En Tierra de Lobos II© [Completa] (Corrigiendo)

Capítulo 40: Parpadeo

Narra Gabriel

Respiro profundo tratando de calmarme pero duele mucho, creo que mi vientre está creciendo más, la sobrecarga debe está haciendo crecer a mis bebés más rápido y no puedo hacer nada para evitarlo. Lastime a Viktor sin querer le pedí que se alejara y que fuera por ayuda pero no me hizo caso, espero que este bien porque estoy muy asustado.

- ¡Oh Dios! - balbuceo cuando percibo una manita moverse dentro de mi.

- Niçtrüek dyptru. - escucho a lo lejos la voz de Leila entonces me incorporo un poco de suelo y la imagen que había deseado se va dejando el lugar muy oscuro pero mi energía sobrecargada ilumina mi alrededor.

- Gabriel. - escucho la voz Rolan en mi mente entonces con mucha de dificultad me concentro en él y unos segundos después se materializa enfrente de mí.

Suspiro adolorido. - Rolan necesito que hagas algo por mi pero es un poco complicado.

- ¿Te duele? - asiento apretando mis párpados pero los separo al sentir sus manos en mi rostro.

- Mi mamá decía que podía absorber energía de los demás por eso no debía tocar a nadie. - expone al borde el llanto pero está llevándose mi sobrecarga.

- Sigue haciéndolo, yo te diré cuando duela, ¿está bien? - asiente con una pequeña sonrisa.

- Nozttërr Lyess. - escucho otra vez la voz de Leila pero está vez logran abrir la puerta y lo siguiente que veo es a la forma lobuna de mi novio acercarse hasta llegar a donde nosotros para rodearnos con su cuerpo prestando atención a lo que hace Rolan.

- Lamento haberme ido así, no quería lastimar a nadie, pensé que se me pasaría pero no fue así. - me disculpo y como respuesta solo hace un chillido lastimero y lame las manos de Rolan haciéndole reír.

- Me haces cosquillas. - le dice entre risas retirando sus manitas de mi rostro para tomarme de las manos.

- ¿Te sientes bien? - le pregunto a Rolan un poco preocupado, esta absorbiendo mucha energía.

- Siento cosquillas pero estoy bien. - declara y sus ojos se tornan completamente negros, algo que me preocupa un poco pero eso es lo que es.

- Caballero infernal. - sonrío al escuchar la voz de mi novio en mi mente.

- Si, es lo que es. - afirmo entonces siento un par de pataditas que dejan muy feliz tanto que se me escapan una que otra lágrima.

- ¿Estás bien? - asiento ante la preocupación de Rolan entonces veo a los chicos adentrase en el lugar.

- Gabriel. - suspiro aliviado al ver a mi protector entrar por la puerta para acercarse pero Elijah les gruñe para que no se acerquen mucho.

- ¡No me gruñas, el también es nuestro! - le riñe Viktor con un tono muy infantil haciéndome reír, ya casi no puedo sentir la sobrecarga.

- Gabriel... tu vientre... - asiento ante la suposición de Leila y David.

- La sobrecarga les afectó, puede que ya tenga los seis meses. - expongo dejándoles muy sorprendidos en especial a mi novio quién se acerca sus enormes fauces a mi vientre y cuando lo hace nuestros bebés se mueven.