🍒 Capítulo 79 🍒

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-Bien, este es el dispositivo localizador de flechas -Porter abrió una brújula que estaba calibrada con la aguja apuntando al norte. Y en el fondo, un pequeño puntito. Era de color rojo-. Este punto es donde está la flecha más cercana.

Los dreamers lo vieron con curiosidad. Porter se lo pasó a uno de ellos y fueron entregandoselo de mano en mano. Era algo pesado, y mientras la aguja se movía, el punto rojo no.

-Pruébenlo, caminen -Dijo Porter.

Caminaron hacia la derecha. Muy lentamente, el punto rojo fue moviéndose. Aquel destello era el que debían de seguir. Era la localización de la Flecha. Era su destino. Los dreamers devolvieron la brújula.

-Sólo les queda un mes de entrenamiento -Anunció el líder-. Tienen que aprovecharlo, así que para este último mes harán un curso de primeros auxilios ¿Entendido? -El equipo volvió a asentir.

El mes fue muy ajetreado. Llegaban agotados a sus residencias, salían temprano por la mañana para llegar a la sede de SPW donde, primero, entrenaban, más tarde hacían cursos de tecnología, luego hacían aquel dichoso curso de primeros auxilios y después era ir a por los stands, es decir, estar en contacto con ellos. Volvían a sus residencias, dormían y a repetir la rutina.

Kakyoin apenas tenía tiempo para dibujar o pintar siquiera. Sin embargo, estaba motivado por la búsqueda de las flecha. No le dio mucha importancia a su bloqueo artístico.

El día finalmente había llegado. Tras sus últimas pruebas de combate, estaban preparados. Pero antes, el señor Porter había preparado un viaje a Francia. ¿La razón? A cada uno de ellos se le haría un DRP junto a un INRE. Querían asegurarse de todo. El viaje lo hicieron y se encontraban en las instalaciones de SPW del país. Sin duda alguna, las instalaciones de Texas las superaban por mucho, pero era lo que tenían y funcionaba.

Los dreamers night se saludaron muy animosamente con sus antiguos compañeros de departamento. Adalia abrazo a Lamarr, Kakyoin saludó a Stauber con Solemnidad, y Polnareff flirteó un poco con Nitza. El equipo estaba feliz de verlos. Pero el más feliz de ellos, era Keenan.

-¡Lo lograron! -Exclamó acercándose a los tres- ¡Pasaron todas las pruebas!

Keenan sonreía y le dio la mano a cada uno de ellos. Él echó un vistazo hacia detrás de sus compañeros y observó a Porter. El otro líder le hizo una ceña para que procediera con el protocolo establecido por los dirigentes. Keenan dejó de sonreír y su rostro se mantuvo serio. Volvió a felicitarlos.

-Vamos -Dijo finalmente.

Antes de entrar a la sala, se tuvieron que cambiar de ropa a por los trajes de los sujetos de prueba. Era raro ver a Barkley y a Adalia con aquella vestimenta. Entraron a la sala. A diferencia de antes, la cámara de DRP ya no tenía un sólo "inyector", si no cinco. Eran unas cabinas en forma tubular con una compuerta de cristal. Por dentro estaba acolchado con alguna especie de material hidrófobo. A parte de los dreamers, dentro estaban Keenan y Porter junto al experto en DRP, Dun.

-Pueden entrar a los inyectores -Dijo Dun. Barkley entró sin titubiar mientras que los otros miraron a Dun-. No les va a pasar nada, de verdad, ya lo hemos hecho una infinidad de veces. No se preocupen.

Los cuatro accedieron. Porter les dio un vaso con un líquido algo brumoso en el interior. Hacía un efecto parecido a como cuando se le ponen colorantes de comida a la leche, sólo que era grisáceo. Cada uno de ellos lo tomó con algo de inseguridad.

-Bébanlo todo -Indicó Keenan-. Incluso si sabe mal.

Kakyoin se lo llevó a la boca. Sabía terrible. Hizo una mueca y se lo tragó todo. Sintió un cosquilleo en su espalda y sus hombros se tensaron. Se pasó la lengua por los dientes intentando quitarse ese sabor. Era horrible, verdaderamente un infierno, pero poco a poco empezaba a sentirlo menos. De hecho, empezaba a sentirse débil.

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