Llego a casa y veo el auto de mamá que está afuera estacionado, maldita sea. Me quedo frente a la casa por unos segundos, pensando en qué voy a decirle, de seguro fue a por mí a la clínica y no me encontró. No puedo seguir así, necesito ganármela, necesito su confianza de nuevo sino, la tendré detrás de mí y eso arruinará mi plan.
Respiro profundo antes de entrar, pongo la mejor cara que se me ocurre en ese momento. Cuando me siento lista, abro la puerta lentamente. Ella está ahí, sentada en uno de los escalones de la escalera, con los dedos entrelazados debajo de la mandíbula y los codos en las rodillas.
—¿Dónde estabas? —su tono es desanimado, sé que está harta de mí. Me quedo en silencio mientras cierro la puerta—. Respóndeme, ¿dónde estabas? —. Se pone de píe— Dime, ¿por qué no estabas en la clínica? Acaso crees que a mí no me cue...
—Con un amigo —, interrumpo y ella se detiene— estaba con un amigo —digo en voz baja para darle drama al asunto.
—¿Qué amigo? ¿De la universidad? —ladea la cabeza como si no me creyera.
—No, no es de la universidad —respondo sabiendo que menos va a creerme.
—Vaya, no sabía que tenías más amigos fuera, yo pensaba que estabas con aquel chico.
—No. Ya sabes que él dejó de hablarme justo cuando me volví una carga para todos —respondo impulsivamente. Tranquila, ahora no puedes reaccionar así... relajo un poco y sigo —. Es un chico, que he conocido hace poco —. Paso mi mano sobre mi nuca.
—Y, ¿cuándo vas a traerlo? —. Se cruza de brazos y levanta las cejas.
—Ay mamá yo que sé, apenas lo conozco —¡relájate ya!— Yo, voy a presentártelo después, no hay prisa, confía en mí... por favor —. Agacho la mirada, pero antes veo que se lo ha creído.
—Bueno, entonces, yo, voy a confiar —, se puso nerviosa, la he conmovido— pero, quiero conocerlo —dice antes de dirigirse a la cocina.
Se da la vuelta y yo suelto la respiración.
—Las estupideces que debo de hacer —... susurro negando con la cabeza mientras subo las escaleras.
—¿Qué tienes que hacer? —Susy aparece detrás de mí y volteo rápidamente.
—Recuperarme, eso —respondo sin pensarlo mientras asiento con la cabeza y sonrío nostálgicamente.
—Estamos orgullosos por tu progreso —me brinda una sonrisa de tranquilidad, solo asiento y sigo mi camino.
Me aviento a mi cama boca abajo, me siento orgullosa de mí, creo que he hecho un buen trabajo. Debo dejar de comportarme como yo quiero y debo "hacer" lo que los demás quieren que haga, así será más fácil recuperar la confianza de todos y lograr mi plan, al fin...
Me pongo de pie y entro al baño. Cierro con seguro y me acuesto sobre el suelo de la ducha, comienzo a hacer abdominales, las hago rápida y silenciosamente. Extrañaba tanto esto.
Mamá tiro mi bascula a la basura hace como 4 semanas y desde eso no me he pesado, realmente me preocupa subir de peso. Me alimento de vez en cuando pero aun así, siento que mi cuerpo no termina de eliminar todo lo que ingiero.
—¿Danger? —Di, toca la puerta del baño y hace que me asuste.
—Mierda —susurro.
—¿Está todo bien? —. Da de nuevo otro toque y espera mi respuesta.
Me quito lo que llevo puesto y rápidamente abro la llave de la regadera. Me hecho agua y nada más, cierro la llave y me enrollo en mi toalla para salir.
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SOBRIA, DANGER...
Teen FictionMis manos tiemblan, el corazón comienza a latirme más rápido, su voz... El móvil cae de mis manos. En la pantalla ha dejado de correr la llamada y solo puede verse su nombre, quien diría que sería la última; quien diría que incluso estaría con él ha...