Capítulo extra- Hermanito

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Narra Anne

─Vamos princesa─dijo Tyler.
Uno, dos, tres, cuatro, cinco pasitos y volvió a caerse en la nieve.
─¡Bien hecho!─la felicitó.
Miah se levantó y volvió a intentarlo.
Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho y llegó a los brazos de su padre.
─¡Excelente!─la alzó por los aires y la llenó de besos, Miah reía contenta.

Terminé de picar la zanahoria, mientras los miraba por la ventana.
Me encantaba el olor de esa casa, mi casa, donde los recuerdos de momentos mágicos de mi infancia llegaban cada vez que miraba a algún lugar.
Miah aprendía a caminar en el mismo patio donde yo dí mis primeros pasos.

─Tía ¿me puedes dar un vaso de agua?─preguntó Dylan.
─Claro que sí pequeño─tomé el vaso, lo llené de agua y se lo di.
─Muchas gracias─dijo educadamente─¿Me puedes dar otro para llevárselo a mi hermanita?─preguntó y me llenó de ternura.
─Sí claro que sí pequeño, pero tu hermanita no toma agua en vaso aún, tu mami le da en el biberón─le dije en voz baja.
─¿Dylan?─llamó Hans.
─Ya voy papá─salió corriendo.

─Anne, me estoy volviendo loca─dijo Mandy entrando en la cocina, iba despeinada y llena de talco de bebé.
─Sé que no es fácil, yo me vuevo loca con Miah, sé que tú pasas el doble─sonreí.
─¡Uff!─suspiró─creo que no vuelvo a tener más hijos─dijo rotundamente.
─Tal vez tu no, pero yo sí...─me giré para echar las zanahorias en la olla.
─¿Qué quieres decir?
─Estoy embarazada─dije en voz baja, nadie sabía.
─¿Enserio? ¡Muchas felicidades Anne!─me abrazó─Creo que Miah necesitaba un hermanito─sonrió.
─Tyler no lo sabe aún, tengo planeado decirle cuando lleguen los demás.
─Te vas a volver loca, te lo digo desde ya─negó con la cabeza y soltó una carcajada.

(...)

Narra Tyler

Ver a Miah caminando era una inmensa emoción, esas pequeñas piernas moviéndose y sus manitas agitarse en cada paso, pero la mejor parte era ver su sonrisa de emoción porque hacía algo nuevo.

Saludé a Anne que nos miraba por la ventana mientras cocinaba, la casa estaba repleta y aún faltaban mis suegros y André con Brianna.
Esta navidad sería especial, única, con el mejor regalo y ese era estar juntos.

Tomé a Miah en mis brazos y entramos, la temperatura bajaba al anochecer.
─Huele delicioso, huele a comida hecha por mi esposa─dije al reconocer su sazón.
─Miah ven─llamó mi madre.
Miah dio unos tres pasos pero se cayó y decidió que llegaría mas rápido gateando.
─Anne está en la cocina─dijo Hans que coloreaba una página de un barco con Dylan, mientras Rachel, su novia jugaba con Brittany, la hija de ambos.

Entré a la cocina y Anne estaba sacando un pollo del horno.
─Cariño ¿necesitas ayuda?─la tomé por la cintura, noté que su vientre estaba un poco hinchado.
─No mi amor pero gracias─dejó el pollo en la repisa y se giró para besarme.
─Pensaba que hoy podíamos adornar el árbol, tus padres llegan mañana.
─Bueno, pueden hacerlo, los niños estarán muy contentos de ayudar.
─Bien, haremos eso, ya el árbol está cortado, Hans y yo lo trajimos en la mañana.
─Termino con la cena y les ayudo─dijo y me dio un beso para seguir picando la cebolla.

Le di un sonoro beso en la mejilla y me alejé tarareando un villancico.

(...)

─Dylan, toma, coloca este─le di una pelota roja para que la colocara en el árbol.
─Miah, te toca esta─dijo Anne y le tendió un bastón.

Miah tomó el bastón y caminó hasta el árbol, enganchó el adorno en la rama, tal y como lo había hecho su primo.
Todos aplaudimos sonrientes, era el turno de los mellos.

─Valerie, éste es tuyo─Mandy sacó una pelota de color verde.
La pequeña Valerie caminó hasta el árbol pero al llegar se puso a llorar.
Mandy la agarró mientras Brad le daba otra pelota a Alex, quien salió corriendo y se tropezó y se levantó llorando.

Mandy cargaba a Valerie y Brad a Alex tratando de calmarlos, se les veía muy desesperados, bueno eso era costumbre en ellos, tenían a Mandy y a Brad como locos.

Por fortuna Miah no era tan llorona, pero si era traviesa, a su edad ya había pintado las paredes y todos sus juguetes los regaba.

Los niños se calmaron y terminamos de decorar el árbol, colocamos las luces navideñas y adornos en las puertas, ventanas y encima de la chimenea.

─La cena ya está servida─dijeron Anne y Mandy.
Olía riquísimo, Anne tenía manos de diosa, cocinaba exquisitamente delicioso.

Nos sentamos a la mesa y empezamos a comer, los niños comían solos en sus sillas y Rachel le daba a la pequeña Brittany.

─Todo estaba delicioso, mi princesa─tomé un plato para secarlo.
─Es que me inspiras─dijo secando otro.
─Estoy muy feliz de tenerte en mi vida─dejé los platos para acercarme a ella.
─Te amo Tyler Jhonson─me susurró al oído.
─Te amo mucho más señora de Jhonson─le dije y le dí uno de esos besos que te dejan sin aire.

(...)

Narra Anne

Mis padres bajaron del auto con Brianna y André, mi papá había comprado uno, ahora que trabajaba en la empresa.

─¡Wao Anne!─dijo mi mamá mirando alrededor.
─Sigue igual que como la dejamos─dijo mi padre.
─Esa es la idea, quiero mantenerla así. Que mis hijos conozcan mi casa de la infancia y puedan disfrutarla.
─¿Hijos?─preguntó extrañado Tyler.

Mandy tosió y sonrió disimuladamente.

─Cariño, se supone que te lo diría en la cena de Navidad, pero ya se me salió─dije sonriendo─Miah va a tener un hermanito, ¡Estoy embarazada!
─¡Wao!─dijo Tyler fascinado con la noticia.
─¡Felicidades!─escuché decir a todos, mientras nos abrazaban.
─¡Voy a ser papá por segunda vez!─exclamó Tyler.

Cargó a Miah y nos abrazó fuertemente a las dos.
Miah no entendía que estaba sucediendo, pero ella sonreía.
─Los amo─dijo tocando mi barriga.
─Y nosotros a tí─le dije tiernamente.

Un tropiezo de amor 》Libro #1 Bilogía Amor en París《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora