Parte 35: Aventurero

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- Hay algo más que me gustaría pedirle. - continuo diciendo el enviado de Orizon.- Teniendo en cuenta todo el tiempo que nos ha costado encontrar el corazón de orco, me temo que lo mejor para mi señor sería que no hubiera ningún contratiempo durante el envío. A lo que me refiero es que, aunque me apena decirlo, considero que en nuestra caravana no tenemos suficiente personal para poder regresar con la seguridad que me gustaría. Por lo tanto, me gustaría preguntarle si sabe de una manera de contratar a más personas.

- Mmm... Lo único que se me ocurre es el gremio de aventureros. Como sabrá, este pueblo es pequeño y normalmente no debería tener uno de esos, pero a causa de las estampidas goblins frecuentes, se construyó uno hace tiempo. No estoy seguro de cuantos aceptaran su pedido, pero no debería haber problema siempre y cuando les pague bien.- contestó Rodolfo.

- Ya veo. Entonces, me gustaría que me ayudará a poner una noticia en el gremio sobre una misión de escolta, para dentro de dos días, en la plaza principal. La paga será de dos de plata; daré una el primer día y dependiendo de lo que ocurra, podrá ser aumentada. Claro está, no me haré responsable de cualquier problema que ocurra en el camino, por lo que cualquier nivel de aventurero puede participar, bajo su propia responsabilidad.

- Le pediré a un sirviente que lo haga inmediatamente. Pasé y acompáñenos a cenar.

Dicho eso, los dos entraron en la mansión, seguido de sus súbditos, y después de un tiempo todo volvió a la normalidad. Aunque mi humor seguía siendo malo, ya estaba empezando a mejorar, pues acababa de encontrar una salida para el problema que tenía.

Si bien el plan de ganar el favor de Orizon con la entrega del corazón de orco ya no era posible, eso no significaba que no podía ganarme su favor de otra manera. Teniendo en cuenta la posición de los nobles, es posible que tengan muchas cosas entre manos y yo pueda ayudar en alguna de ellas a cambio de algo. El problema es saber cuales son estas cosas.

La única manera de enterarme de lo anterior sería acercarme a la ciudad de Morni, lugar donde se encuentra la familia noble de los Orizon. El problema era que eso me costaría tiempo y resultaría un problema para mi familia, ya que padre todavía no esta totalmente recuperado y no puede ayudar a madre a conseguir dinero. Pero ahora acababa de formarse una solución.

Si me registraba como aventurero, podría aceptar la misión que acababa de escuchar, que no solo me llevaría a Morni, sino que también me daría dos monedas de plata. Teniendo en cuenta que se necesitaba solamente una moneda para que mi familia pudiera vivir bien por medio mes, dos monedas de plata por un viaje de dos semanas era una gran ganancia, mucho mayor a la que yo ganaba como cazador si vendiera las cosas que cazaba cada semana.

Suspire pensando en todo el dinero que había podido ganar si me hubiera vuelto un aventurero antes, pero sabía que era algo que no podría haber hecho. Cuando recupere la conciencia en este mundo, este cuerpo no estaba en condiciones de poder trabajar como aventurero, ni siquiera podía hacer algo de magia. Tuve que aceptar el trabajo como cazador para poder entrenarlo y, gracias a las "clases" de magia de Firebird, pude obtener control sobre el mana.

Sin lugar a dudas, después de todo ese tiempo entrenando, ya estaba preparado para poder registrarme como aventurero. Además, si quería irme del pueblo para viajar alrededor del mundo, convertirme en un aventurero sería de gran utilidad, ya que facilitaría tanto la entrada a diversos lugares como la búsqueda de trabajos para ganar dinero.

Así que, después de pensarlo unos momentos, decidí cual sería mi siguiente objetivo: convertirme en aventurero, viajar a la ciudad Morni y descubrir que otras cosas podía hacer con tal de conseguir el favor de Orizon.

Con eso en mente, volví a casa mientras pensaba en como convertirme en un aventurero. Siendo sincero, planeaba primero irme a otra lugar antes de registrarme como aventurero, ya que en este pueblo podría encontrarme problemas a causa de mi mala fama. Aún así, solo tenía dos días para hacer algo, antes de que la caravana partiera hacía Morni.

Fue entonces que llegue a casa y me volví a encontrar a alguien que me podría ayudar: Gloria, la amiga aventurera de madre.

Desde el día en que la vi por primera vez, ha estado visitando a madre cada cierto tiempo, siempre que tenga tiempo entre misión y misión. Al parecer, se conocían desde la infancia y habían sido buenas amigas desde entonces. Tenia un aura que recordaba a una amazona, se especializaba en la lanza y escudo y era de carácter alegre, aunque a veces era un poco brusca. Pero era una persona en la que se podía confiar. O al menos eso decía madre.

Ya que tampoco tenía mucha opción, le pregunte si me podía ayudar con el asunto de registrarme en el gremio de aventureros sin que el pueblo se diera cuenta. Al principio me miró raro pero no tardo mucho en darse cuenta de que registrarme como aventurero podría causarme algunos problemas con la gente del pueblo. Teniendo en cuenta mi mala fama como perdedor, seguramente me juntarían con los aventureros que se aprovechan de los demás (que como adivine, existían), lo que dificultaría mis acciones a la hora de buscar trabajo.

Así que, viendo las complicaciones que podían ocurrir, me dijo que me ayudaría de la siguiente manera: mañana avisaría que el hijo de un aventurero que había conocido iba a registrarse y, como no quería vivir de la fama de su padre, lo haría bajo un seudónimo y usando una máscara para evitar ser reconocido. Teniendo en cuenta que tenia ciertas amistades entre las recepcionistas del gremio, no debería haber ningún problema en hacer un registro lo más inadvertidamente posible.

Solo nos quedaba decidir bajo que nombre me registraría, dando lugar al nacimiento del aventurero Ti Zoe Tou.

Viviré su vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora