Seduciendo a Hades.

Improvisación.

Seiya estaba muy alterado, el ver a su Hermana prácticamente pudriéndose frente a él no era algo fácil.

Seiya: Seika!!!! Por que!!? Que es lo que ha hecho ella!? No hizo nada malo para merecer esto!!!

Sus gritos de enojo y de impotencia resonaron en los oídos de Deimos, quien sonrió.

Deimos: Parece ser que Pegaso esta disfrutando de su sueño.

Luna: Deimos! Es mejor que termines con esto, pronto si no quieres que...

Deimos: Si no quiero que? Tu ya no eres una diosa.

En esos momentos Hyoga soltaba un desgarrador alarido.

Hyoga: Mamá!!!!!!!

Su madre estaba ahogándose, no entendía como, pero se ahogaba.
La levantó, la sacudió, pero su cuerpo entero se convirtió en un charco de agua helada.
Se tumbo en el suelo, sollozaba de dolor e impotencia.
No entendía como por más que deseara estar su madre, le era denegado.

Lía: Por favor, ya basta! Por qué deben sufrir tantas personas... Se puede saber de donde me conoces exactamente?

Deimos: Tu nos conoces desde hace mucho. Sólo que no lo recuerdas.

Shiryu se debatía aún entre si atacar a su maestro o no.
Tenía ya algunas costillas rotas y sangraba casi por todos lados.

Shiryu: Maestro, no...

-Morirás Shiryu...

Sin más, el caballero del Dragón lo atacó, comenzó a defenderse.
Estaba herido no sólo físicamente, sino que su alma le dolía, nunca intentaría levantar un puño contra su maestro, pero ahora lo estaba haciendo. Se desprecio a si mismo y en cierto momento se detuvo. Su maestro lo crió y por tanto, sólo él tenía derecho a matarlo.

-Así que te rindes.

Shun e Ikki estaban totalmente concentrados en la pelea, Andromeda para evitar lastimarse y lastimar y el Fénix para acabar con su enemigo de manera rápida y eficaz.

-Ikki! Detente!

-Si quieres que me detenga, obligame.

Los sacrificios que su hermano mayor había hecho desde su niñez hasta ahora por protegerlo eran incontables y muy marcados, no podía golpearlo, se repetía constantemente en su cabeza. No podía herirlo aún más, ya no. Soltó sus cadenas y el Fénix lo pateo tan fuerte que lo hizo perder el aliento y algo más de sangre.

Nat: Ya no me quedan municiones Sophia.

Sophi: Lo se...tranquila.

Skdy: Yo me enfrentare a este dios. Continúen.

Lía: Pero Skdy....

Luna: Me da rabia tener que reconocer que el plan de Skdy por ahora es el mejor.

Sophia calculaba las posibilidades que les restaban para cumplir su meta.
La diosa de la nieve, Skdy Nifada, contra el dios del miedo, Deimos.
Nunca había visto todo el porcentaje de energía de Skdy, pero si era una diosa, seguro estarían en igualdad al pelear.

Nat: Hay que continuar. Skdy, asegurate de tirarle los dientes.

Sophi: Y romperle todos los huesos.

Luna: Has que llore pidiendo ayuda.

Lía: Cuidate Skdy, te veremos allá adentro.

Skdy: Ustedes asegúrense de despellejar viva a esa mujer. Que sufra lo mismo que los que daño con su estúpido capricho. Y Lía, asegurate de dejarle en claro que tu tienes a Hades y no ella. (Le guiño un ojo.)