92.No quiero separarme de ti.

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Cuando Darius terminó de hablar con el duque se fue a su habitación y se dio un baño para quitarse todo el estrés que le había causado hablar con el duque, Darius se sentó al lado de la chimenea con el cabello aún húmedo y se sirvió una copa de vino, él estaba medio adormilado cuando alguien abrió su puerta y lo sorprendió.

Él se puso de pie inmediatamente para ver quien era la persona que acababa de entrar y se llevó una gran sorpresa cuando vio a Dafne de pie junto a la puerta y ella le dijo.

_ Hola.

Darius se quedó completamente inmóvil y se puso pálido ya que el duque acababa de advertirle que debía de cumplir con las condiciones de la duquesa y no había pasado ni un dia cuando ya había empezado a romperlas, Dafne al verlo tan pálido se acercó a él y le dijo .

_ ¿ Te sientes bien, pareces un poco pálido?

_ ¿Qué haces aquí?

_ Quería verte ya que el duque está de regreso y lo más seguro es que te tengas que ir pronto a tu casa, ¿te molesta que haya venido?

_ No solo que la duquesa nos prohibió quedarnos los dos solos en una habitación a puerta cerrada y si ella nos llega a ver seguro que me mata.

Dafne se rio por las palabras de Darius y le dijo.

_ Me parece que tienes una impresión equivocada sobre Olivia, ella es una persona muy amable estoy segura que no nos diría nada, además a esta hora ella ya está durmiendo.

Darius pensó que esa persona amable que Dafne decía que era la duquesa solo se lo mostraba a ella ya que con él, ella solía mostrarse muy reacia y poco amable desde que él había hecho llorar a Dafne al decir que a él no le gustaba ella.

Dafne se acercó a Darius y le dijo.

_¿Has hablado con el duque sobre nosotros?

_ Si, me ha dado su permiso para poder estar cerca de ti.

Dafne se tapó la boca con las manos para no gritar de emoción y le dijo .

_ Te dije que todo saldría bien.

Ella se acercó a Darius y él por poco y se quema con el fuego de la chimenea ya que retrocedió hasta quedarse acorralado entre Dafne y el Fuego.

Dafne estiró su mano y le dijo.

_ Tienes el cabello mojado, si te quedas así te puedes enfermar, siéntate lo secare por ti.

_ Eso no hace falta ya lo haré yo.

_ Por favor déjame hacerlo de todos modos ya estoy aquí.

_ Está bien.

Darius se sentó en una butaca y Dafne tomó una toalla y comenzó a secar su cabello, Darius solo quería que ella terminará pronto y saliera de su habitación, ya que al parecer Dafne ignoraba que sus padres adoptivos eran dos locos que si los encontraban en esa situación lo más seguro era que terminará como comida de lobo.

Dafne estaba de pie frente a Darius mientras le secaba el cabello, él podía sentir el suave perfume que provenía de su cuerpo y deseo poder abrazarla y respirar su aroma.

Cuando Dafne terminó de secarle el cabello le dijo.

_ Listo, ahora ya estás.

Cuando ella se alejó un poco de él deseo que no tuviera que irse y rodeó su cintura con sus brazos, Dafne se sintió avergonzada pero al mismo tiempo feliz, ella acarició su cabello y le dijo.

_ Creí que querías que me fuera.

_ Claro que no, solo tengo miedo de que la pareja ducal no nos deje estar juntos si nos llegan a encontrar a los dos solos en la habitación.

_ Ellos no son malas personas, no deberías decir eso.

_ Ellos son buenos contigo porque son tu familia, con los demás no creas que son tan buenos.

_ ¿Cuándo te irás?

_ Supongo que mañana, ahora que el duque está de regreso, mi presencia aquí ya no es requerida así que volveré a mi trabajo y a mi casa.

_ ¿Vendrás a visitarme?

_ Sí lo haré cada vez que pueda.

_ Te voy a extrañar.

_ Yo también, prometo venir seguido a verte.

_ No te vayas a olvidar de mí.

_ Aunque quisiera no podría hacerlo, tu te has robado mi corazón.

Dafne le dio un beso en la mejilla a Darius y le dijo.

_ Tú también eres parte de mi corazón ahora.

Darius se levantó del sofá y acarició el rostros de Dafne, él acercó su rostro al de ella y tomó aire antes de que sus labios rozaran los de Dafne, ella sintió un ligero sabor a vino en sus labios, al principio el contacto fue suave, pero luego, como si necesitara más, se apoyó contra ella y la beso con ansiedad, su pelo le acaricia la cara.

Dafne sentía que aquello era como un sueño del cual ella no quería despertar y deseo que el tiempo se pudiera detener en aquel preciso momento y que durará para siempre.

Por un momento Darius se dejó llevar y se olvidó por completo de la pareja ducal y de sus amenazas, el odiaba la idea de tener que separarse de Dafne y antes de irse quiso volver a probar sus dulces labios, para así poder recordar ese momento cada vez que la extrañará.

Darius deseo que el tiempo pasara rápidamente y que Dafne cumpliera la mayoría de edad pronto, y así poder casarse con ella y no tener que separarse de ella nunca más.

Mi vida como la esposa del duqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora