𝐁𝐚𝐤𝐮𝐠𝐨 𝐊𝐚𝐭𝐬𝐮𝐤𝐢→𝐞𝐬𝐜𝐞𝐧𝐚𝐫𝐢𝐨𝐬

009----.

Drabble!

[💥]

—¡Invítala!—le gritó Denki.

—¡Cállate maldito pikachu retrasado! —vociferó en su defensa, creando pequeñas explosiones en la palma de sus manos.

—Hm... —Sero analizó la situación.

—Oye por qué... —Kirishima se calló al ver como sus compañeros interactuaban.

Todoroki y Yoshida estaban hablando de quien sabe que, la más baja se reía y sonrojaba. Mientras que el bicolor sonreía al verla.

—No me digas que a Todoroki le gusta Yoshida. —Sero le habló a Mina.

—Hmm...Hay rumores. —se encogió de hombros.

Seguido de un gruñido, y una escalofriante aura por parte del cenizo que veía fijamente a la pareja.
Justo cuando se puso de pie, la campana sonó, haciendo que la chica se despidiera del semi albino y saliera del aula.

Era estudiante de la case B.

Hora de almuerzo, muy bien.

—Ahora si Bakugō, es tu oportunidad para invitarla a salir. —Kirishima sonrió con su almuerzo en manos.

—Que ya lo sé, joder... —gruñó sonrojado viendo a la pelinegra, caminando hacia el bicolor que también se acercaba. —Tch.

—¡Vamos hombre! —lo golpeó fuertemente.

El cenizo hizo mala cara, inhaló rápidamente y se encaminó hacia la mesa en donde estaban sentados los jóvenes.

—Oye fe-..

Se calló al sentir un fuerte golpe en la espalda, provocado por Midoriya y Mina, quienes habían resbalado con una caja de jugo que alguien tiró.

Chocando contra la mesa y tirando ambas bandejas de comida.
Kirishina se golpeó la cara con el quirk activado.

—¡Kacchan! —gritó nervioso el peliverde que estaba en el piso, debajo de la poseedora de cuernos.

La chica rosada se tensó, al ver con quién trataba de hablar el cenizo.

—Midoriya. —Shōto se levantó junto a la pelinegra para ayudarlos, la segunda ignoró tener la falda llena de fideos y verduras.

—¡Maldito Nerd! —Katsuki se giró para darle la paliza de su vida al pecoso que tiritaba de miedo.

—Yoshida. —la voz del bicolor volvió a sonar, pues la chica se había quitado los lentes que también estaban llenos de comida, junto a parte de su cara.

—Estoy bien... —hizo una mueca limpiando las lunas de sus anteojos.

—P-Perdona. Fue un a-accidente.— Midoriya habló tirándose al piso y pediendo disculpas, un poco más y enterraba la cabeza.

—No pasa nada. ¿Tú estás bien? —la menor vio al cenizo que tenía el ceño fruncido de solo ver al peliverde.

Asintió sin más.

—Tu uniforme... —Mina cogió servilletas para ayudarla.

—Oh, no es problema. —sonrió sacando la lengua, una bastante rara con una verdad afiladas en la misma. Ya que logró limpiar la cara llena de comida y su uniforme con algo de servilletas para ayudarse.

—Le falta sal. —dijo relamiendo sus labios con la larga lengua.

—Quiero hablar contigo. —Bakugō por fin le dirigió la palabra.

—¿Eh? —Hanabi se señaló a si misma.

—Midoriya, creo que te rompiste un hueso... Todoroki, ayúdame a llevarlo a enfermería. —la pelirosa le hizo señas al bicolor.

—Pero yo me siento bi-..

—¡Vámonos! —Mina lo jaló junto a Todoroki para irse de ahí.

—¿Entonces...? —acomodó un par de mechones negros tras su oreja, alargando la palabra.

El brisa que se sentía en la azotea le hizo recorrer un ligero escalofrío, sintiendo los amarillos ojos de la chica sobre él, habló.

—Quiero invirtarte a salir. —le dijo calmado.

Parpadeó atónita, notando cómo aquellos soles por ojos se dilataron ante aquella declaración.

Otro escalofrío.

—¿Enserio?

—Si... —contestó de mala gana. —Mira, si no quieres entonces dejo de per-...

—Acepto. —lo interrumpió sonriendo.

Caminando unos cuántos pasos hacia el cenizo, se acercó o suficiente para darle un beso en la mejilla, regalándole una sonrisa de lado, amigable y preciosa.

—Agradécele a Todoroki-san.

Luego de eso se marchó del lugar, dejando a un feliz Bakugō en la azotea, el cual tenía el corazón a mil por hora, y que en cualquier momento se le saldría del pecho por aquel beso tan desprevenido.

—Te faltaban huevos. —Kirishima se cruzó de brazos, apareciendo en escena, negando con una sonrisa.