Mi vida como la esposa del duque

12. Deseo Y Pasión (parte 1).

Cuando el duque entró en la habitación de Olivia, la encontró dormida en el sillón, él la cargó en sus brazos y la depositó suavemente en la cama y al ver que Olivia estaba despierta le dijo. 

_ No deberías quedarte dormida en cualquier lugar o cogerás un resfriado. 

Olivia se sonrojo de la vergüenza y le dijo. 

_ Es que estaba leyendo y sin darme cuenta me quedé dormida. 

_ Procura no volver a hacerlo. 

_ Si.

El duque estaba un poco ebrio porque el príncipe le había obligado a beber y como no estaba en sus sentidos, apoyó su cabeza en el hombro de Olivia y le dijo. 

_ Hueles muy bien. 

Olivia al sentir al duque tan cerca sintió que el corazón acelerarse como un caballo desbocado, y deseo que el duque se alejara un poco de ella, pero él no lo hizo, en vez de eso acarició el cabello de Olivia y acercó sus labios a su cuello dándole un suave beso y dejándole una marca en su blanca piel, él levantó un momento su cabeza y miró el rostro de Olivia quien estaba roja hasta las orejas por lo que él duque había hecho. 

El duque siempre había pasado el tiempo con mujeres que se tiraban sobre él, pero al ver la reacción de Olivia la consideró novedosa, él la quiso seguir molestando, él acercó su cara hasta que ella pudo sentir su respiración en sus labios y posó sus labios sobre los de Olivia, ella cerró sus ojos como no sabía qué hacer se quedó completamente inmóvil conteniendo su respiración. 

Cuando Leonard separó sus labios de los de ella, Olivia estaba jadeando, él dejó que ella tomara aire y volvió a tomar sus labios dándole un beso aún más profundo que hizo que Olivia se aferrarse a su camisa, él la besó repetidamente hasta que Olivia no pudo más y le empezó a dar golpecitos en el brazo para que la soltara, el duque al ver la manera en la que ella se resistía le preguntó. 

_ ¿Odias que haga esto? 

Olivia jadeando tímidamente le contestó. 

_ No me molesta, pero lo que pasa es que no puedo respirar. 

Al escuchar eso el duque se río por lo que ella le estaba diciendo, al parecer ella no sabía cómo besar y cuando él arrebataba sus labios ella contenía la respiración, eso hizo que Leonard quisiera continuar besándola y mostrarle la manera correcta de hacerlo.

_ Eso es porque lo haces mal, no tienes que contener tu respiración mientras te beso. 

Después de decirle eso él volvió a tomar sus labios pero esta vez se aseguró que Olivia estuviera respirando mientras él lo hacía, el duque al ver que ella lo estaba haciendo, sus besos  eran dulces y tiernos, ya que no quería presionarla.

Olivia empezó a seguir el movimiento de sus labios, disfrutando de la calidez de los besos que el duque le estaba dando, ella jamás se imaginó que algún día estaría de aquella manera con él, ya que el duque le había dejado en claro que él no tenía ningún interés por ella. 

Olivia no entendía porqué él había cambiado de opinión pero los besos que Leonard le daba no le molestaban, al contrario, a ella le gustaban, Olivia sabía que eso era normal entre una pareja casada así que no puso ninguna resistencia y se dejó llevar por el duque. 

El comenzó a quitarse la camisa dejando ver su maravilloso torso desnudo, Olivia estaba tan nerviosa que nuevamente se le olvido como respirar y se apartó bruscamente de él cogiendo una bocanada de aire.

El duque acarició su cabello, una dulce caricia que tranquilizó su alborotado corazón.

Él posó suavemente sus labios sobre los suyos y lentamente continuó cubriendo su boca con sus besos, pequeños y dulces como el toque de una pluma, él corazón de Olivia estaba alborotado, como si un pájaro revoloteara dentro de su pecho e intentara salir.