El mejor postor | Luke E.

21

Pasé de largo.

Continué con las compras para Anne y para mi. He de confesar que me metí por pasillos y estantes para que Luke no me encontrara; seguía terco en hablar conmigo. Si, tenía miedo de que me obligara a ir con el nuevamente. Sin embargo, dudo mucho que fuera capaz de armar un escándalo por un capricho suyo.
Maldición, yo soy ese capricho.

Deposité en el carrito el ultimo articulo que fuera necesario para sobrevivir estos días sin la señora Jay. Me encaminé a paso apresurado a cualquier caja que estuviera disponible para atenderme de inmediato.

No obstante, la misma figura de hace unos minutos, me impide el paso justo al salir del área de comida. Tiene sus manos colocadas a los lados del carrito dejándome sin escapatoria. Podría salir corriendo abandonado la comida ahí.

-¿Porque huyes?- articula.

Tardo en responder y sinceramente, ni yo misma encuentro la respuesta que el busca. Me siento tan idiota por comportarme con una niña que quiere su dulce después de hacer las compras.

-Simplemente no quiero tener nada que ver contigo- sonrío falsamente.

-Podemos ser amigos.

-No puedo ser amiga de una persona que me vigila siempre- escupo. -. No tienes nada que ver conmigo ¿porque te empeñas en aferrarte?

Suspiró.

Me estaba estresando, estaba cansada de aquellos suspiros en donde el trataba de buscar una respuesta que ni el mismo podía darse. No estuve con el mucho tiempo, pero se perfectamente que cuando otra persona tiene la razón, viene ese suspiro alentador para si mismo.

-Anne me dijo que estarías aquí- masculla.

Bien. A eso realmente le encuentro el sentido. Ella busca de cualquier forma tratar de unirme con Luke y eso no pasará. Salí para no volver más.

-¿De donde tienes comunicación con Anne?- interrogo.

-Recibí un e-mail. Ella me describía detalladamente que estarías aquí, haciendo las compras porqué su madre, viajará por asuntos del trabajo...

Perfecto. ¿Que amiga no le da información importante a un extraño que podría ser un secuestrador?

-, solo seamos amigos- termina.

Asentí.

Una parte de mi decía que no había nada de malo en tener una amistad con una persona diferente a Mark o a los chicos de la preparatoria. Sin embargo, la otra parte de mi solo lo decía para que me dejara libre, ¿como porque razón sería amiga de Luke Evans?

-Bien, amiga, ¿te acompaño a la caja?

-No hagas que me arrepienta de permitir volver a verte.

El asiente.

Se retira de mi paso y con paso decidido camino hasta la primera caja para pagar por los artículos.
Detrás de mi, sentía a Luke seguirme con la mirada para evitar perderme.

He de decir, que no fue el tiempo que yo esperaba tardarme en la caja; Luke se ofreció en pagar todo y yo me negué, después de eso vino una discusión que parecía entretener a los presentes. Después de los primeros diez minutos la cajera se empezó a estresar.
No me quedó de otra que aceptar que Luke pagara todo.

Tomé el carrito una vez que todo estuviera dentro de el, con bolsas y salí. ¿Que pasó después? El señor se ofreció hasta gritar que me llevaría casa, para no caminar con peso en mis hombros.

El trayecto a casa de Anne no fue de lo más entretenido. Empezamos una discusión más y a mi se me salió decir que era una mala idea que estuviésemos cerca. A lo que el accedió a no aparecer más en mi vida. Realmente fue facil quitarme su peso de en sima.

-Gracias por traerme y pagar todo- hablo una vez fuera del auto. -, aun que no tenías que hacerlo.

-No tienes nada que agradecer, espero que te vaya bien en la vida Kate.

Asiento.

Tomo las bolsas y camino hasta la entrada. Justamente en ese momento recuerdo cada una de las palabras que la rubia teñida fue a decirme a mitad de clase.

-¡Oh, casi lo olvido!- grito evitando que arrancara el auto. -, tu novia la rubia fue a mi preparatoria a decirme que te diera un recado. La cita para ver a tu bebe es dentro de ocho días- mascullo. -. Y dile que no regrese a mi preparatoria.

-Si me dijo- soltó una pequeña carcajada. -, junto con la contestación que le diste tu, ¿cuando estemos en la cama?

Sentí mis mejillas ponerse rojas por la vergüenza.

-. Dudo mucho que puedas sacarme de tu vida fácilmente.

Dice después de arrancar el motor y salir de aquí.

(...)

La tarde pasó volando.

Estaba en mi lado del cuarto buscando películas con las cuales pueda pasar el tiempo.

Después de que entré a casa para dejar las compras, tuve una fuerte discusión con Anne por haberle dicho donde me encontraba a Luke. Ella me dió un sermón en donde trataba de abrirme los ojos y aclararme que Luke no era una mala persona, que el solo trataba de cuidar de mi.
Lo defendió a capa y espada dejándome a mi como la mala de la historia cuando realmente, era la victima.

Después de la discusión, salió de casa y no regresó hasta después de dos horas y desde entonces, se la ha pasado en la sala para evitar estar cerca mio.