Mi vida como la esposa del duque

46. Nietos.

La madre de Leonard se calmó después de desahogarse llorando un rato, y de quejarse de lo mal hijo que era Leonard al haberle ocultado su matrimonio.

Cuando ella estuvo completamente calmada dijo:

_ Y dime, ¿Ya soy abuela?

Olivia se sintió aún más nerviosa cuando su suegra sacó el tema de los niños ya que ella y Leonard nunca habían hablado sobre eso, Leonard tomó un sorbo de té y dijo.

_ Aún no eres abuela.

_ Tienes un año y medio de casado y aún no tienes hijos, no me digas que tienes algún problema.

_ No es eso madre.

_ Estuve casi un año en la fortaleza del norte así que no hemos tenido mucho tiempo.

_ Hum ... Pues más te vale que nos des un nieto pronto ya que a este paso moriré antes de conocerlos.

Leonard tomó la mano de Olivia y la volteo a ver con una mirada pícara y le dijo a su madre.

_ Nos esforzarémos para que veas a tus nietos antes de que mueras.

Olivia al escuchar a Leonard decir que quería tener hijos pronto se sintió muy feliz, ella siempre había pensado que quizá a él no le gustarán los niños ya que nunca había mencionado que quisiera tenerlos.

La madre de Leonard se levantó del sofá y dijo.

_ Han de estar cansados le pediré al mayordomo que prepare todo para su estadía aquí.

El padre de Leonard se levantó del sofá y tomó por los hombros a su esposa y le dijo.

_ Cariño deja que yo me encargue de todo, lo mejor será que regreses a tu habitación y descanses por hoy.

_ ¡Claro que no! No he visto a mi hijo en mucho tiempo, quiero estar todo lo que pueda a su lado antes de que se vaya, por cierto, ¿Cuánto tiempo planean quedarse aquí?

_ Nos iremos después de la temporada de caza.

_ Qué bien, iré a decirle al chef que prepare tus comidas favoritas.

La madre de Leonard se fue y el padre de Leonard dio un suspiro y dijo.

_ Ha... Está mujer me vuelve loco.

El padre de Leonard se acercó a Olivia, tomó su mano y le dijo.

_ Perdona la rudeza de mi esposa, es un poco rara pero es buena persona, espero que le tengas paciencia y bienvenida a esta familia puedes llamarme Leonel, o si prefieres puedes decirme padre.

Olivia se sonrojo y dijo.

_ Si, gracias por recibirnos padre.

_ Qué alegría es tenerte aquí yo siempre quise tener una hija sin embargo mi esposa siempre a tenido un constitución débil así que no pudimos tener más hijos, estoy feliz de que seas mi nuera eres una joven muy hermosa tenle paciencia a este bruto hijo mío, a veces no sabe muy bien cómo expresarse.

_ Padre estoy aquí sabes.

_ Lo sé, pero solo digo la verdad, a veces pienso que lo único bueno que tienes es tu cara.

_ Padre...

_ Ya, ya, no diré nada más tu habitación aún está como la última vez que viniste puedes ir a descansar un rato si quieres, yo iré a ver que tu madre no se exceda, los veo después.

Cuando Leonel se fue Olivia dijo.

_ Tu padre me agrada.

Leonard se quedó mirando a Olivia y levantó una de sus cejas y dijo.

_ ¿Enserio?

_ Sí, parece agradable.

_ Ven vamos arriba a darnos un baño y mientras esperamos a que sea la hora de la cena podemos ir practicando a hacer bebés.

Olivia se sonrojó por las palabras de Leonard y le dijo, no pienso hacer ese tipo de cosas aquí.

_ ¿ Que?

_ Ya escuchaste hasta que regresemos a casa no haremos nada.

Leonard se quedó de piedra con las palabras de Olivia, como ella había estado indispuesta Amelia le había prohibido rotundamente tocar a Olivia hasta que ella se recuperará completamente, después con los preparativos para su viaje tuvo que mucho trabajo, el cual debía hacerlo antes de marcharse y no había podido tocarla, ellos iban a quedarse aproximadamente un mes en casa de sus padres antes de poder regresar, Leonard no pensaba aguantar tanto tiempo, así que rodeo a Olivia por la cintura y le dijo.

_ Mis padres han dicho que quieren un nieto pronto, lo mejor será que empecemos con ello , ¿no te parece?

_ Me da mucha vergüenza hacer eso aquí.

A Leonard le gustaba que Olivia fuera un tan pura e inocente sin embargo había veces en que eso lo fastidiaba mucho, así que la cargó en brazos y pensó convencerla con caricias ya que sabía que con palabras no iba a logrará que ella cambiará de opinión.

_ Por favor bájame.

_ Lo haré cuando lleguemos a la habitación.

Por más que Olivia le pidió a Leonard que la bajara el no lo hizo, la llevó hasta su habitación donde las sirvientas estaban terminando de preparar el baño y les dijo.

_ Ya pueden retirarse déjennos solos y que nadie nos interrumpa.

Olivia se había cubierto la cara con ambas manos por la vergüenza que le daba ser vista por los sirvientes siendo cargada en los brazos de su esposo.

Cuando las sirvientas se retiraron Leonard llevó a Olivia hasta el cuarto de baño y le ayudó a quitarse la ropa y la metió en la bañera él se quitó la ropa y se metió junto a ella ya que la bañera era enorme, eso era algo que a él siempre le había gustado de ese lugar, Leonard comenzó a besarla y ella intentó apartarlo pero el cuerpo de Leonard no cedía.

El comenzó a besarle el cuello y acariciarle los pechos y ella le dijo.

_ Leonard~ para, he dicho que no.

_ Solo estoy te estoy acariciando si no llego hasta el final debería de estar bien, ¿ verdad?

Leonard continuó besándola explorando su boca con su lengua arrancándole un gemido de placer.

_ Sabes para no querer que lo hagamos pareces estar muy dispuesta.

Olivia tenía mucho tiempo de no sentir las manos de Leonard recorrer su cuerpo cada parte que él tocaba, ella sentía que le quemaba y en el fondo no quería que él parara, Leonard volvió a besarle y comenzó a jugar con su cuerpo, Olivia no podía dejar de gemir y de aferrarse a su espalda, él se separó un momento y le preguntó.

_ ¿ De verdad deseas que pare?

Olivia sentía su cabeza nublada por el placer que le daba cada vez que sus

manos acariciaban su cuerpo y al final le dijo.

_ ~No~.

Leonard le dio una sonrisa pícara y le dijo.

_ Eso creía.

Y volvió a besarla.