No podía creer que la semana haya pasado tan rápido, y que yo haya sobrevivido sin estallar de la ansiedad. Pero había algo que me había ayudado a calmar las ansias de var a la personita má stierna del universo, mi Niall.
El miércoles, dos días después de nuestro encuentro, abrí mi cuenta en twitter y ¡Sorpresa!, "@NiallOfificial te está siguiendo". Wow, esto lo hacía oficial, 'estba interesado en mí! No fue el follow lo que me convenció, sino la mención que él me había mamdado: "@FearlessStayer no puedo esperar para volverte a ver". Reí para mis adentros. Era como si él hubiese escuchado la canción que cantamos en la terraza. Me fijé la fecha y hora del tweet: martes,3.16 p.m. Si, era justo el momento aproximado en que estábamos en nuestro techo, cantando a todo pulmón.
Igualmente, sabía que era una extraña coincidencia, una mera casualidad, ya que nunca me hubiera reconocido la voz, y él no sabía que yo era su vecina hasta ahora, a no ser que Harry y Louis hayan mencionado mi nombre, lo que es poco probable.
Pero no puedo seguir divagando, el gran día ha llegado y tengo que ponerme linda. Empecé por un baño, para intentar relajarme (si ningún exito, seguía nerviosa). Luego me sequé el cabello rubio, no sin antes darle forma con una cera para formar ondas suaves, y proseguí con el maquilaje: algo de deliniador negro y una buena cantidad de rimel (para dar impresión de pestañas postizas), un poco de brillo rosado en los labios y listo. Suave, pero sexy.
Proseguí con la ropa, que obviamente, era lo más difícil de decidir. Por eso, también obviamente, pedí consejo a mis "hadas madrinas por un día", mis soul sisters. Terminé poniéndome un vestido floreado, con tonos de rosa chicle y verde manzana que realmente me encantaban. Era algo suelto en la parte de abajo, pero ajustado arriba y realzaba mi cintura con un fino cinto color beige amarronado. Infaltables, tacos, tan altos como pude soportar: solo 7cm. Eran del mismo color el cinto, asi que combinaban bien. Finalmente, agarré la cartera que combinaba con el conjunto y tiré dentro las cosas que consideraba infaltables.
Estaba lista, el problema, es que empezada tan teprano que aún faltaba mucho para que se hiciera de noche.
Me senté frente a la tv y puse una película, para relajarme. En eso estab cuando recíbí un texto al celular, de Niall. Decía: "Te pasaré a buscar a las 7:30 ¿me das tu dirección? No puedo esperar". Aguardé algunos segundos para responder, para no parecer deseperada y contesté "Calle Greenfields, 678. Yo tampoco puedo espera".
Las dos horas que me separaban de mi destino se hicieron interminables. La película, una comedia romántica de esas en las que reís por un rato, pero lloras al final, no hizo más que ponerme más nerviosa. Pero, finalmemte. mi cita llegó, muy puntual para tratarse de un chico, debo decir. Me dí u último vistazo en el espejo y me direjí hacia la puerta. Lu ya había abierto y estabacharlando con Niall, esperándome.
-Hola Marina-me dijo, y observé,embobada,como me sonreía. Los brackest realmente le quedaban bien, aunque amaba su antigua sonrisa, y sus dientes chuecos a mi me parecían perfectos.
-Hola-dije, a punto de hiperventilar.
Estaba hermoso, como siempre. Usaba unos jeans claros,desgastados, una camisa a cuadros roja y negra, y un blazer beige amarronado.
-Bueno chicuelos-dijo Lu, interrumpiendo nuestro intenso intercambio de miradas y sonrisas, seguramente, a su vista, parecíamos o demasiado tontos o demasiado tiernos-Mas les vale volver a un horario razonable, mi Marina debe respectar su horario para dormir...Es broma, tráela a la hora que quieras, no nos imports.¡Pásenlo bien!-Dijo, mientras nos empujaba para que salgamos de la casa y nos cerraba la purta de la cara.
Afuera esperaba un hermoso coche gris que parecá nuevo, era un flamante mercedes. Entramos, él en lado del ploto, y yo, del lado del copiloto. Inmediatamente nos sentimos algo más relajados, al menos yo lo hice, y empezamos a hablar. Yo era incapaz de articular palabra, así que él fue el que inició la conversación. ¡Y qué manera de empezarla!
-Estás hermosa hoy-dijo, algo vervioso
-Gracias, tu estas muy lindo también-conteste, ya con la cara roja por su complido.
-¿Sabes una cosa? ¡Somos vecinos! ¡No puedo creer que no ta haya visto antes!-dijo, mirando la carretera, pero sonriendo,sabiendo que yo lo miraba interesada.
-Sí-dije-nos mudamos hace sólo dos semanas. Somos argentinas -sonreí
-Ah-dijo "¡eres latina!" sonriendo por el descubrimiento-ahora tendré alguien con quien practicar mi "español"-Seguimos charlando mientras él conducia. Ya había pasado media hora desde que dejamos la casa, y la intriga comenzaba a crecer en mí.
-¿Falta mucho?-pregunté, realmente preocupada de que nos hayamos perdido. De ser así, dudaba que él lo admitiera, y no quería hacerlo sentir mal.
-Solo un poco más, ya verás. Te encantará.-respondió sonriente, sin quitar los ojos de la carretera.
Su manera de conducir me tranquilizaba. Era cauto y seguro,calmo, la velocidad, razonable. Los minutos seguían pasando y la curiosidad me estaba matando. No soy una chica demasiado paciente, al parecer. No podía esperar más, y entonces estallé, algo divertida por el misterio que Niall trataba de imponer pero también harta de la espera interminable
-¿¡Niall James Horan a dónde me estás llevando!?