Destinados Antes De Nacer © || Libro #1|| [BTSxJin] (Omegaverse)

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Chanyeol envuelve el delgado cuerpo de su mejor amigo con sus grandes brazos para atraerlo hasta su pecho y darle un cálido abrazo, sonríe inconscientemente cuando este le devuelve el gesto, y al alzar la mirada se encuentra con tres pares de ojos, los cuáles están mirándolo con tanta rabia que su sonrisa se vuelve una incómoda.

—Espero que el otro año nos vuelvan a llamar, Channie —el suave tono de Jin hace que regrese su atención en él—. Es divertido ser MC contigo.

—De seguro nos llamarán —dice poniendo las manos encima de los anchos hombros—. Hacemos un gran equipo.

—Un gran equipo.

Afirma cerrando los ojos para darle una gran sonrisa y el corazón del alfa se acelera por lo radiante que se ve; TaeHyung se percata de ello, frunce el ceño molesto y se acerca un poco para que el omega pueda notarlo, pero no funciona Jin está muy concentrado en pasar un poco de tiempo con el integrante de EXO antes de que se vaya.

—Ya sabes que puedes llamarme si no tienes nada que hacer, Channie.

Park deja de teclear en su celular y aprieta el artefacto con cólera.

—Tú igual, Jin —despeina los cabellos color negros y el dueño ríe haciendo que el líder de BTS muerda el labio inferior al no querer que lo toque—. Nos vemos en el evento de año nuevo.

—Por supuesto —lo acompaña hasta la salida del camerino—. Tal vez, podemos ir a comer después.

—Claro, siempre y cuando tus protectores no estén —dice cuando ya están alejados de los seis alfas gruñones—. No es que me caigan mal, pero si por ellos fuese ya me hubiesen cortado la cabeza.

SeokJin se avergüenza, no es la primera vez que uno de sus amigos se percata que a sus compañeros de grupo no les importa disimular el desagrado que sienten cuando están cerca de él.

—E-Ellos solo..., pues... —juega nervioso con la manija de la puerta—,...sabes como son Channie.

—Lo sé y es lindo ver que se preocupan por ti —confiesa con una pequeña sonrisa—. Es bueno saber que te respetan como omega y no han tratado de sobrepasarse durante estos casi siete años.

Traga saliva con más nervios y asiente varias veces.

—S-Sí...ellos son muy amables —tiene que dar por terminado el asunto—. En fin, saluda a los chicos de mi parte. Diles que coman saludable y duerman bien.

—Entendido, capitán —hace la pose de orden y Jin ríe por eso—. Cuídate mucho, ¿sí? Cualquier cosa me llamas.

—Gracias, Channie —le da un beso en la mejilla por costumbre—. Nos vemos en unos cuantos días.

—Ugh, pensé que no se iría.

Escucha la queja del maknae una vez que ha cerrado la puerta y gira sobre los talones para mirarlos enojado.

— ¿Qué?

—Tienen que controlarse —le responde a Tae soltando un largo suspiro—. No pueden ser tan evidentes.

—No es nuestra culpa —se excusa el de cabellos azules cruzando los brazos—. Si no te tocará mucho no nos pondríamos celosos.