Segunda Oportunidad. (Golden FreddyxFreddy)

Segunda oportunidad: capitulo 65

En esta ocasión nos situamos en un boliche, parecía que las cosas pintaban bien para Golden ya que el castaño apenas y sabía que era un pino, el chico miraba confundidos las bolas coloridas con tres orificios, los toqueteaba curiosamente, Fred también las observaba apoyando su mentón en la cabeza del oji azul con una expresión curiosa, ambos se veían adorables ante los ojos de cualquiera si pudiera ver al pelinegro.

– No sabes jugar ¿verdad? –pregunto un divertido rubio acercándose, Freddy negó apenado.

– Jamás en mi vida me enseñaron a jugar –susurro tímido, su acompañante rio y se acercó tomando una de las bolas para después acercarlas.

– Es fácil, solo tienes que meter tus dedos en estos orificios y lanzarla.

– ¡Demostración! ¡Demostración! –pidió Freddy divertido, se supone que esa cita era para divertirse, no para lamentarse en algo que no sabe.

– Bien –el chico se concentró y dio una pequeña carrerilla acercándose a la pista, una vez estuvo en el borde soltó la bola que rodo en línea recta hasta golpear a casi todos los pinos, quedando únicamente el número diez. Su compañero aplaudió asombrado, eso hasta que el rubio coloco otra frente a él.

– No, yo...

– Vamos, tu puedes –le animo con una gran sonrisa, el chico la tomo algo dudoso pero se acercó a la pista y con toda la fuerza que tenía la lanzo provocando que botara un poco y luego se fuera a uno de los costados.

– Soy un asco en esto –susurro avergonzado, Golden se acercó dándole otra.

– Vamos Freddy.

– ¡Y como joden con el copyright!

– Solo concéntrate, confía un poco más en ti –le pidió en un susurro, las mejillas del chicos se colorearon de un leve rojo; sin más asintió y cerro los ojos mientras una sonrisa, culpa de los nervios, se posaba en su rostro, hizo todo su esfuerzo y lanzo la bola, este rodo desviándose un poco pero finalmente logro darle a los pinos dos, cuatro y siete, tardo un rato en reaccionar y cuando lo hizo dio un brinco soltando una exclamación de victoria

– ¡Lo logre, lo logre! –grito alzando los brazos. Golden solo sonrió mirándolo, una de las cosas que había aprendido de Freddy era que cuando se emocionaba solía tener una actitud un tanto infantil, tanto en como brillaban sus ojos con ilusión o en sus sonrisas.

– Felicidades.

El chico se quedó quieto y se dio cuenta de que estaba actuando algo bobo, bajo las manos y la mirada con rapidez sacándole una risa a su compañero quien solo le acaricio la cabeza.

– Si fueras gay~ estaría okey~

– ¡Cállate!

– Sigamos ¿vale? –propuso Golden acercándose a tomar otra bola y haciéndola rodar hasta lograr tirar todos los pinos, Freddy se acercó nervioso tomando la suya–. Si quieres te ayudo –se colocó atrás de él tomando la mano con la que agarraba el objeto esférico colocándolo más nervioso y aumentando las burlas de Fred.

– Disfruto~ contigo estar ¿Por qué me ha de importar...?

– No lo digas... –pidió con sus rostro rojo, Golden lo miro curioso ante su reacción.

– ¡Que te guste por detrás!

– ¡CALLATE! –por culpa de la vergüenza llevo la bola hacia a tras dándole a Golden en la frente, cuando se dio cuenta se volteo a verlo escandalizado–. ¡Lo siento! –se acercó a auxiliarlo, el rubio se sostenía la zona herida con sus manos.

– Sé que dicen que el amor duele... pero no pensé que tan literal –eso era lo que pasaba por su mente mientras escuchaba las disculpas de Freddy y como fondo una tipa tocando el violín más pequeño del mundo.

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– Toma –ofreció Freddy el refresco frío, Golden se lo coloco en la frente donde ya tenía un pequeño chipote–. De nuevo lo siento –balbuceo un nervioso castaño, mientras tanto Fred se descojonaba de la risa mientras daba patadas al aire ganándose una mirada asesina de su "hermano"

– Tranquilo, fue un accidente –trato de calmarlo soltando unas risas incomodas, mientras tanto el chico jugueteaba con sus dedos en una expresión sumisa.

– Pos, se como una mamá y dale un besito a la Barbie para que se recupere –se burló Fred volviendo a romper en risas, risas que se vieron interrumpidas cuando Freddy tomo a Golden de las mejillas y se agacho un poco (ya que él estaba parado y su acompañante sentado) para depositar un suave beso en su frente.

Los rostros de Fred y Golden eran un poema, el pelinegro estaba entre sorprendido, shockeado y asombrado, lo dijo de broma, no pensó que de verdad Freddy le besaría. Por otro lado el rubiecito pantene estaba igual sorprendido, avergonzado, feliz e ilusionado.

– Freddy...

– Dime.

– ¿Me puedes volver a golpear? Solo que esta vez en la boca.

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Ambos iban de camino a casa en un silencio que era entre incómodo y agradable ¿extraño, no?

– De nuevo lo siento –susurro por enésima vez el castaño, Golden negó diciéndole con la mirada que lo olvidara–. En serio, si hay algo que puedo hacer para recompensarlo lo hare.

– Um ¿Harás lo que sea?

– Lo que sea –afirmo, Golden sonrió de lado poniendo una mirada malvada.

– Esa mirada no me gusta...

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El de ojos azules miraba hacia el piso totalmente rojo mientras los demás estudiantes lo miraban curiosos, Golden le obligo a usar una playera con el estampado de Winnie Pooh, pero eso no era lo raro, lo extraño era que en la parte de atrás decía "Propiedad de Golden" con letras grandes, doradas y muy llamativas. Fred también miraba hacia otro lado avergonzado pues tenía la misma camisa solo que en rojo y Freddy en azul.

– Lástima que ese chico ya tiene dueño –comento un peli rosa divertido mientras su amiga tenía un ataque de emoción, aunque lo disimulaba bastante bien.

– ¿Es necesario que la use todo el día? –pregunto mirando al rubio quien simplemente sonreía de lado orgulloso de su idea, así dejaba las cosas en claro; ante la duda del chico asintió confiado para después voltear a ver a unas tipas que decían que Freddy se veía "Lindo" y "Tierno" con su sonrisa torcida y achicando los ojos provocando que miraran a otro sitio intimidadas.

– Supongo que eso salió bien –murmuro Sharon frente a su monitor mirando la escena con un bote de helado en sus manos.

– Aunque siento pena por Freddy –se escuchó la voz de Bonnie quien era el que grababa todo.

– Meh, al menos algo salió bien para Goldencito~

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¡Volví! Ahuevo, ya extrañaba publicar y leer sus comentario maldiciéndome a mí y a Freddy por no hacer al Golddy canon. Aproveche para hacer cosas que jamás haría, por ejemplo, salir de mi cuarto. Por cierto, del capítulo final de temporada ame tres escenas, todas las que incluyen a Freddy, y por ende Fred, la de Bonnie uniéndose al club de los friendzoneadores (Freddy y Bonbon le dan su insignia) y al Golden poseído.