Destinados Antes De Nacer © || Libro #1|| [BTSxJin] (Omegaverse)

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Una mano agarra con fuerza el hombro izquierdo de SeokJin haciendo que deje de caminar y regrese a la realidad, apartándolo de los oscuros recuerdos, parpadea un par de veces olfateando con discreción los aromas y su lobo se relaja al reconocer que es la line 95, siente cómo su cuerpo es jalado hacia atrás y cierra los ojos al tener el rostro pegado en el pecho de Jimin, suspira aliviado al tener sus brazos alrededor de su cuerpo; está salvo, dos de sus alfas han venido por él.

—Qué mierda.

Dice el rubio por la intromisión de los dos vocals de BTS.

—Oigan, nosotros lo vimos primero —reclama el moreno con molestia.

TaeHyung avanza con una expresión seria y les ruge para dejarles en claro quién tiene más autoridad.

—Es nuestro —les dice con voz grave y los dos alfas se sienten intimidados por la furia en los ojos del chico de cabellos azules, sus pupilas están amarillas, señal que está dispuesto a pelear por el omega—. Váyanse. Ahora.

—Eso no...

— ¡Ahora!

Les ordena mostrando los colmillos y dan un pequeño salto por el susto.

—Como sea.

Chasquea cabreado el rubio y le hace una seña con su cabeza para que su amigo moreno lo siga. Los colmillos de Tae desaparecen poco a poco mientras los dos desconocidos se alejan, sus pupilas regresan a su forma original al tener el panorama despejado y gira sobre sus talones para acercarse a su pareja.

—Jin Jin, ¿estás bien? — Su tono es suave y trata de no parecer desesperado por saber si le hicieron algo malo— ¿Ellos te tocaron? ¿Te hicieron daño?

Encoge los hombros al sentirse culpable por haberse dejado arrastrar por esos dos feos chicos, pero hace años que un alfa había usado su voz con él, lo tomó desprevenido.

— ¿Dulzura?

Lo llama al ver que se pone tenso y comienza acariciar la parte baja de su espalda para calmarlo, para que sepa que está a salvo.

—Uno usó...usó su voz...de alfa...

Murmulla aspirando el aroma a madera para no terminar llorando y un escalofrío recorre la punta de sus pies hasta la cabeza.

—Esos malditos —gruñe Tae queriendo ir tras ellos—. Alfas de..., los voy a matar.

Jimin lo mira con reproche, no es momento para que se ponga de esa forma, deben tranquilizar a su omega primero, no quiere que se deprima y esté triste en la cabaña, se supone que el viaje fue hecho para que pasen un bonito y grato tiempo juntos, los siete.

—Tae Tae —voltea su cabeza hacia el lado del peli azul para mirarlo por el hueco que los brazos de Jimin hacen—. Ya pasó. Estoy bien —no quiere que se ponga de malas—. Ya se fueron...estoy con ustedes...no te molestes, por favor.

El lobo de V gruñe con resignación al decidir hacer caso a su linda pareja, su rostro se relaja al mirar sus ojitos bonitos marrones y se acerca para acariciar sus cabellos grises con ternura.

—Bien. Tú ganas —Jin le sonríe con agradecimiento—. Vámonos de aquí.

Regresan a dónde está la camioneta y el mayor acelera el paso al notar que Hoseok ya está adentro, acostado en el asiento de atrás con los ojos cerrados y quejándose por lo bajo.