Coleccionista de HOMBRES|Terminada|

.El pago.

La duda seguía presente, el no saber donde se encontraba la persona que más le había importado en la vida lo estaba matando. Había transcurrido un día más desde el día que lo vio por última vez, se preguntaba si estaría bien, si había comido, si lo maltrataban y la sola idea de pensar en eso último le dolía. Había sido tan estúpido para dejarlo marchar aquel día, para dejar que se vaya por una pelea completamente estúpida. Su corazón se estrujaba al recordar que si hubiese sido un poco más maduro, lo hubiese detenido esa noche, no lo habría dejado marchar nunca. Si hubiese llamado a Alan aquel día, sino hubiese dejado pasar su amenaza, si no lo hubiese subestimado otra suerte sería.

-¿Dónde está Alonso? ¿cuándo va a volver?- preguntaba Braulio por su hermano, sin saber que sus preguntas no tenían respuestas. Jos lo tomó entre sus brazos y lo sostuvo fuertemente, sentía como si abrazara a Alonso de nuevo- ¿por qué lloras?- limpió sus lágrimas antes de separarse de él.

-Por nada Brau.

-¿También lo extrañas?

-Sí, mucho. Pero ve con a Miguel a jugar, cuando la cena esté lista voy por ustedes. 

Los dos niños subieron a su habitación acompañados de Julia, una joven que Jos había contratado para cuidar de los pequeños. 

-Tienes que comer- ordenó Freddy al pelirrojo que yacía sobre la cama de sábanas blancas.

-No tengo hambre- contestó sin ánimos. 

-A ver Alonso, si no comes te vas a enfermar y no quieres eso ¿verdad?

Él no quería hacer caso de lo que el rizado decía, quería ser fuerte y mantenerse en esa postura de altanería. Pero no lo pudo hacer por mucho, su estómago rugía hambriento, además, pensó en su hermano, no quería enfermarse porque tenía que ver por él. 
Se levantó y arrastrando los pies se dirigió a la pequeña mesa donde se encontraban sus alimentos. 

-¿No era tan difícil no?

-¿Dónde está Alan?- ignoró la pregunta anterior.

-Salió ¿por qué?

-Dijiste que me contaría algo que me interesaría.

El rizado soltó una carcajada- Ay Alonso, ¿enserio quieres saber acerca de la vida que llevaba Jos?

-Si no, no estaría preguntando ¿no?

-Oh, parece que pronto podrías saber todo- dijo a la vez que se escuchó como la puerta principal fue cerrada de un golpe. Freddy salió de la habitación de Alonso para encontrarse con su primo. 

-¿De dónde vienes?

-¡No te importa!

-¿Estás borracho?

-No es tu problema, quítate- con su brazo izquierdo empujó a su primo hacia un lado para hacerse paso hacia la cocina.

-Sí estás borracho.

-Apenas y me tomé unas copas ¿ok? además si estoy borracho o no, no es tu asunto. 

Abrió la nevera en busca de una botella de cerveza, la cual no le fue tan difícil de encontrar, pues había una decena de ellas. Metió su mano en su bolsillo y sacó su móvil, lo colocó en su oreja después de marcar un número telefónico.

-Hola Jos- dijo un un tono burlón.

-¡Alan!- gritó aquel pelinegro llamando la atención de sus acompañantes y después activó el altavoz para que todos pudiesen escuchar- ¿dónde está Alonso?

-Shhhh- lo calló- no te hablé para decirte donde está Alonso, te llamé para decirte que quiero cinco millones de dólares para las 11:00pm.

-¿Qué? faltan cinco minutos para las once, no puedo conseguir esa cantidad tan rápido. 

-No lo puedo creer- se burló de él- Jos el poderoso no puede conseguir cinco millones de dólares para salvar a su noviecito.

-Entiende que a esta hora me es imposible, no tengo esa cantidad en efectivo, podría darte todo lo que tengo en la caja fuerte pero no llegaría a la cantidad que quieres.

-Uuuhh pequeño detalle, debiste ser más precavido con ello.

-Puedo tener todo mañana.

-La cuestión es esta, no sé si mañana se me antoje hacerte esta misma oferta.

-Alan por favor.

-¿Creíste que podrías botarme de tu vida y todo estaría bien? ¿que con darme un cheque con un unos cuantos ceros me iba a conformar como los demás chicos?- la pregunta tomó por sorpresa a Jos, la voz se le fue en ese instante y no supo que contestar- ¿te comió la lengua el ratón? así es Jos, lo sé todo y creo que es hora de que alguien más se entere.

-¡No! ¡no te atrevas!

-Tú eres quien no debió desafiarme. Una pregunta más ¿crees que con mil pesos me alcance para pagar por los servicios que te brindaban? 

-¡No te atrevas a tocarle ni un pelo a Alonso!

-No eres quien para decirme que hacer- colgó. 

-¡Alan!- en cuanto el moreno colgó la llamada Jos sintió como el alma lo abandonó, su rostro palideció, su cuerpo se heló y las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas. Iban a dañar a Alonso y no podría hacer nada para impedirlo, aquel pelirrojo iba a pagar por los errores que él había cometido.

-¿No estabas hablando enserio con lo que dijiste verdad?- Freddy estaba totalmente alarmado por las palabras que había escuchado decir a su primo.

-Claro que no, no voy a darle los mil pesos si puedo tenerlo gratis- tomó la botella de cerveza que había sacado antes del refrigerador y comenzó a dirigirse a la habitación de Alonso.

-¡Alan no seas un pendejo!

-¡Tú no te metas!- la bebida seguía haciendo efecto en él, su fuerza había incrementado en un 5% más y haciendo uso de ella, empujó a su primo lejos de aquella puerta para después adentrarse a la habitación.

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5/5

¡Hola!

Me tardé un poco más en subir la última parte del maratón, una disculpa.

Espero que... ¿les haya gustado?

Ayer los cedesnueves se presentaron en la Feria de Puebla
y bueno, Jos no estuvo presente, así que... 4/5 y muchas lágrimas.

Dejen sus comentarios acerca del capítulo.

¿Cómo tomará Alonso la revelación de lo que hacia Jos?

¿Alan logrará su cometido con Alonso?

¿Jos pensará algún plan para evitar que lo peor ocurra?

¿Nos leeremos pronto?