NaruHina "La melodía de nuestro amor"

Capítulo 44: "Un camino distinto"

"Más ánimo prima, debes ser igual de temeraria como lo eras de niña" – comentó el ojiazul al tiempo que la abrazaba, y en ese instante se les cruzó Sasuke, sin poder disimular celos en su voz. 

"¿Qué significa esto Uzumaki?" – espetó mirando al grupo. 

"¿Sasuke? Qué sucede contigo...aparecer aquí de la nada y pedir explicaciones sin razón...si quieres saber algo pídelo cortésmente..." – respondió el rubio, sin dejar de abrazar a la pelirroja. 

"Me preguntaba qué hacías coqueteando con otra chica justo en frente de tu novia..." – respondió el pelinegro, molesto, no sabía qué le molestaba más; si el hecho de que el rubio estuviera con otra chica delante de Hinata, o que la otra chica fuese Karin, estaba confundido, sólo sabía que le molestaba. 

"¿Cuál otra chica? ¡Oh te refieres a Karin! Idiota, es mi prima... ¿Qué no ves el parecido?" – preguntó bromeando a la vez que pegaba su mejilla a la de ella con una enorme sonrisa, simulando ser dos gotas de agua. 

"¿Primos? Debe ser una broma..." – murmuró observándolos a ambos sin lograr encontrar un parecido entre el fino y hermoso rostro de la chica y el sonriente y brusco rostro del rubio. 

"Da igual... Hinata, ¿puedo hablar contigo a solas? Prometo que será solo un momento..." – preguntó desviando la mirada. 

"¿Eh? C-claro...volveré en seguida... ¿está bien, Naruto-kun?" – anunció la chica. 

"Está bien Hinata, cuídate" – respondió el ojiazul, ya no sentía miedo, pues la ojiperla era su novia ahora. 

Se apartaron los dos chicos del grupo, y entonces el pelinegro rompió el silencio. 

"¿Me acompañarías a un lugar? Es ahí donde quiero hablar contigo..." – comentó. 

La peliazul asintió y entonces el joven la guió hasta el salón de teatro, hasta la sala de ensayos que se encontraba en ese momento vacía. 

"¿Por qué vinimos hasta aquí Sasuke-kun?" – preguntó confundida la ojiperla, que recorría el lugar con la mirada. 

"Aquí me perdonaste...tiempo atrás... ¿lo recuerdas?" – comentó el chico. 

"S-sí lo recuerdo...pero...eso no responde a mi pregunta..." – murmuró ella, recordando brevemente los problemas que le había traído aquel encuentro. 

En ese mismo instante el chico la abrazó y la sacó de su trance. 

"Felicidades Hinata...sólo una mirada tuya...bastó para convencerme de que esto es lo correcto" – comenzó a decir el pelinegro, a la vez que con una sonrisa la ojiperla correspondía el abrazo. 

"Me he dado cuenta de que las cosas son más distintas de lo que creo, que no siempre obtendré lo que deseo...tú me has hecho darme cuenta de eso...de que puedo ser feliz, viendo feliz a la persona que amo...Te lo agradezco, me has abierto los ojos...es por eso que quiero desearte toda la felicidad del mundo, porque si tú eres feliz yo lo seré..." – argumentó el chico sus palabras. 

"Me alegra que por fin comprendas...que las cosas no son siempre como uno lo desea...debes fabricar tu propia felicidad sin intentar arrebatarle la felicidad a otros...fabrica tu felicidad Sasuke-kun, y así, haz feliz a alguien más" – finalizó la chica. 

Se miraron y sonrieron, para luego proceder a abandonar el lugar. 

Se despidieron con otro abrazo y cada quien marchó un camino distinto, Hinata en dirección a la sala de música, donde de seguro estaría su rubio esperando, y Sasuke en dirección al patio, sin ningún lugar en mente.