El mejor postor | Luke E.

67

—Tú te condenaste, amor.— susurra cerca de mi oreja, lo que me hace estremecer. —¿Sabes cuando? Cuando me abandonaste en el infierno.

—Las cosas no sucedieron como tu mente quiere que lo creas.— musito en medio de lagrimas.

—Me dejaste ¿qué está mal ahí? Yo sufrí, ahora te toca sufrir a ti. Tu vida es una mierda, Kate. ¿Dónde están tus padres? ¡Ah, si! muertos. ¿Tus tíos? te odian. No tienes amigos, no tienes a nadie que te ame... eres una porquería.

Sin pensarlo dos veces, mi mano se estrella con su apretada mandíbula. Él me dedica una mirada fría y molesta, le ha enojado hasta las venas lo que he hecho.

Entonces, carga el arma y me hace girar hacia las cajas frente a mi.

—Sé Dios, Kate.— ríe. —¿Quién vive? ¿Quién muere?

Estoy contra la espada y la pared. Tengo que decidir, pero no tengo el valor suficiente para después ver los resultados.

No tengo el valor suficiente para condenarme por el resto de mi vida por la persona que maté por una decisión errónea. No tengo el valor para mirarle la cara a nadien en estos momentos.

Tyler ha llegado a su limite y ahora nadie lo podrá parar.

Mi mente se congela. Otras cosas se apoderan de mi mente en vez de lo importante en el momento. Sin embargo, pensar en el futuro me es inquietante, así que lo hago sin desear.

¿Qué haré?

—No tengo todo el maldito día, Kate. Date prisa.

—No puedo.— sollozo.

—¡Oh! Claro que puedes, princesa.— se burla. —No es tan difícil. ¡Es más! Te daré una pista... Luke está en la de en medio.— señala la caja. —¡Ah, no! ¿Cómo era? Nathan está en la de en medio. ¿O tampoco? Lo siento, Kate.

—No me haga esto...

—¡Ya estamos aquí! No pienso desperdiciar semejante emoción.

—Tyler... por favor.

—Hazlo, Kate. Elige.

—No puedo.

—Mierda, ¡hazlo!

—¡NO!

Acto seguido, tan solo escucho dos disparos.

Dos disparos son suficientes para hacer que mi corazón se estruje por completo. Esos dos disparos son los que me hacen crear películas erróneas en mi cabeza. Las dudas empiezan a surgir, al igual que la inquietud.

Un disparo terminó en la caja de en medio, mientras que el segundo disparo terminó en la tercera caja.
  La única que quedaba libre fue la primera, así que mi nerviosismo empezaba a aumentar a niveles desconocidos.

Tyler camina hacia la caja para después abrirla y encontrarse una grata sorpresa; nadie se encontraba en ella.

—¿Qué...?

Se encaminó hacia las otras cajas y al abrirlas se encontró la misma sorpresa que en la primera.

—¿Dónde mierda está Irina?— interroga hacia los hombres presentes.

—No lo sabemos, señor.

—¡¿Qué?!

El ruido de las sirenas policíacas hace que todos guarden silencio.
  Los hombres que antes obedecían a Tyler, empiezan a correr hacia la salida, dejándolo indefenso.

La carga de un arma nos hace sobre saltar a ambos.

—Sueltala.— escucho la voz de Nathan, y giro un poco mi cabeza para verlo de píe. —Se acabó Tyler.

—¿Creen que ganaron?— Tyler empieza a caminar hacia la salida, arrastrandome con él.

—La policía está afuera. Rindete. Ya causaste mucho daño.

—Si serás idiota.

Un disparo me hace soltar un grito desprevenido. Y ésta vez, ya no es una advertencia del destino. Ahora, las cosas estaban pasando. 

Las cosas pasaron tan lento que sufría a cada segundo que pasaba.

Frente a mi, Nathan estaba tirado en el suelo con una herida de bala en el pecho, demasiado cerca del corazón. La sangre empezaba a derramarse por todas partes, al igual que mis lagrimas.

Nathan estaba muerto.

—Esto es sólo tu culpa.— habla Tyler a mis espaldas.

—Se acabó Tyler.— musito.

—¿En serio crees que esto se acabo, linda? Esto no se acaba hasta que yo lo diga.

Siento como me libera de su agarre y yo empiezo a caminar a pasos lentos lejos de él. Sin embargo, me paro en seco cuando su arma apunta a mi. Tengo una distancia favorable para salir corriendo, pero el miedo de recibir otra bala, me hace quedarme quieta.

Decidida a arriesgarme, trato de dar un par de pasos más lejos. Pero una mirada hacia el suelo me hace quebrarme en segundos.
  No puedo dejar a Nathan.

—Tyler basta.

Una voz detrás de mi me llama la atención.
  Irina se encuentra detrás de mi con un arma en dirección hacia Tyler.

—Luke y Liam están bien, Kate.— ella me habla y yo asiento sin entender a la perfección.

—Eres una maldita perra traicionera.— Tyler deja de tener el arma hacia mi dirección para después tenerla hacia Irina. —¿Te pones de su lado? ¿Ya olvidaste todo lo que te hizo? Te arrebató a Luke.

—¡Cierra la maldita boca!— Irina exclama.

Un disparo me hace sobre saltar en mi lugar. Y con poca esperanza de que sea Tyler el que se encuentre derramando sangre en el suelo, me giro a ver a la mujer detrás de mi con una bala que perforó su vientre.

—¡POLICÍA NACIONAL! ¡SALGA AHORA!

—Es momento de acabar contigo de una maldita vez.— habla Tyler a mi dirección.

Sin saber que hacer del todo, tomo el arma que Irina a soltado cuando ha caído y la mantengo firme hacia el hombre frente a mi.

Una risa me hace entrar en razón de lo que estoy haciendo.

—¿Crees que te tengo miedo?— interroga. —. Mírate, eres una niñata después de todo. Nathan está muerto, por tu culpa. El hijo de tu amor, se está muriendo ¿qué más quieres lograr con tu egoísmo?

—Esto no es mi culpa. Nada de esto lo es.

—¿En serio crees que te tragarás ese cuento?— ríe. —. El remordimiento caerá en ti tarde o temprano.

—No es mi culpa.— repito. —No es mi culpa haberte conocido. No es mi culpa que seas una persona de mierda.

—Terminaré con esto ahora.— respira hondo y eleva el arma hacia mi dirección. Yo, mantengo firme la mía. —Hagamos esto más dramático... ¿algo más que quieras decir?

Y es entonces cuando me doy cuenta que se ha formado un hermoso arco iris.

—Si...— suspiro. —. Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes.

Y entonces, escucho el último disparo.

| × × × |

¡SOLO QUEDAN DOS CAPÍTULOS MÁS DE LA NOVELAAAA!

¿Están listas para el penúltimo y último capítulo?

x.