Salvando a Mandy

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Narra Anne.

─Mandy por favor contéstame. Necesito hablar contigo─era la quinta vez que le dejaba un correo de voz.
Estaba acostada en mi cama luego de un largo día de clases y trabajo. Mandy ni siquiera había asistido a clases y no contestaba mis mensajes ni llamadas.

Me levanté y me bañé rápidamente, me vestí y empecé a caminar hacia su casa.
Al llegar escuché unos gritos que me asustaron mucho, tomé valentía y toqué la puerta.
Todo se quedó en silencio y Mandy abrió la puerta.
Estaba asustada y las lágrimas corrían por sus mejillas.
─Anne ¿qué haces aquí?─preguntó fingiendo normalidad.
─Vine porque no fuiste a clases y además no contestas mis mensajes y llamadas. ¿Estás con él verdad?─pregunté en voz baja.
─Si, estábamos viendo una película romántica, por eso mis lágrimas─dijo en voz alta.
─¿Segura que todo está bien amiga?
Dudó un poco y se quedó unos segundos en silencio hasta que se escuchó quebrarse algo de vidrio.
─Si, está todo bien─dijo nerviosa─Vete Anne, luego te llamo─y cerró la puerta.

Me quedé sorprendida, preocupada y desconcertada. Mi amiga no estaba bien, algo estaba pasando y debía averiguarlo.

Tomé mi celular y llamé a Brad, hacía tanto que no hablaba con él.
Anne, que sorpresa. Te habías olvidado de mi─dijo alegremente.
─Hola Brad, lo siento. He estado muy ocupada, entre el trabajo y las clases se me pasa el tiempo volando. Quisiera saber si nos podemos ver, no sé puede ser en alguna cafetería.
─Claro que si Anne, en media hora te veo en la cafetería que está frente a los Jardines de Luxemburgo.
─Vale, nos vemos.

Cerré la llamada y me quedé escuchando la conversación de Mandy con su novio.
Ya te dije que era una amiga─decía llorando.
─Cállate, eres una cualquiera. Traéme otra cerveza, es para lo único que sirves─gritó su novio.

Me alejé corriendo hacia los Jardines de Luxemburgo, necesitaba hacer algo para que Mandy no siguiera sufriendo.

(...)

Al cabo de diez minutos de estar sentada en las mesas de afuera esperando a Brad, vi su auto venir.
─Hola Anne ¿cómo has estado?─ saludó luego de bajarse y caminar hacia dónde estaba sentada.
─¿Qué tal Brad? Oye me da mucha pena llamarte para pedirte esto, pero es urgente. De verdad lo necesito.
─Anne, sabes que somos amigos─tomó mi mano y sentí un cosquilleo─puedes pedir lo que quieras
─Gracias Brad. Verás, mi mejor amiga está en problemas. Su novio la maltrata, ella dice que no pero yo misma he visto y oído como la trata─dije y ya no pude contener el llanto.
─Oh Anne, cuánto lo siento.
─Y te quería pedir un favor. Si pudieras investigar quien es ese chico a ver si tenemos pruebas para denunciarlo. Él está en nuestra clase, es nuevo, no sé mucho de él pero puedo darte el nombre. Por mi parte yo me encargo de hablar con ella, aunque sé que no va a querer denunciarlo, está muy enamorada.
─Cuenta con eso cariño─dijo tiernamente.
─Muchas gracias Brad, de verdad gracias.
Se levantó de su silla y me abrazó.

(...)

Estaba a punto de llegar a la universidad cuando en la entrada vi a Kevin, el novio de Mandy besándose con una chica que iba casi desnuda, no sé cómo le permitían la entrada a la universidad.
Él notó mi presencia y se despegó de la chica.
─¿Que quieres?─preguntó en tono altanero.
─¿Sabes qué quiero? Que te alejes de mi amiga─dije mirándolo con odio.
─A ver patito feo, yo no me voy a alejar de tu amiguita─hizo comillas con sus dedos─además si me entero que le dices algo de esto, te mato─dijo con un dedo amenazante─Ya lo sabes, te mato─volvió a repetir.

Llegué al baño y me encerré, tomé mi celular y marqué el número de Brad.
Cariño ¿pasa algo?
─Brad, lo vi besándose con otra. Me amenazó de muerte si le digo a Mandy.
─Ah no, eso si que no. Que no se meta contigo. Por cierto, estuve investigando y resulta que es todo un patán, tiene dos casos por abuso y además lo botaron de tres universidades por peleas en los pasillos y lo cambiaron de ciudad por eso está ahora estudiando ahí. Y me temo que tu amiga es su siguiente víctima.
─¿Víctima?─dije con el corazón en la mano.
─Si Anne, al parecer mató a una chica pero no han podido inculparlo por falta de pruebas─dijo seriamente.
─Tengo que sacar a Mandy de sus garras─dije lentamente y cerré la llamada.

(...)

─Anne, que bueno verte─dijo Carol.
─Carol necesito tu ayuda urgente─dije preocupada y ella lo notó.
─¿Qué pasa?
─¿Recuerdas a Mandy?─ella asintió─pues su novio la maltrata y ella no quiere decir nada ni contarme, lo justifica y dice que es bueno y que lo ama.
─Vaya Anne, está metida en un serio problema, nada que no tenga solución siempre y cuando ella quiera salir de ese círculo vicioso. Está en una relación tóxica, término acuñado a las relaciones donde uno de los miembros agrede de cualquier forma la identidad y personalidad de la otra. Ya sea física, mental o psicólogicamente. Luego esto se vuelve rutina y la parte afectada lo ve como normal y lo acepta.
─Ayúdame Carol por favor─rogué.
─Bien lo primero es hablar con ella. Debes traerla contigo a una consulta. Aunque también hay otro método, aunque corre riesgo su amistad─advirtió.
─¿Y cómo que sería?─pregunté .
─Mira esto va en contra de la ética profesional y el derecho al secreto pero entiendo lo que conlleva un maltrato y podemos decir que está justificado lo que te voy a sugerir. Puedes grabarla mientras te cuenta lo que le ha hecho ese tipo y luego presentar la denuncia a las autoridades. Pero estoy segura de que tu amiga no te perdonará si haces eso. Por lo que mi consejo es que intentes primero por cualquier forma posible traerla a una consulta en la que yo hablaré con ella y trataré de que entre en razón.
─Gracias Carol─dije y salí dispuesta a hablar con Mandy.

(...)

Diana, te llamo para informarte que no podré asistir hoy al trabajo. Discúlpame.
─Tranquila Anne, entiendo. Pero mañana te quiero puntual, hay mucho trabajo─dijo Diana.

Me encaminé a hablar con Mandy, al llegar escuché gritos y sollozos.
Rápidamente llamé a Brad para que me acompañara. La madre de Mandy estaba de viaje en un congreso sobre la línea de maquillaje que estaba vendiendo y un mes tardaría en regresar.

Brad llegó en un abrir y cerrar de ojos, me saludó y tocamos la puerta.
─Eres una cualquiera─gritaba Kevin.
─No, por favor no me pegues otra vez─suplicaba Mandy.

Brad derrumbó la puerta justo en el momento en el qué Kevin tenía un cuchillo levantado con intención de hacerle daño a Mandy.
Tomó a Kevin por la camisa y lo estrelló contra la pared, le pegó varias veces en la cara y vi que ya empezaba a brotar sangre.

Abracé a Mandy con todas mis fuerzas mientras trataba de calmarla, su cara estaba llena de golpes y un ojo le sangraba.
─Anne, gracias por venir─sollozó en mi hombro.
─Siempre estaré para ti, pequeña─le dije tiernamente.
─Llama a la policía─dijo Brad mientras forcejeaba con Kevin.
Tomé mi celular y temblando llamé.

(...)

─Gracias por salvarme, de no ser por ustedes tal vez estuviera muerta─dijo Mandy y sus ojos se cristalizaron.
─Ya ese tipo está preso, no te preocupes nena─dije.
Brad en todo el tiempo que llevábamos sentados en la sala de la casa de Mandy no le había quitado los ojos de encima.
Se le acercó y le tomó la mano mientras la miraba.
─Ya no te preocupes por nada. Todo va a estar bien─dijo en un susurro. Y de repente me sentí enojada, desplazada, acaso estaba ¿celosa?

Un tropiezo de amor 》Libro #1 Bilogía Amor en París《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora