El suplicio de Bailey

Pesadillas

-Tu me vas a joder la vida Bailey, sé que lo harás, sé que te cansaras de mi y te irás, te marcharas y me vas a botar de tu vida, y gracias a ti estaré tan jodido que ni siquiera pueda con mi vida.

-Alex, no, que... ¿qué estas diciendo?- me intento acerca a él y tranquilizarlo pero golpea mi mano evitando mi acercamiento, retrocedo sin entender como la cena se convirtio en esto.

-No voy a dejar que me destruyan Bailey, no voy a permitir que me destruyas, que nadie lo haga- me inicia a acorralar y retrocedo hasta golpear contra la isla de la cocina.

-No lo haré Alex, estamos juntos en esto ¿recuerdas?- las lágrimas de desesperación corren por mis ojos, no reconozco a Alex, ni entiendo que mierda sucede. Veo como su mirada refleja odio y repugnancia y muerdo mi labio con terror abundando mi cuerpo.

-Te amo Emily, te amo tanto que duele y aterra- se abalanza contra mí...

De inmediato despierto y siento las lágrimas correr por los costados de mi rostro, intento tomar aire pero este parece no llegar a mis pulmones, me levanto de la cama y con la vista nublada observo a Alex sobre la cama, salgó de ahí corriendo y me encierro en el baño mientras ahogo mis sollozos y intento estabilizarme. Cuando estoy un poco mejor me mojo la cara e intento borrar cualquier rastro de lágrimas, estoy concentrada en mi reflejo frente al espejo, y en como las escenas de su rostro en ese sueño se veían tan reales, cuando se escucha como tocan la puerta y brinco asutada tirando algunos productos que estan en el baño.

Me acercó cautelosa a la puerta cuando la vuelve a tocar y vuelvo a brincar.

Ahogo un sollozo pero otro se escapa y se que él lo escucho.

-¿Bailey estás bien?- su voz suena procupada y se que si no respondo entrará y no podre evitar mostrar mi miedo ante no sé si el seño o no él,me niego a creer que es miedo hacia él, ¿cómo podría temerle al hombre que tanto me protege?.- Bailey voy a entrar.

-¡No!- le pongo seguro alapuerta y esucho cmo él intenta abrirla. ¿Por qué me comporto así?, ¿por qué mierda tengo miedo?.

Retrocedo abrumada de la puerta y me siento en la taza a ver como deja de hacer el intento, me acercó a la puerta y se esucho sus pisadas desvanecerse por el pasillo. Me quedo ahí sentada hasta que me suento más estable y salgo con los nervios de punta.

Voy a la habitación pero está sola, me dirijo a la otra habitación y no esta, me dirijo a la sala cuando su voz me congela en la cocina.

-¿Fue sobre mi?- lo observo por el rabillo de mi ojo acercarse a mi con su pantalón de pijama, el torso desnudo, su cabello despeinado, descalzo y con un semblante de ¿decepción?- ¿tuviste una pesadilla no?

Asiento.

-¿Fue sobre mí?- llega a mi y se me pone en frente.

Niego a su pregunta y siento como su fria mano toca mi rostro y me hace observarlo.

-¿Estás bien?- antes de poder decir algo lo abrazo y me tiro al llanto. Después de saber lo que Alex le hizo a Jack las pesadillas de este tipo han sido constantes, y eso me aterra, me aterra tenerle miedo a Alex, porque él no merece esto. Intenta separarme de él pero me aferro con más fuerza para que no pueda hacerlo, para que no pueda derrumbar mis barreras con su mirada, no puedo ver a Alex a los ojos luego de esto, no hoy, no cuando él ha hecho tanto por mi, por estar conmigo, por nuestro bienestar, y yo estoy teniendo miedo y desconfianza de que un día el amor que siente por mi, ese amor que crece cada día más se convierta en odio.- Bailey, mirame.

Niego mientras me intento esconder entre su cuello.

-Bailey mirame- ordena con firmeza y temerosa me despego poco a poco de su cuerpo para quedar frente a frente, sin embargo no lo observo, sólo veo nuestros pies descalzos.- sino me miras entonces asumiré que se trato de mí, y que no fue nada bueno.

Lo observo pero de inmediato bajo mi mirada y el deja caer sus hombros. Veo como sus pies se mueven en dirección a la sala, para luego escuchar como se deja caer en el sillón, mientras suspira.

-Alex yo...

-No Bailey, no tienes que explícar nada.

-Pero quiero hacerlo- me acerco a él e intento tocarlo pero se levanta de golpe.

- Es mejor que no digas nada Baley de verdad- intenta irse pero lo detengo.

-No me voy a quedar callada Alex- se gira y en una sancada llega a mi, su mirada penetra la coronilla de mi cabeza y siento que no puedo matener la mirada, no cuando me mira así, se acerca más a mi e intento poner mis manos en su pecho pero las detiene antes de tocarlo. Subo mi mirada y lo veo tan cerrado y herido.

-¿Entonces que me vas a decir Bailey?, ¿me diras que yo no fuí esa pesadilla?, oh ya sé- susurra- ¿me vas a decir que son mentiras mis suposiciones?

Me quedo sin nada que decir, él suelta mis manos y luego de observar a nuestro alrededor sin mirarme ni un segundo, inicia a camina en dirección a su habitación y sin pensar en laspalabras, las escupo.

-Yo no sé cuales son tus suposiciones Alex.

Se detiene, mira al suelo y luego niega para soltar un suspiro.

-Será mejor que no durmamos juntos Bailey, no es bueno que duermas al lado de alguien a quien le temes- sigue caminando hasta perderce en la oscuridad y yo me quedo estatica, sin palabras, ni respiración, sin él, sin nada.