23:15 [LHC #1]

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Capítulo veinte:

—¿Que haces aquí? —caminó hasta mi y rogué internamente para que la tierra me tragara.

Es más, que caiga un meteorito.

—Nada, Olivia y yo solo charlábamos, ¿cierto? —Holly me dio una expresión cínica para que negara lo que había dicho, ¿debería decirle a Colton lo que me acababa de decir?

—Le hablaba a Olivia. —el chico de ojos mieles me miró a mi y casi quise reírme de su expresión. Toma eso, Holly piernas abiertas Miller.

En tu cara.

—Como sea, —se acercó al chico a mi lado y pasó un dedo por sus labios, él no se alejó. —nos vemos esta noche, bombón. —se mordió un labio y luego me miró con una sonrisa.

>> Te invito esta noche a mi fiesta de cumpleaños, Oli, espero que vengas. —descaradamente se fue de ahí con una sonrisa triunfante y contoneando sus caderas de manera sensual.

Si no fuera heterosexual y fuera sorda, quizás quisiera cogermela.

—No le hagas caso, ¿de que estaban hablando? —me repetí mentalmente que Colton no es nada mío, pero aún así me fue imposible no pensar en él con Holly, en su casa, en su fiesta de cumpleaños.

Maldita.

—Nada. —aproveché que el timbre sonó y me escabullí entre la gente para ir a mi siguiente clase, álgebra.

Sintiéndome un poco estúpida por que sabía que igualmente se sentaría a mi lado, busqué mi puesto y esperé a que llegara Sophie, mi teléfono vibró.

Por un momento pensé que era el número desconocido, pero al revisarlo, me di cuenta que era Mika.

-"Estoy aburrido:( estar enfermo no es tan divertido como pensé."

Me reí y con una sonrisa le respondí.

-"Supongo que solamente aburrido te acuerdas de tu querida amiga Olivia;)."

Al instante respondió.

-"Siempre me acuerdo de ti."

Un pequeño malestar se instaló en mi pecho, sabía que en cierto punto, los sentimientos de Mika eran más fuertes que los míos. Y era algo que él no se merecía.

Guarde el teléfono cuando mi amiga llegó, y con ella, Colton.

Me miró neutral, sabía que me había visto riéndome en el teléfono, y era algo que me daba una chispa de satisfacción, si yo sufría, él también.

—Hey, desapareciste en el almuerzo. —Sophie, lejana a aquellas miradas de soslayo, se sentó a mi lado y me tendió una manzana. —no comiste nada.

Le sonreí enternecida por su detalle y me guardé la manzana en la mochila.

—Lo siento, me distraje hablando con algunas personas. —había decidido no contarle a nadie sobre la pequeña charla con Holly.

Sería difícil de explicar, y tenía un mal presentimiento sobre ello.

—¿Con quién hablabas? —el chico de ojos miel interrumpió la conversación, a pesar de que siempre estuvo presente.

Mis ojos se desviaron a mi teléfono y luego a Sophie, ella escondió una sonrisa.

También yo.

—Con Mika, ¿Por qué? —si andaba de rodeos sabría que lo quería provocar, así que fui directa, como una cachetada.

Su mandíbula se tensó y fue interrumpido por Shawn, el chico de piel pálida de su equipo. (En multimedia)