermoso- se le queda viendo como si fuera una obra de arte.

-Anda, ve a probartelo- ríe y niega.

-Seria una pérdida de tiempo Marjo, no puedo pagar un vestido como este- un deje de tristeza tiñe su voz. Pienso... pienso... y pienso... ya se! Me morire de verguenza con Piero pero que mas da.

-Tómalo como mi regalo de navidad Bella- sus ojos miel se agrandan de inmediato y en sus labios se forma una sonrisa dificil de ocultar. Me abraza y se va al probador, no sin antes decir <<Grazie Bella>>. Sorío. Saco el movil y le marco a Piero. Contesta de inmediato.

-Dolcezza, me extrañabas?- río como boba.

-Quien deberia preguntarlo soy yo que he pasado toda la mañana de compras, no crees?- ríe

-Es que también estoy fuera. Tuve una reunión de emergencia y a penas he terminado... Necesitas algo hermosa?

-Vale, entiendo... este, pues si- hago una pausa, respiro profundo y añado- Entré a una tienda Versace y pues encontré un hermoso vestido y pues... me enamore de el- escucho la risa de Piero del otro lado.

-Y cual es el problema entonces?- me muerdo el dedo indice. Suspiro y hablo.

- Ninguno, solo que a Isabella le gusto uno y ale tambien y pues... tenemos tres vestidos carisimos... y me apena usar tu dinero- Si, tengo una tarjeta con credito ilimitado que mi flamante novio se encarga de costear... recuerdo la discusion que tuvimos por eso. Al final: Piero ganó!... Escucho que ríe nuevamente, se esta burlando de mí?

-Preciosa- habla como si le hablara a una niña, amo cuando me llama asi- puedes gastar todo el dinero que desees, es cierto que no soy asquerosamente rico como Christian Grey- sorío- pero eso no quiere decir que si compras tres vestidos de diseñador me quedaré en las ruinas- siento mi cara arder.

-Prometo pagarte hasta el último centavo- desde luego que lo haré. Suspira. Sé que le molesta escuchar eso.

-Hablamos en casa, te parece?- asiento como si me viera, que idiota... le contesto que sí- Tengo que dejarte pequeña, disfruta tu sabado y gasta todo lo que necesites. Un beso.

-Esta bien cielo, ciao- su voz me detiene antes de colgar.

-No hay beso para mí?- sorío.

-Todos los que quieras- <<Marie ven a ver esto>> escucho la voz de Ale al fondo - tengo que colgar, besote- me despido y cuelgo soriendo como colegiala enamorada.

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-Muero de hambre!- exclamo al salir de una tienda de accesorios. Ya tenemos todo lo que necesitamos. Estoy agotada, hambirenta y sedienta.

-Yo tambien, ¿qué vamos a comer? Tenemos muchas opciones- apunta Ale.
-Conozco un lugar donde hacen unas pizzas deciciosas, que dicen?- Bella nos mira esperando una respuesta. Ambas nos encogemos de hombros y asentimos. Subimos a la 4ta planta y dimos con un lugar llamado Il Forno.

Y que razón tenía!, la pizza que hacen aqui sabe a gloria. Siento que explotare en cualquier momento. No debí comer tanto.

-Joder! Esa pizza estaba de puta madre Isabella- dice Alejandra haciendonos reir a todas. A veces se le sale lo española.

-Les dije que eran una delicia- isabella levanta el menton sitiendose orgullosa.

-Lo siento chicas, debo ir al tocador. No tardo- me miran y soríen.

No me es dificíl dar con su paradero, casi siempre están al final de cada planta. Hago mis necesidades, luego me lavo las manos y acomodo mi pelo antes de salir. Mientras camino y busco alguna goma de mascar en mi bolso, siento como alguien se estrella contra mí. Rapidamente levanto la vista y mi sorpresa es mas que evidente:

-¿Tu?- definitivamente esto tiene que ser una broma.

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Hola!

Lamento no publicar el viernes pasado... en mi defensa: no tenía ideas.  :'(

Aquí está lo prometido... Gracias por leer♥

Los amos *Voz de Apus*




Sr. BaroneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora