57.

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-¡_______! ¡Ven aquí y como buena madrina de Frankie ayúdame! – gritó Lucy desde arriba.

Los chicos habían vuelto a Londres, no había vuelto a ver a Niall desde nuestra discusión ya que yo dormí en mi departamento y el ni siquiera me siguió. Y mucho menos se despidió.

Lucy seguía viviendo en nuestro departamento ya que el viaje en avión para dos bebes con una semana de vida no sería algo bueno.

-¿Qué es ese olor? – entre a la habitación tapando mi nariz.

-Tú querido sobrino con tan solo una semana de vida es bastante... poderoso. – señaló su pañal. -¿Puedes cambiarlo mientras baño a esta princesita?

-Esta bien.

Solté un grito en cuanto abrí el pañal de aquel bebé, solía ser experta en cambiar pañales pero nunca había visto algo así en mi vida.

-¡¿Qué?! – oi gritar a mi amiga desde el baño.

-¡Se hechó la cagada del siglo!

-¡No hables así de mi hijo! – gritó.

-¡Lo siento! – reí. -¡Cameron, ven aquí!

-¿Qué suced...- dijo mi amigo entrando a la habitación pero paro de hablar en cuanto vio el pañal de Frankie. – ¡Oh por Dios! ¿Cómo es que todo eso salió de ese pequeño? – dijo tapando su nariz.

-Ayúdame a limpiar este desastre. – señale a Frankie.

-Oh no, no no y no, ni lo sueñes. – dije mientras prácticamente corría hacia la salada.

-¡Cameron!

-¡No!

-¡Me las pagarás! – exclamé.

Luego de luchar por no vomitar, cambie el pañal de Frankie y lo mecí en su cuna para que duerma su debida siesta. Lucy terminó de bañar a Juliett y la recostó junto a su hermano, quien al instante se durmió.

Cogi la revista que Lucy compró por la mañana y comencé a leerla, mientras ella miraba la televisión y Cameron estaba recostado junto a mi con su teléfono.

-Esta revista dice que Justin se casará con Madison. – reí.

-Si claro. – dijo Cameron riendo también. -No creo que el sea capaz de soportarla por mucho tiempo más.

-Oh vamos, por lo menos si tiene novio... no como otros. – respondió Lucy.

-¡Oye! No tengo novia porque no quiero pero sabes muy bien que tengo una larga fila esperándome.

-Alguien tiene autoestima. – canturree.

-Eres imposible. – rio Lucy.

El teléfono de Lucy sonó en la cocina y como no, convenció a Cameron de que vaya por el con la excusa de que ella acababa de tener dos gemelos y estaba realmente cansada. Si, claro. Ella estuvo usando esa excusa por una semana entera y mi pobre amigo seguia creyendo que era cierto.

Me sorprendí al ver fotos mías con un titular que llamó bastante mi atención, en realidad me divertía ver como inventaban cosas sobre mi.

-Aquí dice que estoy embarazada. – reí. -¿No se cansan de inventar noticias? Solo tengo unos kilos demás, no es mi culpa amar la comida. – rodé los ojos.

Lucy me quito la revista de las manos y miro las fotos que me habían sacado ayer cuando estaba en el centro comercial. Me miró y abrió los ojos grandes. La miré extrañada, se estaba comportando muy raro.

-Levántate. – dijo aún sorprendida. La miré sin entender. -¡Levántate! – exclamó en un susurro ya que sino sus hijos se despertarían.

-¿Qué sucede? ¿Te has vuelto loca?

-Levanta tu polera.

Levante mi polera mirando directamente a los ojos de Lucy, quien cambió su rostro a aún más sorpresa cuando hice lo que me pidió. Tapó su boca con la mano y me miró a los ojos.

-¿Cuándo fue la última vez que Niall y tú...? Ya sabes.

-Hace cuatro meses... ya sabes, la última vez que nos vimos peleamos y...

-¿Hace cuanto no tienes la regla? – me interrumpió algo desesperada.

-Hace cuatro... - pare de hablar en cuanto me di cuenta lo que estaba pasando. -Dios mío. – tape mi boca con ambas manos.

Corrí hacia el espejo y levanté mi polera otra vez, me coloqué de costado y lágrimas aparecieron en mis ojos en cuanto vi mi reflejo. ¿Cómo es que no lo había notado? Era una idiota.

Una leve pancita comenzaba a crecer sobre mi, la cual yo juraba que era por comida. Había comenzando a llorar desesperadamente, no esperaba eso en absoluto. Había jurado no volver a tener hijos después de Noah, simplemente era una sorpresa enorme.

-_______... – susurró Lucy poniéndose a mi lado.

-No puede estar pasándome. – la miré a los ojos.

-Cariño... ¿Qué harás?

-No lo sé... ni siquiera se que pasará con Niall.

-Lucy, Louis en el teléf... - Cameron paró de hablar en cuanto entro a la habitación y miro mi vientre descubierto. -¡______! Dios mío.

-¿Qué sucede con ______? – se escuchó a Louis hablar a través del teléfono.

Lucy salió a hablar con Louis dejándonos a Cameron y a mi solos. No se necesitaron palabras para que mi mejor amigo me abrace como nunca antes. Sabía perfectamente que yo no estaba preparada.

-¿Estas bien?

-No lo sé, simplemente creo que no es el momento correcto para... esto.

-¿Le dirás a Niall?

-No por ahora. – negué. -Solo quiero estar un rato sola y pensar en lo que haré.

-Esta bien. – besó mi mejilla. -Ve a descansar, ¿está bien? Te quiero pequeña.

-Yo a ti, Cam.

Me encerré en mi habitación y me recosté en mi cama mirando hacia el techo. Una parte de mi estaba asustada, no quería volver a pasar lo mismo qué pase con Noah, no quería que la vida me vuelva a arrebatar a mi hijo o hija como lo hizo anteriormente pero otra parte de mí estaba feliz, feliz de tener un hijo con Niall. Siempre imaginé estar casada, formar una familia junto a él y Noah. El realmente quería un hermanito y en este momento iba a poder dárselo pero el ya no estaba para verlo.

Otra de las razones por la que estaba asustada era porque no sabía que pasaría con Niall, es decir, habíamos discutido hace una semana y no volvimos a hablar. Incluso estaba segura de que el se estaba arrepintiendo de pedirme matrimonio.

¿Y si estaba arrepentido de verdad? 

¿Y si se había cansado de mi y ahora le gustaba otra chica? 

¿Si tener un hijo ahora arruinaría su carrera? 

O peor... ¿Y si el no estaba listo? Si pasaba eso debía criarlo sola y otra vez tendría un hijo sin un padre. No quería eso.

Borre esos pensamientos de mi cabeza, sabía que Niall no era así y se haría cargo de este bebé.

Me levante de la cama y caminé hacia el espejo. Levante mi polera y me coloqué de costado mientras acariciaba mi vientre.

-Estoy ansiosa por conocerte, amor.

Noah. |Niall Horan & tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora