You Don't Own Me.(Thomas-brodie Sangster y tú)

Cap 63

Antes de todo, quiero dedicarle este capítulo a guadi205. Gracias por el apoyo y los consejos ❤.

Ahora si, vamos con el capítulo.

«»

Se quedó un rato en silencio y luego tomó un sorbo de su copa.

—Eso lo sacaste de tu madre, eres muy sentimental.

—Lo que sea, es la verdad. Y te juro que si vuelves a hacer eso, en tu vida volverás a saber de mí—me levanté de la mesa—Ah, y algo más. Creo que Hye no podrá estar en navidad.

Le sonreí cuando me miró confundido y me retiré del lugar. Caminé una cuadras hasta ver un auto negro. Me acerqué y toqué el vidrio. Este empezó a bajar hasta toparme con su rostro.

—¿Tan rápido?—sonrió con sus lentes negros

—No estuviste adentro.

Él rió y abrió la puerta. Entré y al cerrar la puerta dejé salir un suspiro cansado. Me puse mi cinturón de seguridad.

—¿Acaso estas consiente que mañana tu mejor amiga se va a ir?—me preguntó y lo miré instantáneamente

—Sí, lo estoy Alejandro, tú no deberías opinar—rodé los ojos mientras ponía mi vista al frente esperando que arrancara

Pero no dejaba de verme con una sonrisa y ya era incómodo. Lo miré extrañada.

—¿Vas a conducir?

—Te debía un favor por hacerte esperar esa vez, pero ahora que te traje pues debes darme algo para que te lleve-me sonrió picaramente

Me alejé.

—¿Estás loco? Ni en sueños. Prefiero ir caminado, gracias—me quité el cinturón dispuesta abrir la puerta, pero Alejandro se adelantó poniendo seguro

Insistí un par de veces pero no cedió. Cuando iba abrirla manualmente tomó mi mano y me acercó a él.

—Sólo es un favor. Te llevé a tu casa esa vez.

—Fue tu desición, tú te ofreciste—lo miré molesta

—Pues sólo es un favor ahora.

—No me fío de lo que vayas a pedir.

—No has escuchado mi propuesta—me miró y suspiré

—Habla—hablé alejándome

—Un beso.

—Adiós—sonreí amargadamente y quise abrir la puerta

—Alto-suspiro cansado—No te dije donde.

—No necesitas decirlo.

—En la mejilla—sonrió calmadamente

—No me fío de ti.

—Pues si quieres irte sola y que te pase algo malo no tienes otra alternativa.

—Puedo llamar a Thomas.

—No lo creo.

Lo miré extrañada. No tenía tiempo para esto.

—Bien, lo haré.

Rodé los ojos y sonrió. Puse mi pulgar y mi índice con fuerza para sostener sus mejillas y que no moviera su cabeza. Él estiró sus labios como pato y alzó sus cejas, rodé los ojos y moví su mejilla hacia la derecha, alzé una ceja rodando los ojos y deje un beso. Me aleje rápidamente y con mi mano empuje su rostro hacia atrás. Él empezó a reír.