\ \ c h a p t e r / / n i g h t.

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8.12 PM


El gran jardín que rodeaba la mansión, estaba lleno de decoraciones plateadas y doradas, con algunas antorchas iluminando entre árboles, pero conservando una distancia adecuada para evitar accidentes.  Los invitados llegaban vestidos elegantes, con costosas joyas que lucían las damas, desde collares hasta grandes piedras en los anillos de sus delicados dedos, mientras que los varones se destacaban por los trajes de tela brillante y los relojes con detalles de diferentes piedras preciosas, como el oro o los diamantes incrustados.


Arthur y Lizzeth Hemmings, están en la entrada de la lujosa mansión saludando con calidez a los invitados de la fiesta que ayudaron a organizar, pues tan importante evento semestral de los Tagliabue, no podía suspenderse con menos de una semana de anticipación. Los invitados eran importantes personas de negocios que cruzaron el país, incluso el continente, para poder asistir. Los Hemmings apoyaban a sus amigos Tagliabue, ambas familias eran muy cercanas y algo como aquello era una mínima molestia para todos los favores que se habían hecho mutuamente con el transcurso de los años.


La familia Tagliabue, era conformada por James y Natalie, además de sus tres hijos, Jean Philippe, Eleonere y Francesca. La cercanía de los Hemmings con los Tagliabue traspasó generaciones y Jean Philippe era íntimo amigo de Jonathan por sus edades similares, pues se llevaban apenas dos meses de diferencia, mientras que Eleonere y Francesca tenían la edad de Jenna y Luke respectivamente, donde ambas eran íntimas amigas de Jenna, pero también ambas habían intimado un par de veces con el menor de los Hemmings, a veces por separado y otras veces, juntas.


Aquello había sido hace muchísimo tiempo, cuando Luke apenas tenía 20 años, el período más loco de su vida, donde su actividad sexual realmente fue exhaustiva. Pero ahora, muchos años después, se había alejado de las hermanas Tagliabue, solo charlaban lo necesario o cuando Jenna los obligaba, puesto que Francesca era la madrina de su hijo y Luke el padrino, ambos sus guardianes.


Francesca, por ser la única representante  de la familia anfitriona, debía estar junto a los Hemmings entregando la bienvenida, pero también debía organizar el pedido especial que había realizado con una semana de anticipación para aquella noche, por lo tanto, a penas observó entre los imponentes tal camioneta negra polarizada, comenzó a impacientarse por la ansiedad y una sonrisa creció en sus labios.


De aquel vehículo, bajaron tres hombres vestidos con elegancia que se llevaron varias miradas curiosas, pero que ignoraron y continuaron vistiendo antifaces tal como los cambios de último momento lo requirieron. Varios invitados no siguieron las instrucciones de llevar máscara, mientras que otros para continuar con sus aires de superioridad, incrustaron en aquellas mismas, diamantes y piedras preciosas para ser la envidia del salón.


Francesca se disculpó con los Hemmings y se encontró con los hombres vestidos de negro, vestidos con elegancia con sus identidades cubiertas. Sonrió agradecida por el honor de que aceptaran tal invitación, pues tenía una mayor cuota de peligro si es que eran descubiertos.


  —Mefistófeles, sigues siendo el mismo hombre guapo y desapercibido que recordaba, como también a tus fieles sombras, Dantalian y Caym, ambos con nombres de demonios. Que gran reunión se ha convertido esta—jugueteó con una sonrisa y Calum asintió, devolviéndole el gesto con amabilidad,mientras que Drew buscaba algo que lo desconcertaba de aquel lugar. Investigaba el perímetro.

Empire 》Muke.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora