insoportable | jdb

22; Ultimate Fighting Championship.

zoe's pov

¡Claro que no me iba a quedar sin hacer nada! Yo quería ver su pelea.

Así que corrí sin pensar en nada más, subí al departamento con todas mis maletas lo más rápido que pude, las dejé en mi departamento y luego volví a bajar a toda velocidad. Sí, seguiría a Justin.

Miré a los dos lados en la calle, su auto que distinguí desde lejos, azul marino, iba hacia la derecha así que corrí lo mas rápido posible para buscar un taxi que lo siguiera.

Como por arte de magia un taxi iba cerca de ahí, me subí y le señalé al conductor que siguiera el auto de Justin y así hizo. Pasaban los minutos y el auto de Justin no se aparcaba, pasamos por un callejón y en unas dos cuadras mas apagó el auto.

–Espere...¡alto! –le digo al conductor quién frena de inmediato–. Está bien, déjeme aquí –asiento mirando de lejos como Justin baja del auto con su mochila.

–Claro, son 10 dólares –me dice y le pago con unos cuantos billetes que tengo en mi bolsillo–. Que le vaya muy bien. Suerte con su galán –me dice mientas bajo del taxi.

¿Galán? ¿Qué le pasa a ese señor?

Veo que Justin entra a una casa extremadamente grande, con un jardín extremadamente grande también. Oh Dios, ¿qué es esto?

Justin coloca una trajeta en la cerradura del portón metálico, el cual se abre y él entra tranquilamente. Enseguida el portón se cierra y veo que Bieber se va por el camino de piedras de entre el césped. En el jardín hay una fuente de agua y a lo lejos logro ver una piscina. ¡Esta casa es más grande que mi futuro!

Me acerco a donde está la cerradura del portón, observo bien la entrada y Justin ya va de nuevo, metiendo su tarjeta en la cerradura de la puerta, después entra y la puerta se cierra.

Interesante... ¿ahora cómo entro?
Veo que hay un teléfono color plata, que está pegado a una de las paredes, así que descuelgo el teléfono y me lo llevo a la oreja.

–Buenas tardes, ¿busca a alguien? –responde una voz femenina.

–Eh, yo....

–¿Anne? –dice la mujer–. ¡Que bueno que has llegado! ¡Pasa con la tarjeta que te envié por correo!

Bien, es momento de actuar.

–Eh...sí, es que yo... ¡olvidé la tarjeta! –respondí lo primero que se me ocurrió, debo de tener cuidado y no dar tantos detalles. Bien dicen que los mentirosos dan muchos detalles.

–¡Oh! ¡Pero cómo! Esta bien, iré a abrirte –escucho que cuelga y yo lo hago también.

Me da un poco de miedo....debo admitirlo, si la mujer se da cuenta de que no soy esa "Anne", no sé que voy a hacer.

Una mujer sale de lo que es atrás de la casa, y con un juego de llaves viene hacia mí recibiéndome con una sonrisa.

–¡Tienes que ayudarme ya, Anne! –me jala del brazo una vez que me abre, después vuelve a cerrar. ¡Lo bueno es que no sabía que yo no era Anne!–. Hoy hay pelea y no he podido terminar de limpiar toda la sangre que hay ahí, ¡es asqueroso! –ella es baja de estatura, morena y como de unos treinta y tantos años.

–¿Sangre? ¿De quién? –mi voz suena temblorosa pero ella no se da cuenta.

–¡Pues de quién más! –dice obvia y me jala para caminar hasta adentro de la casa–. De los peleadores.

¿Peleadores? ¿Ósea que esto es peligroso? ¿Tanto? ¿Qué? ¿Será algo ilegal esto? ¿O qué? ¡Alguien explique!

Bueno, una parte ya la entendí, la mujer esperaba a una tal Anne para que le ayudara a limpiar, quizá será la nueva empleada, o algo así.

Entramos a la casa, la puerta es enorme y dorada, esto vale mas que yo, vieron. Me encuentro con algo grandioso. La casa que todos quisieran tener. Simplemente hermosa.

La mujer me dice que la siga y así aparento, me voy siguiéndola por el gran pasillo con alfombra roja. Modelo y pongo poses como si estuviera en unos premios. Me río mentalmente de mí. Cuando ella se distrae y piensa que aún la sigo, me meto en una de las grandes puertas de madera negra que hay en el pasillo y así la pierdo de vista. Veo la habitación en la que estoy y me quedo impactada.

Yo quiero una casa con todas estas comodidades.

Me asomo por una de las ventanas y veo una perfecta vista afuera. Piscina, palmeras, balcones de las otras habitaciones.

¡Woah! ¡Vaya! ¡Aquí sí que son millonarios!

Salgo de esa habitación por una puerta corrediza, asegurándome de que la mujer no esté cerca de ahí. Voy hacia la piscina y sonrío al ver mi reflejo en el agua, ¡quiero esta casa! Entro a la casa número dos, bueno, más bien, son como la misma casa, pero separadas. En fin, entro y voy a una habitación, con la excusa de buscar a Justin, pero me encuentro con otro living completamente vacío y grandísimo.

Alto... ¿por qué en la chimenea dice "UFC"? No me digan que....

¡Jesús! ¡Estoy en la casa oficial de Ultimate Fighting Championship! ¡Seguro ahora estoy saliendo en televisión! ¡Que emoción!

Gracias Justin, me haré famosa.

Salgo de ahí y entro a la puerta de enfrente.

Ahora estoy en la cocina. ¡Imagínense que esto fuera mío! ¡Así sí cocino! Entro a otra puerta que está enseguida y me encuentro con... ¡El comedor! ¡Ay, pero que deliciosas manzanas!

Me voy a otra habitación y me encuentro ahora con el gimnasio.
Miro hacia afuera por la ventana y veo la anterior casa, en la que antes estaba, pero también veo una parte de un jardín muy hermoso y otra piscina.

Ésta casa es genial. Aparte de que también puedo ver un campo de fútbol y otra casa que parecen ser sólo habitaciones.

¡Increíble! Mañana mismo me mudo aquí.

Sigo buscando en otras partes a Justin, quién, la verdad, ya se me había olvidado por completo. Salgo de ahí y veo que hay unas escaleras hacia el sótano. Bajo por ellas con cuidado de no hacer tanto ruido, ya que se escuchan voces abajo.

Me asomo discretamente, con cuidado para que no me vean, hay como unos veinte hombres, y un gran campo, supongo que para pelear.

Visualizo a Justin, ¡sí, ahí está Justin! Y va entrando a esa cosa donde pelean, no lleva camisa, ni pantalones, sólo boxer...¡ay Dios mío!

Después otro hombre entra también, es moreno, y mucho más alto que Justin. Entra el réferi y hace que ambos se den las manos, entonces empieza a contar y la pelea comienza.

Me reprimo las ganas de gritarle al estúpido cuando le pega muy fuerte a Justin, y también reprimo las ganas de gritar de emoción cuando Justin le pega a él.

Llevan como diez minutos peleando, los demás hombres de afuera gritan dándole ánimos a su preferido. De pronto, el moreno le pega a Justin en la nuca con su puño cerrado, Justin cae al colchón,  inconsciente.

¿Qué está pasando?

Corro hasta él.