Capítulo 1

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|||¿Qué se siente al ser tan joven?- La Casa Azul---Canción de esta novela|||

- Paulo.

- ¡¿Qué?! ¡¿Viene el bebé?!

- No, idiota, que te tienes que ir ya a preparar para el partido.

- Oh ya, se me olvidó.- me sonrió y se agachó a la altura de Lucas, que estaba sentado en el suelo mirando la televisión.- ¿Venís con papá?

- ¿Mamá?

- Puedes ir.

Lucas me sonrió y Paulo lo levantó en sus brazos, dejándolo después en el suelo porque quería andar, como siempre. Se acercó a mí y me besó antes de subir las escaleras e irse a su habitación del hotel donde la Juventus estaba, mientras que yo dormí en la casa de mis padres.

Porque hoy estábamos en Madrid, ya que la Juventus jugaría con el Atlético de Madrid para pasar a la final de la Champions una vez más. Y aquí estaba yo, embarazada de nueve meses de nuestro segundo hijo o hija, sí, no sabíamos que sería porque Paulo quiso que fuera sorpresa. Así que todos apostaron dinero por si era niña o si era niño.

- ¿Come stai? (¿Cómo estás?)- preguntó Buffon sentándose a mi lado.

- Bene, tutto buono. (Bien, todo bien.)

Como siempre hacía cuando podía, tocó mi abultada tripa para ver si daba alguna patadita, que no solía ser muy común. Paulo no tardó en bajar con todo listo y con Lucas subido a sus hombros, sentado en su nuca y agarrándole de la mano para no caerse.

- Aquí está el papá.

- Mamá.

Sonreí agarrando a Lucas y sentándolo en mi pierna, dándole un beso en la mejilla y peinándole el pelo, que le iba creciendo más por el medio que a los lados, haciéndole más parecido a su padre.

Estuve con ellos dos hasta ver que los chicos se iban uniendo a nosotros y se acercaba, por lo tanto, la hora del partido. Así que levanté a Lucas del suelo y lo subí a mis brazos, abrazándome por el cuello.

- Me voy ya, suerte.

- Gracias, preciosa.- me acerqué a él y nos dimos un pequeño beso.- Adiós, enano.

Lucas agitó la mano en señal de despedida y Paulo rió mientras le soltaba la mano y salía del hotel, yendo a pie hasta la casa de mis padres.

- Ya llegué.

- Al fin, pensé que ya habías roto aguas por ahí.

- No, papá, no he roto aguas.- estaba sentado en el sillón, leyendo un libro. Solté a Lucas en el suelo y me senté, apoyando mi mano y tocando mi tripa con la otra.- ¿Y mamá?

- Hablando con Dante y Sofía.

- ¿Sofía? ¿Está aquí?

- Ajá.

- ¿Y cómo no me lo dices? Ven, Lucas, vamos a ver a los primos.

Me volví a levantar más lento de lo que me senté y le di la mano a Lucas, yendo hasta la cocina donde estaba Dante con su brazo por lo hombros de Isabelle y Sofía con Marco, mientras que mi madre tenía a Nico. Los hijos de Griezmann y mi prima tenían 10 meses ya, habían salido rubios y con los ojos azules los dos. Marco fue el primero en hablar, diciendo "mamá", mientras que Nico fue el primero en ponerse de pie con Mia como soporte.

- Hola, pequeñajos.

- ¡Enano!- Dante levantó del suelo a Lucas y le abrazó.

- Mirar chicos, la tía Gio.

- Me encanta que le digas que soy su tía cuando soy como su prima, ¿Cómo están?

- Más grandes cada día, ¿Y el futuro Dybala?

- O futura Dybala, nunca se sabe.

- Yo sé que será chico.

- Y yo sé que será chica.- dice Dante y reí mientras mi madre me dejaba a Nico.

- Míralo, un poco más y es más alto que Lucas.

- Sigue soñando.

Reí y abracé a mi madre, abrazando después a Isabella, Dante y Sofía la última, haciéndole cosquillas a Marcos. Fuimos al salón y nos sentamos allí a hablar hasta que llegó la hora de marcharse al Wanda, el nuevo estadio de los atléticos.

- Lucas, ven.

Dejé a Nico con mi padre y le di la mano a Lucas, yendo con él hasta la habitación. Lo subí a la cama y le cambié el pañal antes de cambiarle de ropa y ponerle la equipación de la Juventus con el número de su padre y su apellido detrás.

Lo dejé jugando en la cama con sus peluches y fui a ducharme y ponerme mi camiseta con el número y el apellido de Paulo junto a unos pantalones blancos y unas zapatillas negras. Salí del baño recogiéndome el pelo en una coleta, yendo al baño para subir a Lucas en mis brazos y bajar al salón, dejándole otra vez en el suelo.

- ¿Estamos listos?

- Sí, nos vemos después, mamá.

- Tengan cuidado.

Mi padre le dio a Sofía su segundo hijo y salimos los cuatro, yo de la mano de nuevo con Lucas aunque se soltó de mí y anduvo solo, así que al final acabé con Marcos en mis brazos. Llegamos al estadio y le dimos nuestra entrada, pasando adentro y yendo a las gradas para buscar nuestro sitio cerca del campo.

Estaba lleno, con gente gritando y animando a su equipo. Los chicos ya estaban calentando o mejor dicho, terminando su calentamiento. Hasta que, después de entrar en los vestuarios, volvieron a salir con los niños y se escuchó el himno de la Champions ante de los saludos entre ellos y después de los capitanes de los distintos equipos.

Y por fin, se inició el partido y el balón empezó a rodar. Mantuve siempre mi mirada en Paulo y en Lucas, para ver que no le pasaba nada ya que tenía miedo de llevarle a los estadios de tan pequeño.

No tardaron en marcarnos, exactamente Griezmann y por una falta. Pero Higuain supo poner el empate y fuimos al descanso así.

Hablamos hasta que volvió a sonar el silbato del árbitro y volvieron a moverse todos los jugadores. El partido transcurrió rápido y tranquilo hasta que apareció una buena jugada a unos veinte minutos de final.

Desde la defensa, después de varios toques entre ellos, el balón le llegó a Pjanic que dio algunos pasos ante de un largo pase hacia Paulo, que lo controló y se pasó a dos defensas, pero no llegó al tercero y cayó al suelo formando una falta.

Sonreí sabiendo que marcaría, se le daba bien tirar faltas y más a esa distancia. Así que me levanté con Lucas en mi brazos abrazándome el cuello y miré expectante la fala. Paulo empezó a correr y chutó, mandando el balón a la escuadra de la portería y añadiéndole un punto a la Juventus que por ahora lo mandaba a la final.

- ¡Sí!

Me abracé con mi hermana, dando pequeños saltos y haciendo reír a Lucas, ya que él también botaba conmigo. Pero entonces, mientras Paulo lo celebraba y señalaba a donde estábamos después de su Dybala Mask, sentí lo que pensé que no sería ahora, en este momento.

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¿Qué se siente al ser eterno? (Paulo Dybala)Where stories live. Discover now