Todo a la mierda

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-¿De qué me hablas Bailey?- intenta tocarme pero retrocedo.

-No más mentiras Alex, por favor- observo el piso pues no soy capaz de decir lo siguiente viendo sus ojos.- pensé que te conocía lo suficiente, y pensé que estabas mejor que antes, pero ya no se que creer Alex.

-Lo sabes, ¿cierto?- asiento para después sentir la mano de Alex en mi nuca acercandome a él, más un beso en mi frente.- no tenías que enterarte.

-¿Hablas de vivir en la ignorancia entonces?

-No Bailey, hablo de que esto era entre Jack y yo, no tú, tu no tenias que saberlo.

-¿Sabes en los problemas en los que te puedes meter siquiera?- mi pecho sube y baja de sólo pensar en lo que Jack puede hacerle a Alex.

-Lo sé Bailey, estoy consciente de cada uno, pero no me podía quedar de brazos cruzados, no tratándose de ti.

-No me vas a poder proteger todo el tiempo Alex, y menos con un jodido cuidador que estuvo a punto de matarme de un susto.

-Lo sé, y lo siento, pero Jack es demasiado vengativo y temía que te hiciera algo.

-Sino hicieras tus estupideces no tendría de que temer, simplemente pudiste dejarlo así.

-No bonita, no podía, cuando estuve en ese hospital, alteró mis dosis en ausencia del doctor pues estaba planeando lo de su cambio, estuve a nada de tener un paro cardíaco a causa de tanto medicamento acelerándome, y él seguro lo daba por hecho, por eso fue que invento mi muerte, pero en realidad, para esas fechas, yo ya estaba fuera, y el ni siquiera lo sabia pues el doctor pidió discreción, no es bueno que las personas se enteren sobre pacientes que pasaron por terapia intensiva y terminan dándos de alta, por eso él no tenía idea.

-O sea que él iba a causar tu muerte- las lágrimas invaden mi vista de sólo pensar en una vida así.

-¿Crees que no tenía motivos suficientes?

-Yo... no lo sabía, pero tampoco está bien que me mientas Alex, y menos que busques venganza por tu propia mano pues causas más problemas.

-No volverá a pasar Bailey- me intenta besar pero retrocedo pues la culpa me invade.- ¿qué pasa?

-Dude de ti Alex, de tu bienestar, de tu honestidad y de si la terapia había funcionado, dime por favor que no fue un episodio.

-Se que tienes miedo a veces, lo noto en tus ojos cuando te quedas pensando en la nada, pero en realidad se que piensas en el pasado, y en lo que era capaz de hacerte.

-No, no me refería a eso.

-Claro que si Bailey, y te comprendo, porque ahora estás viviendo con el hombre que algún día te vio muerta y por su propia mano.

-No me refería a eso.

-¿Entonces a qué Bailey?- su mirada me penetra y no puedo mentirle, no cuando pido honestidad a cambio. Me quedo pensando en que decir pero es inútil, la verdad ya fue dicha, y Alex lo notó, pues sólo observo a la nada mientras asintió.- Sino puedes confiar en mi, ¿entonces quién?

-Tu me mentiste Alex.

-Fue para protegerte- escupe entre dientes.- pero veo que tu aún no crees en mi, probablemente ni siquiera un poco.

-¿Tu crees en mi?- lo detengo.

-Lo hago, créeme que lo hago, a pesar de tus miedos y desconfianza, lo hago.- sale de la cocina y va agotado a la habitación.

Apago todas las luces y voy junto con él a la habitación. Me detengo en la puerta para observarlo en la orilla de la cama, con ambas manos sobre la nuca y la cabeza agachada. Entro y me pongo la pijama, esperando tal vez alguna palabra, pero no pasa absolutamente nada. Tomo lo que puedo de la colcha, y Alex sigue sin movimiento alguno. Me giro para no observarlo más y dejarlo en paz, buscando el sueño, pero no puedo.

Quiero llorar pero las lágrimas no salen, y tal vez sea a causa de la adrenalina y enojo. Estoy en espera de sentirlo en la cama, pero sucede todo lo contrario, se siente como Alex se pone de pie. No me atrevo a verlo, solo escucho como se quita la ropa y la lanza a un lado de la cama. Quiero decir algo pero la palabras no me salen, es como si el nudo en mi garganta se comiera mis cuerdas vocales.

Un suspiro sale de su parte y resuena en toda la habitación.

-La confianza es una de las cosas clave en las relaciones- lo escucho, más no lo observo.- y si nosotros no podemos tener confianza, ni honestidad, ni buena comunicación entre nosotros, entonces creo, que desde un principio, estamos jodidos Bailey, y quiero que sepas, que no haría algo que te lastime, lo de Jack ya estaba planeado desde mucho tiempo atrás, no fue parte de un impulso, ni siquiera la idea surgió así, procure que el plan estuviera bien visto, hasta tener solucionado el como evitar que Jack quisiera hacerte daño.

El silencio vuelve a hacer acto de presencia, en espera d semi respuesta, pero solo hay sollozos, y jadeos, ya que el llanto no me deja hablar. Siento cuando toma la almohada, y sólo observo sus pies perderse en el pasillo que da a la sala.

No me muevo, para nada, solo me quedo ahí, pensando en que esto si se esta yendo a la mierda desde un principio.

El suplicio de BaileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora