Enamorada de ti, solo de ti

1.3K 115 2
                                    

Bailey

-Bailey- me observa con un brillo extraño en sus ojos. Mi mente tiene miles de preguntas y yo sigo sin poder creer que él está aquí.

- No entiendo nada, ¿qué está pasando?- confieso en busca de saber como es que salió del hospital, y como llegó hasta aquí.

-Pasa que es tu cumpleaños señorita- musita haciéndome estremecer con ese "señorita", mientras se acerca tanto a mi que me veo forzada a levantar mi vista para verlo a los ojos, mismos que me penetran haciéndome sentir transparente .- y yo vine de visita.

-Pe... ¿Pero cómo saliste?.

-¿Te explico en estos momentos o después de abrir tus regalos?- ¿regalos?, mi ser inicia a saltar como una niña emocionada cuando lo dice, Alex jamás de olvidó de mi cumpleaños, y lo de porque en ese hospital, nadie a excepción de Jack sabe que día cumplo años.

-Pasa- me hago a un lado para dejarlo entrar, observo mi pijama de batman y me paralizó.

-¿Qué pasa?.

-Llegaste en el peor de los momentos- me atrevo a decir y Alex me observa de pies a cabeza para después reírse y deleitarme con su risa.

-Ven aquí- toma mi muñeca y me jala a él para abrazarme sin previo aviso. Su colonia se impregna en mi nariz y disfruto tanto de esto, de tenerlo cerca de mi, sintiendo su calor, mientras su alta estatura me permite escuchar su acelerado corazón.- el caballero de la noche no es tan malo, te he visto peores.

Me separo de él para señalarlo y fulminado con la mirada fingiendo molestia.

-La de conejos majaderos estaba genial- bromeó recordando una de mis extrañas pijamas de conejos con lentes y dedos majaderos.

-Los conejos con lentes no son algo normal.

-Yo tampoco lo soy- tomo una posición de jarra.

-Ve a vestirte anda- lo obedesco pues estar asi frente a él es algo penoso- que te tengo varias sorpresa para hoy, bonita.

Me detengo y lo observo sobre mi hombro al escucharlo decir esto, pero él sólo me da la espalda mienttas observa uno de los adornos del departamento.

Rápidamente tomo una ducha y me visto casual pero bien abrigada estoy por salir cuando observo una nota en el espejo de mi cuarto.

Salí a comprar unas cosas, regreso por la tarde.
Te quiere, Dani

Dejo la nota otra vez en el espejo y me dispongo a salir a donde Alex.

-Listo- musito mientras camino hacia la sala para quedarme estática en cuanto llegó a la cocina y lo veo venir hacia mi con una tarta de limón con velas. Las lágrimas inician a formarse en mis ojos, pues nadie más que Dani saben que esta tarta es mi favorita, nunca pensé que Alex haría caso a las rebanadas que de esta dejaba en la nevera cuando vivíamos en el mismo departamento.

-Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti- inicia a cantar el feliz cumpleaños y siento que esto no puede ser mejor.

-Nunca pensé que esas rebanadas en la nevera te harían saber que la tarta de limón es mi favorita, y mucho menos que recordarlas mi cumpleaños.

-Jamás me olvidaría de tu cumpleaños Bailey- Llega a mi con la tarda- ahora sopla las velas y pide un deseo.

Limpio la lágrimas y lo observo antes de pedir mi deseo.

Por un año donde Alex este a mi lado.

Soplo las velas.

-Gracias por todo Alex- lo abrazo a como puedo y el pone la tarda en una de sus manos para abrazarme con la otra.

-No es nada- me separo un poco de él para observarlo fijamente, mis ojos caen sobre sus labios y por inercia lamo los míos. Un deseo inmenso por besarlo me invade y es como si no pudiese detenerlo.
Alex se acerca poco a poco y yo me pongo de puntas para acercarme a él, mi mano toma su cuello y la suya mi cintura, ambos buscamos nuestros labios rozandolos pero cuando están por tocarse, Alex agacha su cabeza impidiendo el beso.

Avergonzada me separo de él para verlo aún con la cabeza baja.

-¿Quieres una rebanada?- tomo la tarta y voy a la cocina con esta para partirla intentando salir de esta situación tan incómoda.

-No, gracias, de hecho, tengo otras sorpresas para ti, y para eso necesitamos salir.

-¿Salir?- frunso el seño.

-Si, salir, ¿o acaso no sabes que es eso?.

-Que gracioso- dejo el cuchillo sobre la mesa para tomar mi saco y salir junto con él. Observo temerosa la puerta del departamento de Jack y Alex me hace sobresaltar cuando acerca su rostro al mío para ver que observo.

-¿Enserio departamentos juntos?- cuestiona.

-No tienen nada de malo.

-En tu mundo.

-Como digas- inició a bajar las escaleras sin ganas de hablar al respecto- ¿a dónde iremos señor misterio?.

-Es una sorpresa.

-¿Ni una pista?- camino de reversa mientras lo observo.

-No ni una pist... ¡Cuidado!.

Antes de poder hacer algo siento toda mi espalda y cabeza estamparce contra algo delgado; un poste.

-Oh mierda- llevo mis manos a mi cabeza que ahora duele.

-Deberías tener más cuidado Bailey- Alex se acerca a mi y pone ambas de sus manos en mi nuca para sobar esa zona.

-Eso me dejara otra cabeza- rio de sólo imaginarmelo.

-¿Enserio te ríes de tu golpe?- se ríe a lo bajo.

-Así duele menos- mi risa cesa cuando sus ojos atrapan los míos, trago grueso ante la gigante atracción que siento hacia este hombre, con miedo a un día no poderla controlar.

-¿Crees?- susurra acercándose a mi rostro. Mi pecho inicia a subir y bajar y mis manos a sudar.

-Supongo- digo a lo bajo acercándome también a su rostro, nuestros labios están a sólo milímetros, tan cerca que puedo sentir su respiración chocar contra mi labio superior, y se que él la mía. Quiero besarlo, quiero abalanzarme contra sus labios, pero no quiero una escena como la de hace un rato.

- Te extrañé tanto Bailey.

-Yo también te extra....- no termino de hablar cuando sus labios toman los míos presos. Mi cuerpo inicia a temblar ante su contacto, su maravilloso contacto. Nuestros labios se mueven con sincronía demostrando lo bien que se conocen entre sí. Mis manos van a us hombros y una de las suyas toma mi cintura, la otra está en mi rostro sobando mi mejilla con él pulgar.

Te quiero así Alex, junto a mi, haciéndome sentir como nunca, recordándome lo bien que se siente amarte, recordándome lo bien que se siente estar enamorada de ti y sólo de ti.

El suplicio de BaileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora