Cap 93

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—¿Preparativos? ¡No! ¡Te dije bocadillos!.... ¡Ay, por favor! Solo... déjame hablar con la supervisora

Hana y yo observamos a Dylan desde el sofá mientras él caminaba de lado a lado estresado.

—¿Dices que no te dejó hacer nada?—le pregunté a Hana y ella negó haciendo una mueca

—No me quiere ver estresada por que le haría daño al bebé—dijo acariciando su vientre. No evité acercarme y acariciar su vientre con su permiso.

—Es increíble que entre las tres, tú hayas sido la primera—le sonreí alejandome —Estoy segura que ese pequeño o pequeña será igual de hermosa que su madre.

—Espero que tú tampoco tardes mucho—se rió mientras se levantaba a por algo de la cocina, quise detenerla porque si Dylan la veía, me mataba

—¿A qué te refieres?—le pregunté haciéndome la desentendida mientras la seguía

Hana se sirvió un vaso de jugo mientras también sacaba un pedazo de salchicha y le daba un mordisco enorme. Me la quedé mirando un poco raro hasta que ella se rió y terminando de comer, me respondió:

—No creo que tú y Thomas hayan tenido abstinencia todo este tiempo—soltó una carcajada mientras caminaba a otro lado de la cocina. Abrí la boca para decir algo, hasta que las imágenes fugaces de Thomas y yo inundaron mi mente y fruncí los labios un poco sonrojada—Tu silencio dice más que mil palabras.

—Thomas y yo estamos bien—dije caminando por la cocina

—¿Qué a ti no se te antoja tener un bebé, una mini ____ o un mini Thomas, O ambos?—dice riendose mientras vuelve a mascar la salchicha

—Por ese apetito tampoco esque me de muchas ilusiones—hice una mueca y ella rodó los ojos sonriendo

—Ya sabrás—me tomó el hombro mientras se iba de nuevo a la sala

Dylan justo apareció en la puerta y miró a Hana con los ojos abiertos y luego a mí. Me quedé mirándolo porque sabía que se iba a alterar. Antes de que me gritara, le puse una manzana en la boca.

—Yo la estoy cuidando, relájate—palmee su hombro mientras me retiraba al lado de Hana

Dylan estaba preparando la próxima boda, ósea la de ellos, y no quería que Hana se estresara, pero  aunque eso mantenía a Dylan entretenido, él no sabía que Hana revisaba todo a escondidas, y por ahora estaba haciendo buen trabajo, para variar. A veces Dylan se llevaba a Thomas cuando estábamos juntos para que lo ayudara y esa es otra razón por la que quiero que Dylan se apresure con todo.

—¿Le dijiste a Marie?—pregunté tiempo después, Hana me miró y asintió no muy convencida.

—De alguna manera. Yo... no, no sé, creo que sería extraño decirle.

—¿También sentiste eso?— alze una ceja mientras me acomodada en mi asiento y cruzaba mis piernas—Siento que nos hemos perdido de mucho.

— Sí...—bajó la mirada—Pero trataré de decirle. No te preocupes, ella también tiene que estar invitada a la boda—se ríe

—¿Cómo se lo tomaron tus padres? —lami mi labio inferior. Hana miró el techo y luego a mí.

—Mi madre casi se desmaya y mi padre si se desmayó—se empezó a reír y yo no pude contener la risa—Quisiera que mi verdadero padre hubiera podido ver... en que me he  convertido, que se sienta orgulloso.

Tomé su mano y se la apreté. Sabía que se pondría sentimental y lo confirme cuando empezó a sollozar.

—No es tu culpa, nada de lo que pasó, y yo sé que estaría muy orgulloso de ti.

—Lamento haberte culpado esa vez, lamento eso... sólo quería saber...—siguió sollozando y la abracé con fuerza mientras la calmaba. Pronto se quedó dormida.

Dylan pasó con Thomas tiempo después  y los miré sorprendida. ¿Qué hacía Thomas aquí?

—¿Qué tienen tus manos que hacen dormir a la gente?—preguntó Dylan poniendo sus manos a los costados de su cadera

Me reí en lo bajo mientras Dylan tomaba a Hana con delicadeza y la llevaba a la habitación en silencio. Thomas me miró y yo a él.

—¿Qué haces aquí?—le pregunté y Thomas parpadeó varias veces

—¿Enserio? ¿Me ves y lo primero que me dices es "¿Qué haces aquí?"?—preguntó mientras se acercaba. Me reí y lo saludé con un beso corto.

—Perdón, no pensaba verte aquí—le dije tomando su mano

—Yo tampoco pensaba eso, iba a verte cuando llegara a casa—besó mi mano con ternura

—Estabamos pensando lo mismo—me reí, vi las escaleras que llevaban a la habitación de Dylan y Hana y miré a Thomas—Creo que no volverán.

—Sí, yo también lo pienso. ¿Vamos?—alzó una ceja y asentí

Salimos de la casa sin hacer ruido y nos fuimos a casa. Cuando llegamos nos vestimos con algo cómodo y pasamos la tarde viendo películas. Me encantaba tener a Thomas cerca.

Mi teléfono vibró pero no quise revisarlo. Thomas miró mi teléfono y luego a mi mientras comía un pop corn. Lo miré haciendo lo mismo. Mi teléfono seguía sonando hasta que con una mirada, Thomas se lanzó hacia adelante mientras yo quitaba mis piernas de las suyas y me estiraba a tomar mi teléfono. Thomas se adelantó y lo tomó mientras yo gritaba. Saltó sobre el sofá y se fue  escaleras arriba, lo seguí a tropezones.

—¡Thomas vuelve aquí!—le grité mientras subía las escaleras de dos en dos

Thomas se encerró en el baño del pasillo, me acerqué corriendo y empecé a tocar la puerta repetidas veces.

—¿Aló? Este es el número de ____, ella no está disponible en este momento, ¿Cuál es su emergencia?—escuché decir a Thomas detrás de la puerta con voz de mujer

—¡Thomas!—chillé volviendo a tocar la puerta

—Ajá...Mjm... yo le daré el aviso, no se preocupe, esta bien, hasta luego—dijo y luego se quedó callado

—¿Thomas? ¡No me digas que te tiraste por la ventana!—empecé hacer berrinche mientras tocaba la puerta por última vez antes de cruzarme de brazos y esperar, hasta que la puerta se abrió.

Miré a Thomas seria mientras él me entregaba mi teléfono.

—¿Quién era?—pregunté

—Un señor llamado... Pedro Cartti, quería que vayas a revisar algunas cosas pero le dije que estabas ocupada conmigo—me dijo guiñandome un ojo  mientras yo abría los ojos de par en par

—¿¡Qué?!—grité mientras movía en mis manos temblorosas el teléfono, puse un mechón detrás de mi oreja mientras revisaba el número. Antes de que marcara, Thomas me lo arrebató de nuevo y empezó a correr escaleras abajo.—¡Maldición!

Chillé mientras lo volvía a seguir. Bajé las escaleras casi tropezandome en el últimos escalón ya que me doblé el pie. Hice una mueca pero lo seguí igual.

Thomas corrió hasta la puerta y la abrió con rapidez.

»¡Thomas vuelve a hacer eso y te...!—me detuve en seco al ver la puerta. Mi pecho se contrajo mientras no sabía que decir ahora. El dolor de mi pie aunque era fuerte no evitaba que no me concentrara en la persona que estaba allí.

Su sonrisa me hizo saber que estaba emocionada.

—¡Volví, perras!—gritó alzando sus brazos al aire

No sabía que decir y sólo pude murmurar su nombre con una sonrisa en el rostro:

—Marie.

Espero les guste el capítulo, lamento no publicar el miércoles, ya sé que tengo muchas faltas :,v perdónenme.

No olviden votar. Posiblemente se venga capítulo largo el sábado UWU.

Las amo.

L I G H T

You Don't Own Me.(Thomas-brodie Sangster y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora