Terry tomó un tono un poco melodramático.- Samuel…necesito hablar con usted.
- Dime, Theodore- preguntó aquel hombre.- Cuéntame, hijo. ¿sucede algo? Tu padre, quizás…
- En parte- dijo Terry- pero no es exactamente eso. Lo que realmente sucede es que…siento que por ahora…necesito buscar un trabajo más formal. ¿Sabe usted? Tengo novia y…
Samuel soltó una carcajada sonora.
- No seas tan ceremonioso para eso, hijo. Si te vas a casar, sólo tenías que decirlo. Supongo que te casarás de acuerdo a las costumbres escocesas.
Terry pensó que quizás así sería en la realidad, en virtud de la adopción realizada por la familia Andley.
- Quizás…sin embargo, las cosas son más complicadas de lo que parecen. Mi novia no está aquí…está en América y…aun no tengo dinero para ir a verla y mucho menos para casarme…-soltó esto último casi con las lágrimas en los ojos.
Samuel se tornó comprensivo.
- Perdóname…se ve que la quieres mucho. Entiendo perfectamente lo que te sucede. Quieres estar listo para ella…quieres tener lo suficiente para poder fundar tu hogar a su lado. Y eso es normal y bueno. Muchacho…no sólo voy a aceptar que te vayas sino que también te voy a ayudar para que puedas ir a América.
Terry negó.
- No, Samuel…yo no pretendo tanto. Sólo quiero que me permita dejar la compañía temporalmente en lo que consigo otro trabajo. Pienso regresar con ustedes, si me lo permiten. Ustedes son como una nueva familia para mí. Y quiero que compartan mi felicidad.
Samuel sonrió.
- Querido Teddy, estoy seguro de que serás muy feliz. Y claro que puedes regresar cuando quieras, te estaremos esperando. Voy a contactarte con un amigo mío que se llama Jeremías. Era actor de la compañía, pero ya tiene un tiempo que no sabemos nada de él. Lo último que supimos fue que se casó con una americana. Estaba en mucha mejor situación que nosotros. Gracias a él pudimos pisar buenos escenarios. Después de un tiempo, supimos que estaba cerca del Támesis pero ya no nos buscó.
El rostro de Samuel se tornó triste.
Terry trató de consolarlo.
- Le agradezco mucho. No debería preocuparse. Sin embargo, sería bueno que volviera a saber de su amigo.
- Sólo yo recuerdo dónde vivía. Le dará mucho gusto saber que has estado con nosotros. Espero que se encuentre bien.
- Muchísimas gracias, Samuel. En cuanto lo encuentre, le haré saber lo mucho que me ha ayudado y que tiene un gran amigo.
- Cuando lo veas, dile que guardo un gran recuerdo de él y le deseo que le vaya muy bien. Y de serle posible, que venga a verme.
- Se lo diré. Gracias por todo, Samuel.
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Desafiando El Destino
FanfictionCandy y Terry siguieron caminos diferentes. Candy y Albert parecían ser muy afines...hasta que pasó algo inesperado. ¿Qué harías si tuvieras que desafiar al destino para conseguir lo que anhelas? Es historia de andrea sparrow