Un tropiezo de amor 》Libro #1 Bilogía Amor en París《

El accidente

Narra Tyler

Los días pasaban lentamente, esta agonía me estaba matando, no podía seguir viendo a mi princesa inerte en una cama, me dolía verla sin vida, como si estuviera...
─Tyler, debes irte a casa, has estado dos días aquí, ve a descansar─dijo Nancy, la mamá de Anne.
─No puedo separarme de ella...─dije sollozando.

─Tyler, escucha, ha pasado un año, tal vez es momento de que empecemos a aceptar las cosas como deben ser─dijo Brianna.
─No, nunca voy a aceptar que Anne se ha ido─rompí a llorar─ella... ella va a despertar.
─Yo pensaba lo mismo Tyler, pero ha pasado mucho tiempo, tal vez...
─No voy a dejar que la desconecten, mi corazón me dice que ella está viva, que va a despertar.

─Mírate, has dejado de ser tú, has dejado de sonreír, de ser feliz─esta vez habló la señora Nancy.
─Anne es mi vida, yo solo la necesito a ella para ser feliz.
─Tyler, soy su mamá y para mí esto es lo más difícil que puedo estar pasando, pero ya perdí a mi hija y no quiero perder a un hijo─dijo y me abrazó.
─Muchas gracias a todos─les dediqué una sonrisa llena de lágrimas.

(...)

─Mi amor, mi princesa, amor de mi vida, cuánta falta me haces─suspiré─Tu llegada a mi vida, fue una bendición, no creía mucho en Dios, pero cuando llegaste tú, todo se iluminó y en la claridad encontré a Dios, gracias a tí conocí el amor y el poder de un Ser Supremo en mi vida, desde entonces no he dejado de agradecerle por tan maravilloso regalo, como lo es tenerte en mi vida. Cariño, cuánto deseo que vuelvas, que me mires, me escuches, me beses y me abraces tan fuerte como lo hacías y que me encantaba. Hace tanto tiempo no veo el azul intenso de tus ojos, esos que me hacen imaginar el mar con todos sus matices, esos que me hacen soñar con una vida feliz a tu lado, esos en los que veo la verdad, nuestra verdad. Anne porfavor no me dejes solo, te necesito tanto─quise decirle tantas cosas más pero el llanto no me dejaba hablar.

─¿La quieres mucho verdad?─no sabía que el padre de Anne estaba en la puerta, había llegado de su viaje a Washington.
─Sí, la amo. Ella me enseñó a vivir, literalmente.
─¿Sabes? Cuándo estaba pequeña le gustaba mucho dormir abrazada a un peluche, el señor Big, era un muñeco gigante pero muy feo─dijo riéndose─y un día le cambié ese peluche por uno de igual tamaño pero más bonito y me dijo: papá, así lo cambies por el más bonito, mi favorito es el señor Big, porque me hace sentir segura y lo más importante siempre será lo de adentro, no lo de afuera. Con sus simples palabras de una niña de seis años, me dio una importantísima lección que aún conservo y lo haré por el resto de mis días, pero al parecer a ella se le olvidó.

─¿Cómo? ¿Qué quiere decir?─le pregunté desconcertado.
─Tyler, Anne ha sufrido mucho, cuando tenía diez años, le descubrimos una enfermedad ocular, no era grave pero si debía usar anteojos por un periódo de tiempo, luego para los mismos días, la llevamos al dentista y le mandaron a usar frenos, entonces las dos cosas se juntaron. En el mismo momento en qué se estaba convirtiendo en una señorita, entonces te puedes imaginar lo difícil que fue su adolescencia. Burlas y risas, sufrió muchísimo, luego creció y nadie quería ser su amiga y tampoco tuvo novio, siempre fue muy solitaria, encerrada en su propio mundo, donde siempre se sintió despreciada.
─Me deja atónito─le dije y era la realidad, nunca imaginé que Anne hubiese pasado todo eso.

─Sí, mi niña sufrió mucho, la cambiamos de escuela algunas veces, sus compañeros le hacían la vida imposible, cuándo llegó acá, según me cuenta su mamá, siguió en lo mismo, incluso, peor porque ella pensó que eso era parte del pasado, pero volvió a abrir viejas heridas.
─¡Cuánto lo siento! Yo fui parte de eso─confesé arrepentido.
─Sí, eso lo sabemos. Al principio nos dolió, pero al pasar el tiempo, conocerte y ver cuánto la amas, cambiamos de opinión sobre tí. Tal vez el destino los unió de esa manera y no somos nadie para juzgarlo. Solo te pido que no la lastimes, que la hagas feliz─dijo y las lágrimas rodaban por sus mejillas.