Ganadora en los premios Carrot Awards 2020
Tercer lugar en romance, concurso Apple Awards (Red)
Sinopsis:
¿Qué pasa cuando tu mundo perfecto se derrumba a tus pies?
Andrea conoció a Justin en la fiesta de compromiso de su amiga, y de inmediato volar...
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—¡Eres un maldito hijo de puta! —me grita Richard fuera de sí.
Yo me quedo estático en mi lugar, sin saber qué hacer, qué decir, a que santo poder encomendarme para que me sacara de este problema. Si alguna vez llegué a pensar que alguien me descubriría jamás llegué a imaginar que sería justamente el padre de Andrea, y ahora resultaba que también es padre de Rachel.
Jesús.
—No puedo creer que esto esté pasando. Dios mío, que esto sea una pesadilla, que sea una pesadilla —ruega mi suegro, con el rostro desencajado por el pánico.
—Papá, yo no sabía que...
—Por favor, Rachel, no digas nada —la detiene Richard—. Por favor.
—Richard, te imploro que no digas nada, que...
Me interrumpe antes de poder decir más. —Eres un maldito cretino. ¿Lo único que te preocupa es que vaya a decir algo? —Él me mira con furia, con rencor y odio.
No contesto nada. Estaba descolocado, aturdido. ¿Cómo la vida nos ponía en esta encrucijada tan cruel? Los tres que estábamos aquí éramos unos pecadores que merecíamos este castigo, sin embargo, mi mujer no.
Ahora aparte de mi traición y la de Rachel, se agregaba otro ingrediente que sabía, le terminaría de destrozar la confianza y de paso el corazón de manera permanente.
Su marido le había sido infiel con el beneplácito de su padre de sangre.
Eso acabaría con cualquiera. Pero sobre todo con ella, que siempre ha odiado las deslealtades.
Parecía que la vida se estaba ensañando con Andrea y de paso nos estaba devolviendo un poco de nuestra propia medicina.
Me paso las manos por el pelo de pronto abrumado.
Observo callado como Richard se pasea de un lado a otro, como si no estuviese cómodo en su propia piel. Supongo que, en cierto modo, sería verdad. Lo que me había dicho Rachel era que él la había animado a estar conmigo. Ahora debería estar odiándose al darse cuenta que por un comentario suyo una de sus hijas sería inmensamente infeliz, mientras que la otra era la responsable de dicha infelicidad.
