36.

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Ambos miran el blanquecino fragmento de papel como si fuese su más temible enemigo, una materializada y escabrosa pesadilla la cual vencerán sin importar lo que anuncie. Están sentados uno frente al otro en la pequeña cama individual, pies debajo de sus muslos y corazones latiendo tan fuerte que parece romperán las costillas que les enjaulan.

Nunca habían estado en un momento tan decisivo; temor y esperanza merodeando a su alrededor dando nacimiento a una combinación fatal: la definición de un futuro.

— ¿Puedes abrirlo tú? —cuestiona con un hilo de voz, tendiendo el sobre a las manos del contrario— no soy capaz de leer que me han rechazado...

SeokJin sonríe dando la imagen de una persona prudente y calmada, aunque se siente un millar de veces más nervioso que el adolescente. Retira el sello dorado y tira del contenido hacia el exterior, desdoblándolo de forma lenta y casi tortuosa.

YoonGi abraza una almohada mientras presencia esos ojos negros deslizándose ágiles por el contenido del escrito, sintiéndose morir. Puede jurar que los latidos en su pecho se han detenido cuando el mayor alza la mirada, completamente impactado.

—Te aceptaron —susurra apenas audible, no porque le cueste creerlo, sino porque han confirmado la corazonada que tuvo el día de la audición, y eso le conmociona de tal forma que apenas puede soportarlo— Min YoonGi, ¡te aceptaron!, ¡estás dentro!, ¡fuiste aceptado! —casi grita, repitiéndolo las veces que sean necesarias para que lo crea.

El exaltado chico frente a él se vuelve borroso, y la quijada le tiembla con vehemencia hasta sollozar de la impresión, cubriendo su boca con ambas manos. Está temblando, y siente el pecho repleto de alegría, una dulce satisfacción cubriéndole el cuerpo.

Ni siquiera sabe por qué lo hace; quizá se debe a la euforia del momento, o porque fue su salvación en el momento clave de la historia, pero salta a los brazos de SeokJin sin detenerse a pensarlo, rodeando su cuello con ambos brazos y escondiéndose en su pecho. Llora sobre su camiseta blanca, sumergiéndose en su dulce aroma a vainilla y almendras, dejándose arropar por la calidez que desprende su cuerpo.

Ambos ríen y gritan como un par de lunáticos, como si no estuvieran irrumpiendo en el sueño de demás estudiantes, pero mientras SeokJin sostenga con firmeza la cintura de YoonGi y le susurre lleno de cariño que lo ha hecho bien, no podría importarle menos.


. . . 

Don't dare to touch me, because YoonJin is soft af and i can't handle it.  

Amé escribir este capítulo porque contacto físico/afectuoso por primera vez, bye-bye. 

"Flores En Primavera" [ksj + myg] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora