You Don't Own Me.(Thomas-brodie Sangster y tú)

Cap 103 [Maratón 2/2]

-¿Ya quieres ir al otro destino que tengo preparado?- preguntó con dulzura mientras acariciaba mi mano

-No puedo esperar- le sonreí. Thomas se acercó para darme un beso que recibí animada.

- Bueno, antes de eso... quiero enseñarte algo- me sonrió jalando mi mano hacia unas escaleras en bajada un poco lejos de la piscina.

El cielo se notaba de un azul claro, no pude evitar verlo un momento junto a la luna mientras bajaba por las escaleras. Llegamos a la playa y caminé distraída aún tomada de la mano de Thomas. No sabía a donde íbamos.

-¿A dónde nos dirigimos?- pregunté mirando a mi alrededor. Lamentablemente, la oscuridad no ayudaba.

-Ya verás- dijo y soltó mi mano luego de un rato. Giró a verme y sacó una venda.

Solté una carcajada y lo miré expectante. Él alzó ambas cejas poniéndose detrás mío.

-¿Es enserio? Tom...-empecé a reírme mientras agarraba la venda detrás de mi cabeza. Acomodé la venda. Ahora ya no miraba nada y me sentía desorientada así que estiré mi mano para tratar de no chocarme con nada.

Di unos pasos hasta que mi pie se cruzó con el otro y tropecé. Solté un pequeño gritillo mientras sentía como caía al piso, esperaba el golpe pero nunca llegó.

- Te tengo- susurró Thomas en mi oído antes de levantarme de un tirón. -Yo te guiaré.

Asentí un poco sonrojada por mi torpeza. Se puso detrás mío y tomó mi mano. Empezó a guiarme poco a poco por unos minutos. Hasta que me dijo que parara. Dejé de sentir su cercanía que me dejó más desorientada. No sabía ni tenía una referencia de donde podríamos estar.

»¿Estás lista? - preguntó y asentí con una sonrisa. Empezaba a impacientarme.- Bien, a la cuenta de tres, te quitarás la venda, ¿si? - volví a asentir nerviosa - 1...2...3.

Me quité la venda y la dejé caer a mis pies. Parpadee varias veces hasta que pude verlo. Frente a mí, sobre la arena estaba una manta junto a unos pequeños piqueos, una laptop con una película y una manta adicional.

Thomas me miró desde el costado de esta, alzó ambos brazos con una sonrisa. Me miró esperando a que dijera algo pero solo caminé hasta quedar cerca. Miré todo detalladamente.

-¿Qué te parece? Estaremos aquí hasta que amanezca y luego iremos al aeropuerto- dijo detrás mío. - Y también... tengo algo para ti.

Ladee la cabeza y lo primero que vi fue una cajita negra, miré a Thomas hasta que lo abrió. Había un brazalete con pequeños dijes de distintos lugares... pero no cualquiera, eran los lugares que habíamos visitado hasta ahora. Pero faltaban dos.

-Es hermoso- murmuré. Thomas sonrió y lo sacó de la caja para luego ponermelo, luego tomó mi mano y la besó.

-Se te ve muy bien- susurró y me miró.-Podrás averiguar el otro dije mañana- completó adivinando mi curiosidad.

Lo miré sonriente y me acerqué, puse mis manos en su cuello, me puse de puntillas y lo atraje a mí hasta besarlo, Thomas puso una de sus manos en mi cintura para sostenerme mientras nuestro beso era lento y dulce. Luego de unos segundos , me separé jalando un poco su labio inferior. Bajé lentamente. Sonreí viéndolo mientras él mantenía aún los ojos cerrados haciéndome reír en lo bajo.

-Ese a sido uno de los mejores besos que hemos tenido- murmuró embobado.

-Y aún faltan más- comenté sonriente mientras me volvía a ver la escena que tenía enfrente. Me senté rápidamente y pude ver el mar frente a nosotros un poco más lejos. El aroma entraba por mis fosas nasales, y aunque el viento corría, no hacía frío, aunque igual puse la manta en mis piernas.