Cap 64

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- Te ves realmente preocupada -Odín se acercaba con pasos lentos hacia Garbiñe, que estaba al borde del Bifrost, con la mirada perdida en la inmensa nada-. Te preocupan ellos, ¿no?

Tras un largo silencio provocado por la chica, asintió débilmente. Odín sonrió aunque ella no podía verle, dado que le estaba dando la espalda. Se acercó a ella más, y le posó una mano en el hombro, intentando que la chica se calmara.

La apariencia de ella se volvió más humana, aunque todavía quedaban rastros de la magia oscura; el pelo se le quedó blanco, y la piel se le volvió más pálida que de lo costumbre.

- Estarán bien -añadió Odín, antes de pararse a su lado, y contemplar lo que ella contemplaba, pero sin ver nada-

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- Estarán bien -añadió Odín, antes de pararse a su lado, y contemplar lo que ella contemplaba, pero sin ver nada-. Acompañame, tengo algo que enseñarte.

Garbiñe le miró en silencio, como si intentara leerle la mente, y asintió cogiendo la mano de Odín en la suya. Siguió al mayor hasta unos establos.

Ya era casi de noche, Loki y los demás ya se habían ido hacia un par de horas. Asgard estaba completamente a oscuras, de no ser por alguna que otra luz de las casas. Odín se paró a un par de metros del establo e indicó con la mano a la chica que pasara dentro.

Ésta vaciló un poco, pero luego accedió a entrar. El establo también estaba oscuro, sólo se escuchaba el relinche de algún que otro caballo. Miró hacia atrás, pero Odín no la seguía. No le importó y siguió caminando hasta toparse con un caballo, que le relinchó y ella se sobresaltó, hasta que se dio cuenta de lo que era, sólo un caballo.

 No le importó y siguió caminando hasta toparse con un caballo, que le relinchó y ella se sobresaltó, hasta que se dio cuenta de lo que era, sólo un caballo

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Pero no era el típico caballo de siempre. Éste era especial; en vez de tener cuatro patas, tenía ocho, y era mucho mas grande que los otros caballos que estaban en el establo. Garbiñe tuvo que alzar la mirada para mirarlo a la cara. Sus ojos eran oscuros como la noche, su pelaje de un tono gris azulado.

- Veo que has encontrado a Sleipnir -Odín apareció detras de ella.

Garbiñe asintió, alzando la mano para tocarlo, y para su sorpresa, éste se dejó.

- ¿Que es? -preguntó casi en un susurro la chica.

- Un caballo -respondió Odín con toda naturalidad-. Es diferente a los demás por ser más fuerte, mas rápido, por tener más resistencia. Aparte de obtener ocho patas -añadió.

Loki Y Tu// Un universo para los dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora