Capitulo XXXI: Delirio

6 0 0
                                    

—Hemos contemplado el diseño de un nuevo Ministerio Real — muestra el señor Marren.

Los guardianes y los consejeros del padre admiran el diseño por el arquitecto. —Interesante, señor Marren — impresionado atónito dice el Padre Valentino.

—Será un nuevo aposento para guardar las flechas y asi
que no se cometa lo sucedido — añade Marren.

—Muy ingenioso pero donde lo piensa ubicar — interesado Valentino.

—En frente de la Iglesia real, señor — responde.

Todos impresionados ante las palabras del mayor de los Marren. Ven como los ojos de Valentino se remuerden de una furia pero no sabía como responder ante esto.

—Si lo construimos enfrente de la Iglesia no habrá nadie que se atreva hurtar ante los ojos de usted y sus guardianes — explica.

—¿Tu crees? — cuestiona.

—Si, Padre Valentino. El anterior esta ubicado en las afueras del valle cerca del bosque. Un buen punto blanco para los de la rebelión. Aprovechando su lejanía, provocó lo de hace un tres meses — explica mostrando sus planos.

Los demas susurran ante estar de acuerdo a las palabras del mayor de los Marren. Su estrategia les cautivan a querer ejecutarla pero el Padre Valentino no cree en su palabra.

—Tu padre diseñó el anterior y me dijo que seria una estrategia para que los del pueblo no atacaran y me prometio en su obra. — explica y enciende un cigarrillo. —Ahora quiero saber si estás en lo correcto en pocisionarlo en este punto —señala al terreno frente su ventana.

—Por supuesto señor...— pausa.

—Ante que me digas tus palabras quiero que me convezcas porque hay que reubicarlo — interrumpe.

—Padre Valentino mi padre elaboró un gran diseño con los materiales propios del local. Sin duda fue y será un gran aposento para sus flechas pero su ubicación no era de lo mas óptima — confiere Marren mostrando seguridad.

—Ahora Padre Valentino su mayor preocupación no son sus pobladores ya que les tiene mucha confianza y ellos también a usted. Su problema ahora son los pobladores que se le han revelado ante usted — explica.

El Padre Valentino se queda sin palabras y su cigarro es desperdiciado por las palabras de Marren. Sin duda el niño que conoció hace mucho tiempo, ahora es todo un hombre. Los años pasan y pasan, todo vuelve a cambiar nada es como su origen. Siempre hay una evolución aunque no la queramos aceptar. Asi ocurrió lo mismo con los de la rebelión.

—Me gusta tu propuesta y sin duda no la rechazare. Estas en lo cierto Marren, no cabe duda que las cosas van cambiando — acepta.

—Me alegro Padre Valentino, mi fin es cumplir sus necesidades y las de su población — concluye.

—Marren me has impresionado con tu diseño no pierde la esencia de Braneghin— observa la maqueta.

—Gracias Padre es mi objetivo que su naturaleza prevalezca que sea parte de Braneghin y no un invasor — afirma.

—Está en lo cierto — dirige su mirada al joven.

—En fin cuando comenzaremos la construcción—-pregunta el Padre Valentino.

—Solo debe firmar y la construcción comienza mañana — ofreciéndo su pluma y mostrandole el contrato.

El Padre Valentino firma de inmediato sin dudarlo. Leyendo cada letra del archivo para no ser engañado antes de firmarlo. Firma y la autorización ya está y se lo entrega al joven Marren.

—Padre Valentino confíe en mi — sonríe y toma la hoja.

El Padre Valentino mira a Marren a sus ojos y ve que sus propuestas son sinceras y de un bien mayor. Marren se retira con su maleta y se va a su vehículo con una sonrisa ante el mundo.

—¿Como ha ido todo?— entra la Sra. Perdomo.

—El diseño es muy ingenioso y conserva nuestro patrimonio— explica Valentino.

—Se ve muy interesante—

—Va a tener todo incluido la bodega, la sala de los guardianes y curanderos, un museo y un anexo de la Iglesia al Ministerio Real — indica.

—Me gusta mucho la propuesta y su ubicación — señala Perdomo.

—Ahora Perdomo dime como fue provocado el incendio— toma asiento y busca respuestas.

—Fue provocado por los mismos de la rebelión para lograr saquear las flechas— explica.

—Ahhh si, extraño a que no se han llevado el cofre de los lamentos — cuestiona.

—¿El cofre de los lamentos?— insegura.

—Si, el que almacena las flechas a las cual las trae a este mundo. Ese mismo. — acercándose a Perdomo.

—No debes de mentirme, sabes para aislar mi preocupación— dice ante sus ojos.

—Padre Valentino es la verdad lo cual llegamos a tiempo antes que ingresaran al profundo del Ministerio Real — suplica su confianza.

Valentino ve a Perdomo una mujer de carácter fuerte pero sus palabras parecían ser veredictos. Hace una reverencia y Valentino le coloca ante su cabeza su mano de la razón y concluye diciendo — La verdad te salvará —

Perdomo se levanta como una torre de bloque firme y sin demostrar ninguna debilidad. Ante sus ojos muestra la figura heroica de una capitana. Sin demostrar sus emociones la frialdad es lo que la enpodera a su autoridad.

—Dime quienes fueron tus guardianes ante esta misión —curioso Valentino.

—Fueron veinticinco, Padre— atónita.

—Mencionalos — ordena.

—Luca, Tarah, Ferdinand, Iván, Martín, Daniel, Bella, Dean, Philip, Demian, Vera, Guiseppe, Rozalia, Nasim, Leonardo, Rodolfo, Steffan, Jean Paul, Farres, Fabián, Marco, Tomás, Francio, Elijah y Paolo. — menciona obviando a su valiente Minerva.

—Hare una ceremonia para reconocer su logro y se les entregará una medalla — afirma.

—Perfecto, Padre — afirma.

—Con su permiso — hace una reverencia.

—Antes que te vayas —

—Si Padre — se detiene y se dirige ante el.

—Asistió ante tu combate la hija de Flecha Ciega — pregunta. —Se me va el nombre —recordando. —Minerva— acertó.

—Asistió Minerva al combate—pregunta.

—No señor — afirma.

—Como es posible sus habilidades eran necesarias en ese momento — sorprendido y con algo de decepción.

—La fuimos a reclutar pero a ella ni le interesó, Padre — explica.

—Y aún asi lograron vencer a los de la rebelión — atónito y maravillado.

—Así es Padre, su ayuda era de mucho pero esta vez solo debíamos afrontarnos ante el problema — agrega.

—Está bien estoy algo sorprendido— concluye decepcionado.

CiegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora