Loki Y Tu// Un universo para los dos

Cap 50

-Dime que está bien -le dijo Garbiñe a Odín dando vueltas por todo el salón.

Odín asintió lentamente, sin dejar de mirar a la chica, que cada vez parecía mas nerviosa. Y con razón: se suponía que Loki tendría que haber vuelto.

-¿Y por qué no ha vuelto todavía?

-No lo sé, pero estáte tranquila, está bien -Odín parecía muy seguro, pensó Garbiñe.

Al contrario que ella: éste tipo de situaciones la ponían nerviosa. ¿Por qué se retardaba tanto Loki? ¿Le había pasado algo? Había tantas preguntas en su cabeza, a las que no paraba de darles vueltas. Hasta que se dio cuenta de que Thor también estaría sintiendo lo mismo. Se sonrojó, e intentó pensar en otra cosa. Tenía hambre, pero lo único que había en la mesa era un bol de frutas: manzanas y plátanos. Le gustaba la fruta, pero no le apetecía en ese instante.

-Pff -resopló sin poder aguantar los nervios acumulados en su vientre.

Por el rabillo del ojo vio cómo Odín se levantaba del trono y se acercaba a ella, posando una mano sobre su hombro con gesto acogedor.

-Garbiñe, escucha. Conozco a Loki demasiado bien como para saber que está bien. Seguramente ha tenido algún que otro contratiempo a la hora de regresar; nada que el no pueda solucionar, te lo juro -Garbiñe miró a Odín; su expresión era completamente tranquila.

Se podía decir que Odín no estaba nada preocupado por la situación. Pero...¿Cual era la situación? se preguntó la chica.

•••

-¿Donde está Liz?

-No sé, pensé que estaba contigo -respondió Helena frunciendo el ceño.

Garbiñe ladeó la cabeza hacia los lados. No veía a Liz desde por la mañana, y eso no era normal en ella. Siempre solía estar o con Helena o con ella. Ya tenía otra razón por la que preocuparse.

-Tengo la sensación de que está pasando algo raro -murmuró en bajo, no tanto como para que Helena no lo oyera.

-¿A, si? ¿El qué?

-No sé, pero lo noto...Por cierto, ¿no habrás visto a Laufey, no? -Helena negó con la cabeza.

-No, la última vez que supe de él, dijeron que se había vuelto a Jotunheim, ¿por?

-No, por saber.

Pero eso no era cierto. La verdad es que hacía mucho tiempo que no veía a Laufey, y...le echaba de menos. Sabía que por muy malvado que pareciera, no lo era.

•••

-¡Princesa, princesa! -vitorean todos a la vez.

En los rostros de todos se puede ver la emoción claramente. Garbiñe sonrió. Estaba realmente orgullosa de que la llamaran princesa; era casi como ella lo había soñado. Un niño se le acercó, y le agarró del vestido tirando débilmente de él. Garbiñe miró hacía abajo, y vio a un niño, de no mas de 8 años, sonriendola. Le faltaba un diente; estaba muy gracioso. Le recordó a Khaos, y lo cogió en brazos.

-Princesa -empezó el niño.-, mi hermana quiere ser como tú.

Garbiñe sonrió.

-¿Como te llamas?

-Dalh -respondió el niño.

-¿Y tu hermana?

-Keyra.

-Pues dile a Keyra que seguro que ella sería una gran princesa, incluso, igual mejor que yo. Y tú -dijo tocándole la nariz a Dalh.-, serías un gran príncipe.

Bajó al niño al suelo, en el momento en que unos soldados aparecían para coger al niño y llevárselo a rastras de aquel lugar

-¡No! ¿Que hacen? -preguntó Garbiñe histérica a uno de los soldados que tenía enfrente.

Como no le contesban, empezó a empujar a la gente detrás de los soldados que llevaban al niño. Tenía que saber a donde se lo llevaban. Siguió corriendo, tropezándose con el vestido, hasta que un soldado la agarró del hombro y le impidió que siguiera adelante.

•••

-¿Es eso cierto?

-Sí, mi rey,ese niño estaba...

-Ese niño se llama Dalh -contestó la chica enfadada.-, y sólo estabamos hablando.

Odín miró al soldado, y éste agachó la cabeza.

-Usted mandó que nadie se podía acercar a la princesa.

Garbiñe miró a Odín, en busca de alguna respuesta lógica.

-Pero un niño inocente sí se puede acercar -el soldado iba a replicar, cuando Odín levantó su mano derecha, haciendo que el soldado se cayara.- retirate.

El soldadohizolo que le habían mandado y se fue. Se quedaron Odín y Garbiñe solos, en completo silencio mientras la chica le miraba a él, esperando a que hablara.

-¿Donde lo han llevado? -preguntó al fin la chica.

-Tranquila, esta con su madre -le tranquilizó Odín.

Pero eso no bastaba para olvidar aquella imagen del soldado llevando rastras al pequeño.