Mi vida como la esposa del duque

23. Pasión desenfrenada.

Cuando Alexis se fue Leonard abrazo fuertemente a Olivia, ella se había puesto roja como un tomate ya que los sirvientes les estaban viendo, ella intentó separarse de él repetidas veces pero él no quería soltarla así que ella se armó de valor y le dijo.

_ Mi señor podrías soltarme, los sirvientes nos están viendo.

Cuando Olivia le dijo eso inmediatamente Leonard les dio una mirada aterradora a los sirvientes quienes dejaron todo lo que estaban haciendo y los dejaron solos y le dijo a Olivia.

_ Así estás más cómoda.

Olivia no dijo nada solamente asintió con la cabeza, Leonard comenzó a besarle el cuello dejándole una marca roja en su delicada piel y le dijo.

_ No me gusta que le sonrías a otros hombres.

Olivia quedó muy sorprendida y se giró para ver el rostro del duque, dijo.

_ ¡ Ha!

_ Tu eres mía no puedes sonreírle a otros hombres.

_ Yo solo quería ser amable ya que era tu amigo.

_ Aún así no me gusta.

_ Entonces procuraré no ser tan amable la próxima vez.

El duque de sólo pensar que su esposa volviera a hablar con Alexis se molesto y la besó hasta dejarla sin aliento, su beso había sido fuerte y feroz como si quisiera devorarla, ella sintió como todo su cuerpo se calentaba en los brazos de su esposo, ella no sabía qué era lo que realmente sentía Leonard por ella y eso la ponía un poco ansiosa.

Leonard besaba a Olivia con pasión y desenfreno, Olivia se sentía muy avergonzada de estar haciendo aquello en aquel lugar donde los sirvientes podían escuchar sus jadeos así que se separó un momento de Leonard y le dijo.

_ ¡Ah~! Por favor aquí no.

Al decirle eso Leonard inmediatamente la tomó en brazos y la llevó a su habitación, el deseo que sentía por Olivia lo estaba volviendo loco ella era su delirio, su lujuria , su dulce tentación , ella era la primera mujer que desataba sus deseos mas salvajes y provocaron su pasión ,él la depositó suavemente en la cama y comenzó a desvestirla mientras la comía a besos, los suaves y carnosos labios de Olivia sabían a miel para Leonard y no se cansaba de besarle.

Él había estado con muchas mujeres pero ninguna le había hecho sentir de esa manera , su cuerpo su boca y su corazón él quería que ella le perteneciera por completo .

El acariciaba sus pechos mientras la besaba, Olivia sentía el deseo en sus labios cuando pasaban por su piel ,mordisqueando suavemente hasta hacerla enloquecer ,todo su cuerpo ardía con un fuego abrazador y deseaba más de él, más de sus besos de sus Caricias quería embriagarse por completo en él.

Leonard entrelazo su lengua con la de Olivia arrancando gemidos de excitación de su garganta, él estaba impaciente por entrar en ella, se quitó apresuradamente la ropa y la tiró al suelo y cuando ambos estaban desnudos sin ninguna pieza de ropa que se interpusiera entre ellos, abrió sus piernas y acaricio su entrada con su miembro caliente y endurecido bañándolo en sus jugos de amor los cuales se estaban desbordando de su hendidura .

Leonard entró en ella de manera salvaje haciendo enloquecer de placer a Olivia cada penetración era fuerte e implacable ese día no había dulzura solo una pasión desbocada y sin control , él siempre se había controlado a la hora de poseerla pero esa noche no podía hacerlo aunque quisiera, su razón se encontraba nublada por la lujuria y la pasión.

La habitación se llenó de sonidos obscenos, Olivia llegó rápidamente al clímax por la intensidad con la que Leonard la penetraba , pero él estaba lejos de terminar espero un momento para que Olivia se recuperara y volvió a hundirse en ella Olivia se aferró a su cuello, sentía que todo su cuerpo se estremecía y temblaba , Leonard estaba siendo implacable esa noche con ella, la acariciaba y besaba sin darle descanso alguno y ella temía enloquecer en sus brazos si seguía de esa manera y le dijo.

_ ¡Ah! por favor ve más lento.

_ No te gusta que lo haga de esta manera .

_ No es eso, es que siento que moriré si sigues así.

Leonard beso la mejilla de Olivia y le dijo.

_ Nunca he escuchado que alguien haya muerto de placer , solo relájate prometo que será muy placentero.

Leonard bajo hasta sus pechos y los mordisqueo Olivia aulló de placer y le enterró las uñas en el hombro él siguió penetrándola hasta que ambos llegaron al clímax , Leonard llenó el vientre de Olivia con su blanco semen ,ella sintió que su vista se nublaba pero esta vez Leonard no dejo que se desmayara le mordió el cuello e hizo que ella recuperara la conciencia , él continuó haciéndola suya repetidas veces y solo dejo que Olivia durmiera unas cuantas horas esa noche.

A la maña siguiente Olivia se sentía sumamente cansada y le dolía la espalda, Leonard dormía a su lado plácidamente, mientras veía a su esposo dormido se preguntó qué sentía él por ella, él siempre dulce y apasionado con ella pero eso no significaba que la amara, Olivia tenía miedo de saber que era realmente lo que él sentía por ella ya que con cada día que pasaba ella menos quería alejarse de él.

Tenía miedo de que algún día él se enamorara de otra mujer y la dejara, por eso seguía tomando tónicos anticonceptivos, ella no sabía si él quería hijos ya que él nunca había expresado tal deseo, Olivia no quería dar a luz a un hijo que no fuera amado por su padre así que hasta que él no dijera que quería hijos ella seguiría tomándolo.