1-Resoluciones de un niño egoísta

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Prólogo

Era un día de mucho calor en la ciudad, las personas huían de aquel sol abrazador que se alzaba victorioso en el cielo. Ninguna nube a la vista. Algunos se refugiaban en sus casas, otros en cafeterías, oficinas, escuelas y universidades. Todos con un mismo propósito; sentir el alivio del aire acondicionado. Aquellos mas valientes encontraban las sombras de los árboles como una buena opción. Aunque sea por un corto tiempo.

-¡Ai'Kla! ¿podemos ir a tu casa? - la voz de Technic se escuchaba con irritación. El joven apuesto tenía la camisa de su escuela pegada a su cuerpo como si fuese una segunda piel. El sudor corría por su rostro malhumorado-. Oiii ¡Ai tonto! Estamos en medio del infierno, ¿Podemos irnos?

-No-fue la respuesta de Kengkla. En contraste con su amigo, Kla se situaba acostado en el cesped con los ojos cerrados, disfrutando del exterior sofocante y del fastidio de Nic.

Nic refunfuñó y se alejó del árbol en el que estaba apoyado.

-No sé por qué sigo aquí.

-Fácil. Quieres el número de P'Berry y yo quiero el número de P'No.

Kla escuchó un gemido ahogado y supo que su mejor amigo, su único amigo, estaba en un dilema.

-No me pidas eso, Kla.

-Vete entonces-contestó con tranquilidad KengKla sin todavía abrir sus ojos.

-Sabes que no puedo darte el número de mi hermano. Ya te he ayudado demasiado.

Nic tenía razón. Kla le había pedido fotos de P'No y cumplió, llamaba a su hermano con cada pedido de Kla y cumplió, hasta inventaba excusas para que Kla se quedara a dormir en su casa y pasar mas tiempo con Techno.

Claro que a cambio... Kla le entregaba a Nic los números de algunas chicas de la escuela, le ofrecía su coche para citas e inclusive le daba dinero.

Pero aun así, habia un poco de protección por parte de Nic hacía su hermano mayor. El negocio entre ellos se llevaba acabo a través de cosas simples y ya mencionadas, algo más allá de esos puntos ya no era negociable.

Y el número de P'Techno era uno de ellos.

-Estoy enamorado de Phi.

Nic resopló.

-¿Qué le vez a mi despistado hermano?

-Él es perfecto para mí, Ai'Nic -dijo con una sonrisa brillante y astuta-. Él será mi esposa.

-Pobre mi hermano-suspiró Nic -. Un lobo esta interesado en él.

Esta vez Kengkla abrió los ojos y miró lo rayos de sol que trataban de pasar entre las ramas de los árboles.

-Un lobo que se enamoró de su presa-susurró más para si mismo-. Un lobo enamorado de una oveja.

.
.
.

Días siguientes...

Kengkla llegó a una casa vacía, su casa, y subió directo a su cuarto. Otro día solo, viviendo una vida donde sus padres daban señales de vida cada fin de mes y donde la cuenta bancaria de Kla siempre estaba llena con un futuro asegurado.

Kla no odiaba a sus padres, ya no, pero si les reprochaba su falta de tacto hacía su único hijo.

Practicamente se había criado solo, sin embargo, eso no quitaba que días como hoy Kla odiaría la idea de pasar más tiempo entre cuatro paredes silenciosas.

Salió del cuarto y mientras bajaba las escaleras, llamó a Nic.

"Hola"

-Estoy llendo a tu casa.

La falta de respuesta de Nic lo puso nervioso.

-Te daré el número de P'Berry, es lo que querías el otro día.

Kla escuchó el murmullo de su amigo.

"Ya no lo necesito Ai'idiota. Solo ven aquí... y trae una muda de ropa..."

-¿P'No está en ca-

Kla no pudo terminar su oración porque Technic había cortado la llamada.

Nic lo recibió con un semblante gruñón, Kla se dio cuenta que había levantado a su amigo de su sagrada siesta.

Ambos chicos se dirigieron a la cocina y Kla observaba como Nic sacaba de la nevera platillos con bocadillos de todo tipo.

-Mi madre acaba de irse a ver a nuestra abuela y vendrá en dos semanas- comentó mientras calentaba la comida-. Dejó comida para P' pero él regresara más tarde... así que puedes comer su comida.

KengKla se emocionó con el hecho de que iba a comer el almuerzo destinado para su P'No. Comida preparada por su futura suegra.

-Gracias Mae- susurró feliz-, buen viaje.

El sonido de la silla siendo corrida sacó a Kla de su ensoñación.

-Me extraña...- comenzó con misterio Nic.

-¿Sobre qué?

El joven que parecía tener la ventaja de algún tipo de hecho importante sacudió su cabeza.

-Estas tan enamorado que tu instinto comienza a fallarte-rió Nic. Ante la cautelosa mirada de Kla, siguió-. Acabo de decirte que mis padres no estan y que vendrán dentro de quince días. Pensé que estarías más feliz.

KengKla miró a su amigo con inocencia unos segundos y Nic hizo una mueca amarga por su estupidez.

-Debería saberlo...- escupió exasperado.

Kla se rió esta vez. Dejó atrás esa mascara de falsa inocencia y su mirada, su verdadera mirada lo decía todo, ¿Cómo podría pasar de largo tan valiosa información?

-Bueno, como tu amigo... solo esperaba que me invitaras pero como verás ya no será necesario.

¿Más de una semana conviviendo con P'No?

Después de años de un enamoramiento unilateral, Kla se había decidido.

Que comience el plan para conquistar a su esposa.

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Solo escribo mis pensamientos al azar y tal vez se forme una historia. 😊😊😊

El Lobo y la OvejaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora