59; Nuestra pequeña hija.

322 10 0
                                    

–Esperame aquí, ¿sí? –acaricio su mejilla–. Si te digo que te vayas, lo haces enseguida.

–Está bien –Zoe asiente tomando una mejor postura y cargando a Pixie–. Ten mucho cuidado.

–Lo tendré –beso la cabeza de mi hija y después los labios de mi nena—. Te quiero mucho.

–Yo también Justin.

–Bien... –suspiro y entro al restaurante en donde me citó Melanie. Veo que ya está sentada tomando un agua de sabor y revisa su móvil desesperada.

Me acerco a la mesa en donde está sentada y ella alza la cabeza cuando he llegado. Intenta sonreír y me hace una seña para que me siente frente a ella.

–Creí que nos dejarías en paz después de que te dí la empresa –me siento frente a ella y suspira.

–Esta vez no te pedí que vinieras para hacerte algo malo, por eso te cité aquí –dice jugando con sus dedos–. Voy a regresarte la empresa.

Frunzo el ceño sin poder creer lo que ha dicho–. ¿Qué dices? –me acerco más para poner más atención en su rostro.

–Voy a regresarte la empresa –repite–. Escucha, mi esposo siempre me había obligado a hacer cosas que en realidad a mí no me importaban. Todo fue idea de él. Él me metió ideas tontas a la cabeza, estuve todo este tiempo dominada por él. Me controlaba, me decía lo que hiciera, me cegó sobre todo.

–¿Tienes esposo? –me quedo atónito ante aquella declaración.

–Tenía, porque él murió la semana pasada en un accidente –dice–. Cuando él se dio cuenta de quién se trataba la persona que me heredó parte de su fortuna, me metió malas ideas de Jeremy. Me dijo que él me abandonó a mí y a mi madre, que Jeremy no me quería más que a ti y me dijo que debía vengarme –una lágrima resbala por su mejilla–. Pero...él sólo quería que no quedara nadie de los Bieber para yo quedarme con todo el dinero, y después él quedárselo y botarme a mí junto a mi hijo.

–¿Tienes un hijo? –pregunto de nuevo con curiosidad.

–Sí, él es pequeño aún, sólo tiene seis años.

–Entonces.... Tu ex esposo sólo quería aprovecharse de ti para quedarse con la empresa Bieber –asiento entendiendo todo.

–Lo lamento. Sé que les causé mucho daño a Jazzy, Jaxon, su madre y su esposo –traga–. Pero sobre todo a ti y a Zoe. Y no sabes cuánto lo lamento, me arrepiento de haberme dejado llevar por un estúpido. Les pido perdón por todo lo que hice.

–Así que...

–Te voy a regresar la empresa –saca unos papeles de su bolso–. Zoe está aquí, ¿cierto?

–Sí, está afuera con Pixie. No quiso dejarme venir solo –me río un poco y ella también sonríe.

–Es una buena chica, y muy linda. Sobre todo, se ve que te ama demasiado –responde Melanie sacando un bolígrafo de su bolso–. Se merecen lo mejor de todo el mundo.

–Sí, lo sé y gracias.

–¿Podrías hablarle? Me gustaría hablar con ella...

Asiento y me levanto para ir afuera, en donde hay unas mesas para los que gustan comer en el aire libre. Zoe está sentada haciendo reír a Pixie y no puedo sentir más ternura.

–Shawty, tienes que venir –hago una seña con la cabeza–. Todo está bien, vamos.

Zoe se levanta no muy convencida y entramos los tres juntos al restaurante. Vamos a la mesa de Melanie y nos sentamos ahí, frente a ella.

insoportable | jdbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora