Mi vida como la esposa del duque

47. Te Amo.

Leonard entrelazo su lengua con la de Olivia, sus manos se movían juguetonamente alrededor de su cuerpo, él la levantó por la cintura y la colocó sobre él, ella se aferró a su cuello mientras se devoraba en un apasionado beso.

Las manos de Leonard bajaron hasta colocarse en medio de las piernas de Olivia, acarició su entrada con su miembro endurecido y caliente, como tenían mucho tiempo de no hacerlo le costó un poco entrar en ella ya que estaba muy apretada.

El siguió estimulando, jugando con sus pechos y mordisqueándole el cuello, Olivia enterró sus manos en el suave cabello negro de Leonard, revolviéndolo y llenándose de él, había pasado un tiempo desde que él la había hecho suya, y aunque en un principio había dicho que no, ella no podía evitar que su cuerpo reaccionará ante él.

Leonard empujo hasta el interior de Olivia y ella dio un pequeño gritito cuando él lo hizo, ya que ella había estado tan concentrada en los besos que la había tomado por sorpresa, él se separó un poco de ella le acarició el rostro y le preguntó.

_ ¿Estás bien?

Olivia volvió a besarle y le dijo.

_ Si.

Leonard puso sus manos en las caderas de Olivia y comenzó a penetrarla, ella se aferró a su cuello porque sentía como si se fuera a caer si no lo agarraba con fuerza, instintivamente Olivia comenzó a mover sus caderas al principio lentamente y poco a poco la intensidad de sus movimientos fueron subiendo.

Gemidos inundaron aquel lugar, ella intentó mantener su voz apagada sin embargo no podía, el placer que sentía era demasiado grande, cada vez que Leonard la penetraba su cuerpo temblaba, ella le había extrañado mucho, sus cuerpos desnudos chocando entre sí, llevándola a la locura, Olivia sin darse cuenta se había enamorado de él, le amaba y quería decírselo ya no le importaba si él sentía lo mismo que ella, solo deseaba gritarlo mientras él la hacía suya.

Olivia abrazo a Leonard y le dijo.

_ Te amo.

Leonard al escuchar eso se sintió eufórico, por un momento sintió como si hubiera consumido opio, las palabras que salieron de la boca de su pequeña esposa le hicieron muy feliz, él no podía creer que ella le perteneciera por completo él la penetró ferozmente hasta que ambos llegaron al clímax, depósito todo su semen en su interior, Olivia temblaba sobre Leonard, él tuvo que sujetarla con fuerza para ella no se cayera, le acarició el cabello y espero unos momentos a que ella se calmara y le dijo.

_ Yo también te amo. Y la beso suave y dulcemente.

Olivia al separarse de él abrió los ojos como platos y le dijo.

_¿ Qué has dicho?

_ He dicho que también te amo.

Olivia al escuchar claramente esas palabras de la boca de su esposo se sintió tan feliz que pensó que quizá fuera un sueño así que se pellizcó la mejilla y dijo.

_¡Auch! ¿No estoy soñando?, ¿esto es real de verdad me amas?

Leonard acarició la marca roja que Olivia acaba de dejarse en la mejilla por haberse pellizcado y le dijo.

_ No es ningún sueño, te amo.

Olivia no pudo evitar comenzar a llorar de la alegría, ella pensaba que su amor era unilateral, jamás había pensado que su amor era correspondido, Leonard tomó su rostro lloroso entre sus manos, besó sus lágrimas y le preguntó.

_ ¿Por qué lloras?

_ Es que estoy feliz, siempre creí que estabas conmigo solo porque eres amable jamás me imaginé que me amarás.

Leonard atrapó una lágrima con sus labios y le dijo.

_ Nunca he sido amable con ninguna otra mujer aparte de ti, soy amable contigo porque eres tu y te amo.

Olivia rodeó a Leonard por el cuello y le dijo.

_ Te amo. Y le beso.

Ellos hicieron el amor una vez más antes de bañarse ya que debían de bajar a cenar, Leonard le dijo a Olivia que no hacía falta que bajaran, ya que él quería continuar poseyéndola, sin embargo ella dio un rotundo "No" a esa idea, esa sería la primera vez que ella iba a cenar con sus suegros así que no podía ser descortés y quedarse en la habitación.

Después de que terminarán de bañarse Olivia le secó el cabello a Leonard con una toalla, él la molestaba todo el rato mientras lo hacía deslizaba su mano por su muslo o le tocaba los pechos y como no paraba de tentarla todo el rato ella le dio un golpe en la mano para que parará.

Al terminar de secarle el cabello Leonard se cambió, Olivia todavía estaba envuelta en su bata de baño y tenía el cabello revuelto como el de un nido de pájaros ya que mientras hacían el amor él enterró sus manos en su cabello, y al parecer se lo había alborotado y enredado a tal punto que ella no podría peinarse si no tenía ayuda ella al verse en el espejo dijo.

_ Dile a las sirvientas que vengan a ayudarme, estoy hecha un desastre.

Leonard se acercó, le dio un beso en la frente y le dijo.

_ A mi me parece que luces hermosa, quizá logres hacer tendencia con ese peinado.

Olivia se enfado por lo que decía Leonard, y le dio un manotazo en el pecho pero al final fue ella la que se hizo daño ya que su pecho era tan firme y fuerte que parecía estar hecho de piedra, ella se quejo un poco, y Leonard le dijo.

_ Eso te pasa por ser tan impulsiva.

Leonard le tomó la mano, la besó y le dijo.

_ Será mejor que no vuelvas a hacer eso, no me gusta ver herida a la mujer que amo.

Olivia se sonrojo al escuchar a Leonard decirle que la amaba tan fácilmente, Leonard lo decía con una sonrisa pícara en su rostro, él era tan hermoso y sexi que al final Olivia no pudo seguir diciendo nada más y asintió con su cabeza.

El salió de la habitación y unos minutos después entraron Rita y Sofía

Ellas al ver a Olivia tan despeinada le preguntaron.

_ Mi lady pero que le ha pasado.