Un tropiezo de amor 》Libro #1 Bilogía Amor en París《

¿Quieres ser mi novia?

Narra Anne.

El reloj daba las dos de la tarde, Tyler estaba por llegar, habíamos quedado que la cita sería en mi departamento, lo que él no sabía es que planeaba llevarlo a algunos lugares, que eran parte de mi diversión.

Sonó el timbre, estaba nerviosa, abrí la puerta, estaba él, tan guapo como siempre.
─Hola Anne, ¿cómo estás?─Dijo y se acercó para darme un beso en la mejilla.
Una mezcla de emociones recorrió mi cuerpo, no estaba preparada para algo así.
─Hola Tyler, pasa ─Dije algo nerviosa.
Entró y su mirada recorrió todo mi apartamento.
─Bien ¿qué haremos hoy?.
─ Pues primero, veremos una película romántica y luego iremos a algunos lugares─ Dije.
─Bueno, tú mandas─Dijo en tono divertido.

Nos sentamos y encendimos la televisión.
─¿Qué película quieres ver?─le pregunté.
─ Ay Anne, le preguntas a un inexperto en esos temas ─Dijo con una sonrisa.
─ Bueno veremos, Los Imprevistos del Amor.
─ Esta bien.

(...)

Terminó la película y lo miré de reojo, sus ojos estaban anegados en lágrimas.
─ Quien lo diría, Tyler Jhonson está conmovido por una película romántica─dije en tono sarcástico.
Se limpió los ojos y me miró.
─Yo no estoy conmovido, es que me cayó una brusca en el ojo─Dijo tratando de excusarse.
─Si, no me digas, te cayó en los dos─Dije soltando una carcajada.
Empezamos a reír y salimos del apartamento.
─Y ahora ¿a dónde vamos?─ preguntó Tyler.
─Yo conduzco ─Dije, no tenía mucha experiencia pero si sabía conducir.
─ Pongo mi vida en tus manos─ Dijo él riendo.
Me subí al auto, un Ferrari último modelo, en color negro.
Conduje hasta el Lovre. Uno de mis lugares favoritos en París.
El Louvre es uno de los mejores lugares que visitar en París, además de ser el museo más visitado del mundo.
Tyler se tapaba el rostro con las manos.
─Esto es muy aburrido─protestó.
─Vamos Tyler, dijiste que yo mandaba hoy─ Le respondí casi al instante.
─Solo porque insistes ─dijo y bajó del auto.

La fila era enorme, pero avanzaba rápido, después de media hora logramos entrar.
La guía nos explicaba la historia de las obras que lucían en las paredes.
Llegamos a las más esperadas por todo el grupo, Gioconda de Leonardo da Vinci, la Venus de Milo y el Escriba Sentado del antiguo Egipto.
Cada una tenía su fabulosa historia y significado, Tyler escuchaba atento las explicaciones de la guía.

Terminamos el recorrido y salimos del museo.
─Ahora vamos a ir a otro lugar─ dije.
Conduje hasta el Panteón. Quería mostrarle algo a Tyler.
─ ¿Enserio Anne?¿Qué diversión hay en ir a un cementerio?
─No es cualquier cementerio, ya verás─dije.
Caminamos por entre las tumbas, todas ellas bien edificadas, hasta llegar a una, era grande, con lindos tallados en piedra, su nombre rezaba Marie Curie.
Tyler lo entendió todo, estábamos en la tumba de la mujer a la que la universidad dónde estudiábamos hacía honor.
Este era un momento de aprendizaje histórico.
─ Anne, no sabía que Marie Curie estaba enterrada aquí mismo en París.
─Ves, te pierdes de grandes enseñanzas.
─ No sabía que clase de tesoros escondía París.
─ ¿Sabes qué?aparte de Piere y Marie Curie también estudiaron en nuestra universidad otros premios Nobel como: Frédéric Joliot- Curie, Jean Perrin, Gabriel Lippmann.
Tyler solo asentía tratando de asimiliar la información.

Visitamos algunas otras tumbas de personajes ilustres de Francia como Voltaire, Victor Hugo, Louis Braille y Alejandro Dumas.
A la salida del Panteón, me paré en seco y le dije.
─Ahora te llevaré a otro lugar.
─¿Más?─preguntó.
─Sí, el último.

Conduje hasta la biblioteca más grande de París. Era enorme, con pasillos de larga distancia, columnas de libros por donde mirase, libros de todo tipo de género, me sentía perdida en mi mundo favorito.