Narra Anne
Un año, quizá es la luna de miel más larga que se haya vivido, pero era fascinante poder viajar al lado del amor de mi vida por todo el mundo.
Nunca había tenido la dicha de conocer otros países, excepto Francia y Estados Unidos, pero habíamos recorrido Italia, Panamá, Puerto Rico, México, Dubái e incluso Egipto e India.
Era fascinante conocer historias apasionadas de cada país donde íbamos, además de sus costumbres, tradiciones e idiomas.
En todos nuestros viajes éramos personas normales, sin lujos, dinero en exceso y sin privilegios.
Viajar a cada lugar al lado de Tyler era una experiencia inolvidable, era totalmente divertido e interesante.La felicidad nos llenaba a cada segundo, los días, noches y madrugadas a su lado eran especiales, le daba ese toque de dulzura y alegría a cada minuto.
Habíamos pasado tiernos y dulces momentos y también otros de desacuerdo, como por ejemplo, el siguiente lugar donde iríamos o el hotel donde nos hospedaríamos, sin embargo, siempre terminábamos decidiendo juntos y la reconciliación era maravillosa.
(...)
─Eres hermosa─dijo Tyler, mirándome fijamente.
Llevaba un vestido de baño con estampados en colores turquesa y fuscia.
─Gracias señor Jhonson─le dediqué una sonrisa, mientras ponía bloqueador solar en mi piel.
─Señora Jhonson, usted es la mujer más hermosa que he conocido.
─¿Ah sí? Eso no pensabas cuándo me conociste─enarqué una ceja.
─Emm, en ese tiempo estaba ciego─bromeó.
─Bueno, a mí no me parecía─me acerqué y me recosté en su pecho.
─Te amo mi reina─dijo apoyando su mandíbula en mi cabeza.
─Eres la casualidad más linda que llegó a mi vida, nunca pensé vivir esto a tu lado. Eras como ese amor imposible que alguna vez todos tenemos en la vida─le dije mientras contemplaba el mar.
─¿Sabes? Es curioso, para mí, tú eras ese amor imposible, cuándo me pediste que me alejara, se me cayó el mundo, tú eras mi mundo, pero le agradezco mucho a Dios, al destino y a la vida, por regresarte a mis brazos─dijo susurrando tiernamente las últimas palabras.Me removí en su pecho y levanté el rostro quedando nuestros ojos en perfecta dirección.
─¿Te he dicho lo mucho que te quiero?─sonreí.
─¿Y yo lo mucho que me encantan tus ojos?─tocó mi mejilla.Le dí un pequeño beso en la mano que tocó mi mejilla y volví a recostarme en su pecho, fijé la vista en el inmenso mar y no pude evitar una sonrisa.
─Señora Jhonson, ¿recuerdas como empezó esto?─preguntó Tyler revolviéndo mi cabello.
─Un tropiezo, señor Jhonson, un tropiezo de amor─mis labios esbozaron una sonrisa al recordar el inicio de todo.(...)
La tarde era espléndida, el agua estaba cálida, ni fría ni caliente. Los rayos del sol pegaban en nuestros rostros y la brisa soplaba refrescándonos.
El sonido del mar era realmente maravilloso y el olor a sal se impregnaba en nuestros rostros al pegar la brisa.
Las olas llegaban a la orilla, donde caminábamos tomados de la mano.
─¿Has pensado cuál será nuestro próximo destino de viaje?─preguntó Tyler y se paró a mirar el horizonte.
─No, aún no cariño. Me gusta estar aquí y mirar el mar cada día. Esta casa es hermosa.
─Es nuestra casa princesa─corrigió. Aún no me acostumbraba a mostrar pertenencia por lo que era de Tyler.
─¿Cariño y tú dónde quieres viajar?─le pregunté.
─¿Te parecería bien, Olympic?─sonrió.
─¿Qué quieres decir?─cuestioné desconcertada.
Metió su mano en el bolsillo de su short playero y sacó un juego de llaves.
─Escuché que en ese lugar hay muchos recuerdos. No estaría mal visitarlos todas las veces qie queramos─me entregó las llaves
─¡No puede ser!─dije atónita.
─Es tuya, mi princesa.
─Pero... ¿cómo...
─Hans me contó que tú no querías venderla pero era necesario. Luego escuché decir a tus padres que los nuevos dueños querían vender y pues apareció un comprador.Salté y coloqué mis piernas alrededor de su cintura.
El sol se empezaba a ocultar y el cielo se tornó de colores rojizos.
─¡Eres el mejor, gracias mi amor!─le dije después de un largo beso.(...)
Hacía algunas noches que no dormía bien, no entendía qué estaba ocurriendo, siempre había tenido patrones de sueño equilibrados y nunca había padecido de insomnio.
Sentía mareos constantemente, además de algunos dolores de cabeza, pero no quería decirle a Tyler, no quería preocuparlo.
Miré el reloj, daba las cuatro de la mañana, si acaso había logrado dormir unas tres horas, sentí náuseas, Tyler me tenía abrazada, pero estaba profundamente dormido.
Quité su brazo de encima y corrí hacia el baño, encendí la luz y levanté la tapa del baño, ya no podía más.
Sentí las mechas de mi cabello recogerse y sentí su respiración en mi nuca.
─Princesa ¿estás bien?─preguntó cuándo terminé.
─Algo que comí seguramente me cayó mal─dije respirando hondo.
─Seguramente fueron los mariscos─me tendió una toalla para secarme, me estaba lavando la cara─¿Segura que estás bien?
─Sí, cariño. Estoy bien. Ven volvamos a dormir que ya casi amanece─tomé su mano y lo conduje hasta la cama.(...)
A la mañana siguiente, desperté pero Tyler ya se había levantado, seguramente a hacer ejercicios, como todas las mañanas.
Me levanté y fui directo al baño, las náuseas volvieron y otra vez vomité.
Me cepillé y me desnudé para meterme a la ducha. Miré mi reflejo en el espejo, estaba ojerosa por la falta de descanso debido pero algo llamó mi atención, mi barriga estaba abultada más de lo normal, la toqué y estaba dura, era como si... no, no podía ser... aunque si...
ESTÁS LEYENDO
Un tropiezo de amor 》Libro #1 Bilogía Amor en París《
Romance[COMPLETA] *P R I M E R A P A R T E* EDITANDO* Anne, tímida, callada, soñadora y romántica, todo se resume en la chica nerd. Tyler, egoísta, creído, el típico chico popular que juega con quienes ponen sus ojos en él. Un tropiezo los hará encontrar...