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NamJoon hace una mueca cuando SeokJin, vuelve, a negar a la cuchara con fruta la cual le está extendiendo el maknae. Ya ha pasado media hora desde que despertó y se ha negado a recibir bocado alguno, apenas aceptó el vaso con agua.

—No quiero —susurra girando el rostro hacia el otro lado de la cuchara.

—Por favor, angel, al menos unas cuantas cucharadas —trata de convencerlo—. Debes recuperar tus energías.

—No quiero —repite harto de que le insistan tanto.

YoonGi le hace una seña al maknae para que deje de estar con la cuchara en el aire. JungKook retira la cuchara no muy convencido, sin embargo, tampoco pueden obligarlo a comer.

—Gracias —regresa la mirada al frente y la baja hacia sus manos.

— ¿Seguro estás bien? — Vuelve a preguntar TaeHyung por tercera vez—. Podemos ir a un médico.

—Estoy bien. No me duele nada —es verdad. Siente el cuerpo pesado, sin embargo, es por el hecho de haber estado echado por largas horas—. Solo tengo frío...

Confiesa abrazando más sus piernas y siente como alguien le pone una cobija encima de su espalda. SeokJin no habla, permanece con la mirada fija al frente y perdida debido a que está recordando los acontecimientos antes que se desmayará. Un nudo se forma en su garganta al recordar el vídeo y sus ojitos se llenan de lágrimas por el hecho de que los chicos dijeron que les había engañado sin razón. Lo último fue lo que más le dolió, le duele. El no quiso besar a Seung por gusto, lo hizo para saber si era su destinado o no. Cuando Seung le dijo que había sentido una conexión Jin se desesperó, asustó y alteró porque aquello significaba que iba a ser separado de sus seis alfas porque Seung no hubiese dejado que continuará con ellos. Ni si quiera hubiese entendido cómo pueden estar en una relación de siete. Jin tuvo tanto miedo y por ese miedo fue que pidió que lo besará. Lo hizo por ellos. Siempre sus acciones han sido pensando en ellos, quizás sea la razón por la cual las consecuencias son negativas la mayor parte del tiempo.

— ¿Me van a dejar?

Pregunta apretando sus puños ante el dolor en todo su ser.

— ¿Qué? — Dice Jimin al no haber entendido.

—Por lo de Seung..., el besó...

Tae cierra los ojos ante la rabia por el recuerdo del vídeo y respira con profundidad. Tiene tanta ganas de darle un buen golpe a ese alfa.

Jinnie...

—Realmente, no quería besarlo —habla necesitando desahogarse—. No quería besarlo. No lo hice por gusto. No quería.

Cielo, está bien —no quiere que se atormente—. Nosotros fuimos muy idiotas. No debimos reaccionar de esa forma. No tienes idea de cuánto lo sentimos.

—Yo no los engañé —solloza sorbiendo la nariz—. No lo hice. No me dejen, por favor.

A YoonGi no le gusta para nada aquel tono sumiso. El mayor no es así.

—No vamos a dejarte, baby.

—Prometo no volver a ver a Seung —es como si no estuviese escuchando—. Prometo no volver a hablar con ningún alfa —los mira con súplica—. Pero, no me dejen. Por favor, no me dejen.

—No..., no vamos a dejarte —repite esta vez Jimin aturdido por las feromonas del omega—. Sentimos...

—Los amo mucho —definitivamente, no los está escuchando—. Sería incapaz de engañarlos. Los amo mucho. Los amo. Yo...

Destinados Antes De Nacer © || Libro #1|| [BTSxJin] (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora