¿Lo amas?

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Primer maratón de "El suplicio de Bailey" para los que no lo recuerdan, es capítulo diario por toda una semana, disfrutenlo ❤
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Alex- me doy la media vuelta de inmediato para verlo en el umbral de la puerta- yo... puedo explicar esto.

- Te escucho.

-De hecho- muestrate firme Bailey- estoy aquí por tu culpa, no me has devuelto mi carta.

-Oh sí, ya veo- saca la carta de su bata- ¿Esta carta?.

Me muestra la hija y de inmediato me lanzo por ella. Sin embargo cusndo estoy por tomarla la quita y me hace estampar contra su pecho. Levanto mi vista apenada por esta situación pero a él no parece afectarle en lo absoluto, es como si disfrutará verme así.

-Eso me pertenece Alex.

-Y lo se- susurra pegado a mi- pero no te la daré hasta que respondas mi pregunta Bailey.

-¿Qué pregunta?- me hago la que no sabe nada.

- No nos hagamos los tontos Bailey- bajo mi vista pero sus ojos la buscan hasta conseguir que se vuelvan a unir- la haré una última vez, ¿con qué tu y Jack?.

-Si- al fin hablo para ver como se seño se frunce pero de inmediato lo disimula- Jack estuvo ahí  para mi siempre, son importar cuantas veces le dijera que no, el siguio y siguió, hasta conseguir verme bien, hasta lograr que me volviera a querer, y fue ahí cuando comprendí que sin buscarlo, tenía a un buen hombre a mi lado, pues pensé que él que tenía lo era, pero se fue.

-¿Cuándo vas a entender que fue por tu bien Bailey- bajo mi vista- Bailey mirame.

-Alex yo...- intento irme.

-Bailey mirame por favor- lo hago y me quedo sin aire cuando sus pupilas son tan grandes e inexplicables, sus ojos brillan, pero lo más sorprendente, es como su mirada cambio hacia mi, es como si él Alex de antes volviera, mi Alex.

-Esto no está bien Alex.

-¿Qué no está bien Bailey?, ¿intentar querer a otro mientras la persona que amas está en tu cabeza todo el tiempo, mientras le dices a él que lo amas pero sabes que no es así?, ¿o tenerme que remplazar con alguien  que te ayudo sólo para llenar el vacío?

-Alex no sigas.

-¿O está mal el amar a alguien y no tenerle?, o peor aún...

-Alex cállate por favor- mi voz se inicia a cortar y las lágrimas a formarse en mis ojos.

- No Bailey, escuchame, por favor- lo observo mientras retengo las lágrimas- dime ¿que está mal?, ¿amarte y no poder tenerte, y hacerte feliz como lo mereces porque soy un enfermo mental?.

-¡Ni siquiera me dejaste ayudarte Alex!- exploto mientras mi pecho sube y baja y las lágrimas corren por mis ojos.

-¡Porque no quiero tu ayuda Bailey!- el también explota y retrocedo pero el avanza hasta hacerme chicar contra una pared, misma donde me acorrala- ¿qué no comprendes que no quiero darte una vida de preocupaciones y visitas al psicólogo sólo por que tuve un ataque de nervios o de furia?, ¿No comprendes que no quiero hacerte parte de mi enfermedad y de las consecuencias que trae, de los cambios tan drásticos de humor y la furia, de los recelos y malas ideas?.

-Te amaba tanto que eso no hubiese sido problema alguno.

-Lo que tu no sabes Bailey es que yo no puedo amar- lo observo confundida.

-¿Entonces todo fue mentira Alex?, ¡¿Mentiste al respecto de amarme?!.

- No Bailey, jamás mentiría al decir que te ame, pero por más que lo quiera no debo, comprende que es muy riesgoso Bailey.

-Jamás te comprendere Alex, pero sabes, ese ya no es mi problema- le pasó por un lado cuando su voz me vuelve a detener.

-Dime algo Bailey y se lo más honesta posible- lo observo mientrss ahogo mis sollozos- ¿lo amas tanto como me amaste a mi?.

-Te amaba- corrijo de inmediato.

Lo veo acercarse a mi hasta estar frente a frente. No retrocedere, no está vez, y ni una más. Elevó mi vista para verlo bien aún que sus ojos me desalmen.

-No eres buena mintiendo Bailey, ambos sabemos lo que sentimos, y un te amaba, no es lo que sientes.

-Estoy con Jack y eso es lo que importa, ¿no?, al fin y al cabo, tu nunca vas a estar conmigo Alex, y tristemente tuve que asimilarlo por mi misma, así quemara y doliera.

-Se que me amas Bailey.

-Descansa Alex- le arrebató la carta de la mano y le doy la espalda para ir a la salida, no quiero más sufrimiento, no más.

-Pero nunca como yo te amo.

-Tu no me amas Alex- estoy por dar otro paso cuando me toma del brazo, me gira y me pega a él. Acuna mi rostro entre sus manos y siento que no puedo más, no con su mirada tan profunda en mi, es como si pudiera ver a través de mi, y yo a través de él- no me mires así Alex.

-¿Así como?.

-Como lo haces, tan potente, y transparente.

- Es la mirada de un hombre enamorado- hace una pausa y trago grueso- cuando mira a la mujer que ama.

-Alex- intento detenerlo, pero me calla por completo cuando tira de mi y me abraza con fuerza, con temor de perderme, de no volver a verme.

-Dime que no lo amas Bailey, dime que no me has olvidado- tomo el rostro de Alex para ver su mirada llena de temor.

-Jamás podría olvidarte Alex, nunca.

-¿Lo amas tanto como a mi?.

-Jamás podré amar a alguien como te amo a ti- escupo al fin, y siento un peso caer de mis hombros, como si esto es lo que necesitase desde hace mucho tiempo, más bien, como si Alex fuese aquello que desde hace años necesito, y sigo necesitando.

Alex posa su mano sobre mi mejilla y yo pongo mi mano sobre la suya, acariciandola, sin dejar de verlo, ambos gritando "Te necesito, sólo a ti" pero sin la necesidad de las palabras.
Ambos nos undimos en el silencio, un silencio que no es incómodo, sólo, es perfecto, es un silencio que mi ser robaba tener de vuelta.
Los ojos de Alex viajan por todo mi rostro y su mirada se torna aún más dulce.

-Sigues igual de preciosa Bailey.

-Alex- intento protestar, mi corazón se está acelerando, y eso no es bueno, no viniendo de él.

-Dejame amarte una sola vez Bailey, no se si mañana sea el mismo Alex que te dice esto- asiento- ¿puedes hacerme un favor?.

- Te escucho.

-Dime que me amas, una sola vez más por favor, lo necesitaba tanto.

- Te amo Alex, te amo con todas mis fuerzas, más que a cualquier cosa en este mundo, te amo.

-Y yo a ti Bailey- nuestros rostros inician a acercarse y nuestros ojos a cerrarse lentamente...

El suplicio de BaileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora