Capítulo 4

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Yoongi frunció el ceño observando la puerta cerrada frente a él.

El pequeño omega se la había cerrado en su cara después de insultarlo como si nada. Aunque era curioso que un omega hiciera eso, decidió decirle unas pequeñas palabras para dejar todo claro.

Él solo estaría unos cuantos meses y luego volvería a Daegu, quería estar tranquilo y sin ningún maldito problema mientras estuviera en Seúl y viviera específicamente en ese edificio.

Le había gustado la zona tranquila y lo cerca que quedaba de su nuevo lugar de trabajo, tenía una tienda dos cuadras más allá, el arrendatario le había asegurado que todos sus inquilinos eran tranquilos y que las fiestas estaban prohibidas, también había un estacionamiento para su moto al frente, lo cual lo hacía el lugar perfecto como para buscar otro lugar solo por el bonito omega malcriado frente a su departamento.

No lo negaría, el chico era bonito con su cabello rubio tal vez demasiado claro para ser verdad, sus ojos negros contradiciendo su cabello peinado hacia un lado, labios rellenos y grandes mejillas, demasiado lindo para su gusto y eso solo significaba una palabra, problemas.

Mientras guardaba las cajas con sus cosas con toda la calma del mundo, estuvo atento a la puerta de al frente para atrapar a su vecino.

No fue que hora y media después, a las siete que lo pilló saliendo arreglado.

Jimin rápidamente cerró su puerta y caminó hasta el ascensor, cuando se dio vuelta para apretar el primer piso se asustó por el alfa frente a él y retrocedió hasta que su espalda chocó contra la pared.

—Mira enano, dejaré las cosas claras —anunció el alfa—. Estaré aquí por un tiempo, espero que corto, pero mientras lo esté no quiero problemas, así que aléjate de mí ¿Algo que decir? —pregunto Yoongi acercándose otro paso hacia el omega, queriendo sonreír ante lo asustado que estaba.

—Es-es...

—¿Es-es qué? —repitió con tono duro.

—¡Espacio personal! —chillo Jimin, sin pensarlo levantó sus manos y las dejó en el pecho del contrario, separándolo en todo lo que la extensión de sus brazos le permitía.

Yoongi retrocedió unos cuantos pasos más ante la sorpresa del movimiento. El omega le observaba con ojos sorprendidos mientras seguía estirando sus manos.

Sin pensarlo, Jimin apretó el botón para cerrar las puertas en cuanto su vecino abrió su boca.

Estaba más que seguro de que palabras bonitas no saldrían de esos lindos labios.

¿Lindos labios?

Okey, ya estaba mal. El tipo prácticamente lo había tratado mal desde que salió del ascensor como para tener esos pensamientos.

Ese alfa era un verdadero idiota.

Con esa decisión, observo sus pequeñas manos antes de meterlas en los bolsillos de su chaqueta.

Saliendo del edificio, cruzó la calle hacia el estacionamiento. Observó sorprendido la bonita moto estacionada al lado de su auto y luego frunció sus cejas ante el pensamiento de que seguramente pertenecia a el alfa idiota que era su nuevo vecino.

Negando con su cabeza, salió del lugar agradeciendo al hombre que cuida de los vehículos.

Condujo hasta la casa de su hermano, obligándose a olvidar la presencia de ese grosero de su cabeza. Al bajarse del auto, se preparó mentalmente para el chantaje que seguramente le haría Chanyeol para que no fuera a trabajar hoy... O jamás si fuera por él ya que odiaba ese trabajo para él.

Un poco de amor (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora